CAPITULO 18

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...CAPITULO 18...

-No hace falta que digas nada.

Chris le dio un rápido beso en los labios y volvió a descender hasta sus pechos...

-Pero yo...

Chris alzo la mirada para encontrarse con la de Dulce.

-Eres virgen, lo sé.

-¿Cómo lo has...?

Chris tomo un pezón en su boca y Dulce gimió, luego sin apartarse apenas de su pecho acaricio el otro con una mano.

-Dulce no tengas miedo, confía en mí.

Christopher succiono, mordió y chupo hasta saciarse de los pechos de Dulce, cuando ya estaban hinchados y del color del pelo de Dulce, Chris descendió con besos hasta el ombligo de Dulce, se paró para dar atención en esa zona depositando un leve beso y después siguió bajando...

Abrió lentamente las piernas de Dulce, ella exhausta se dejaba hacer, aquello no podía ser real... era tan... maravilloso... Se colocó en las piernas de ella y acaricio con su aliento el centro de Dulce, ella tembló ante aquel contacto y Chris rio, sin apartar su boca de aquella zona...

-Dime que me amas...

-Chris...

-Dulce dime que me amas...

El lamio de una vez todo su ser y ella se tuvo que agarrar a las sabanas para no tomar del pelo a Chris y obligarle a que volviera a repetir aquello...

Volvió a repetir el movimiento siguiéndole después con uno de sus dedos.

-Por favor.

-La palabra mágica...

-Chris, por favor... te amo.

Chris esbozo una sonrisa y lamiendo el punto clave de Dulce, paso un dedo por su hendidura para ver el estado de su excitación, lo estaba y mucho, introdujo dos dedos y Dulce gimió de placer.

-Me encanta verte así... suplicándome.

Chris siguió torturando a Dulce, introducía lentamente sus dedos para luego volverlos a meter en un ritmo rápido, mientras su lengua pasaba de su sexo a sus muslos interiores, Dulce solo podía gemir y gritar, apenas podía respirar, nunca había sentido aquello y si Chris siguiera así iba a morir de placer. ¿Qué mejor manera?

Dulce se iba acercado, miles de sentimientos la recorrían, los espasmos cada vez eran más grandes, su cuerpo se estremecía y cuando estaba a punto de llegar Chris se apartó... Dulce protesto pero Chris la cayo con un beso, se desnudó rápidamente y pego su frente con la de Dulce...

-Esto va a ser mejor cariño, te lo prometo.

Chris abrió las piernas de Dulce con su rodilla y se colocó en ella, la beso y masajeo sus pechos con las manos, pasando el dedo pulgar por su pezón.

El sexo de Chris rozaba con el vientre de Dulce, ella gimió al sentir el contacto y un miedo se apodero de ella, era grande, muy grande, quizás... demasiado grande...

Prisionera por obligaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora