Entro en la habitación y Connor, tras de mí, me sigue y cierra la puerta. Se queda apoyado, mirándome fijamente, esperando a que sea yo quien empiece a hablar.
-Sé que he estado rara-susurro.
-¿Rara? Te pasas un día entero sin querer hablar con nadie, al día siguiente nos llevas a la feria y me entero de que Niall está enamorado de ti, te dejo hablar con él y, ¿para qué? Al día siguiente estabas haciendo un esfuerzo sobrehumano para tenerme cerca, te dejo un día tranquila para que te aclares y hoy ya siento una conexión entre Niall y tú que nosotros dos jamás hemos tenido. ¡Joder! ¿Así va a acabar todo? Me acerqué a ti aquel día en el bar porque eras diferente, te sentía así y de repente siento que me mientes igual que lo haría cualquiera. ¿Sabes? Niall me dijo que, el día que aceptaste venirte a vivir conmigo, cuando saliste, se te veía tremendamente arrepentida, me dijo que poco te faltaba para huir, pero aun así lo hiciste. Y si no lo hubieras hecho, ahora seguiríamos juntos.
-¿Estás rompiendo conmigo?-salto-¿Porque he estado unos días rara y porque como a Niall le gusto ya das por hecho que es recíproco?
-Te dejo porque si ahora me desnudara y te pidiera que te acostaras conmigo, tragarías profundo y suspirarías antes de aceptar y porque, después, te irías corriendo a ducharte y quitar mi rastro. No me odias, no te doy asco, eso lo sé, pero también sé que no me has dejado porque me tienes cariño y porque igualmente te vas en una semana y no tendrás que aguantar mucho. Neiva, por favor, baja el telón ya. Me quieres, te quiero, pero no es como debería. A mí también me gustaría no haberme dado cuenta, pero ya ves. Convertiste esta casa en tu pueblo para poder encontrarte y, al final, fui yo quien te encontró.
-No quiero perderte tan pronto, Connor-pronuncio con voz rota, sintiendo cómo las primeras lágrimas descienden por mis mejillas-Tú lo has dicho, no te he dejado porque te quiero, tal vez no como debería, pero te quiero. Me has enseñado tantas cosas, me has dado tantísimos buenos momentos... Contigo he vivido, he sido feliz, he disfrutado y he reído como nunca. ¿Dejarnos de hablar 5 días antes de irme? Eso me destruiría.
-Igual que tú me has destruido a mí.
La respuesta me impacta. Doy dos pasos hacia atrás, me quedo sin palabras. Siento un cuchillo atravesándome de canto a canto.
-Tienes razón-sentencio-No te mereces que diga otra cosa y no mereces mis lágrimas-me las quito con rabia-Lo siento mucho, quería evitar esto y lo he empeorado. Lo siento mucho, de verdad.
Asiente.
-¿Puedes dejarme dormir solo hoy?
-Claro, tú tranquilo-me voy directa a la puerta, desde ella le miro una vez más antes de salir.
-Ya puedes irte tranquila a dormir con Niall-susurra.
Me paro en seco, no me giro, pero sí cojo el po,o con muchísima más fuerza.
-Dormiré en la misma habitación que ayer, en el sofá y sola-le digo-De hecho, deja que coja un pijama-voy directa al armario y cojo uno.
Después ya sí que salgo de la habitación sin decir nada más y, de hecho, ni siquiera me paso por el salón para despedirme de Niall. Me meto en la habitación, me tapo con las mismas mantas que me arroparon anoche y cierro los ojos. Aunque no pueda dormir lo más mínimo, prefiero fingir que tengo alguna oportunidad. Intentar dejar mi mente en blanco y marchar.
Y lo peor es que, en cierta manera, he conseguido lo que más deseaba, pero, lejos de ser la más feliz, me siento la peor persona del mundo, porque por no ser valiente, por no arriesgar, he dañado a una persona muy importante para mí. Y ahora ni siquiera sé si va a seguir hablándome.
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Convirtámonos en leyenda.
FanficDicen que las leyendas irlandesas guardan más secretos de los que parecen revelar. Hay magia, amor y esperanza en cada relato y una gran lección en cada palabra. Yo misma me críe escuchando cada historia y aprendiendo de cada punto que estas guardan...