Fénix es la quinta parte de la saga Melodías; sin embargo, se puede leer como una historia independiente.
El orden correcto para leer la saga sin terminar con spoilers es:
1. La Melodía de Aura I: Preludio
2. La Melodía de Aura II: Obsidiana
3. La M...
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Mi café frío es el único motor que posee mi cuerpo para no dormirme de pie. Desperté en el autobús cuando ya todos estaban abajo, sólo Dimas me esperó. No tuvimos tiempo de hablar, pues Mike entró a pedirnos que nos apresuremos para la prueba de sonido a la que ya íbamos tarde.
Y aquí estamos en el estadio en el cual se presentará Gray y The Witcher en unas horas. Henrik y So son los únicos de MalaVentura que nos han acompañado, Eric también porque no le queda de otra al ocupar mi lugar.
Lucy igual está aquí, claro, revolotea alrededor de Dimas en cada oportunidad mientras aguardamos a que los técnicos de sonido conecten los instrumentos. Aura y Sofía me han lanzado infinidad de miradas, quieren que me acerque a Dimas, pero no tengo ánimos ni para hablar, mucho menos para enfrentarme a la vivaracha Lucy.
Estoy bien aquí, sentada al borde del escenario con las piernas al aire mientras imagino cómo en unas horas este sitio estará abarrotado de personas. Cada mañana se aleja la posibilidad de que vuelva a subirme a un escenario sin importar lo mucho que desee hacerlo.
—Quería disculparme.
Nicolás se sienta a mi lado. Me preocupa qué pueda pensar Dimas al verme hablar con él, sé lo mucho que duele observar situaciones similares.
—¿Por qué?
El bajista juega con la plumilla azul eléctrica que siempre usa.
—No respeté tu relación con Dimas... —suspira—. Es sólo que... a Eric le funcionó, ¿sabes?
—Algo he escuchado...
Mis uñas están desarregladas, las analizo con tal de evitar la mirada del chico.
—El ex prometido de Aura acababa de fallecer, ella llamó a Dimas para buscar apoyo, pero él no contestó sus llamadas para no tener problemas con Minerva... —narra con voz apagada y la mirada perdida en la plumilla entre sus dedos—. Eric notó las llamadas, la llamó sin dudarlo, fue el único que estuvo con ella en esos momentos. Aura quería verlo feliz, ayudarlo con la misteriosa chica de la que él se había enamorado, presionó lo necesario hasta que Eric le confesó que era ella... —Levanta la vista hacia el fondo del estadio—. Creí que nunca se lo diría...
Minerva suelta unos cuántos gritos al técnico de sonido que casi deja caer su violín.
—¿Tú lo sabías desde hacía mucho?
—Todos lo sabíamos —ríe—. Incluso Dimas, creo que fue el primero en descubrirlo. Eric hasta cantaba rancheras y boleros cuando estaba borracho, le gustaba mucho la de Sin Ti, ¿la has escuchado?
La imagen me hace reír también.
—Me parece que sí, aunque me cuesta imaginar a Eric cantando eso...