Capítulo 20

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Julio, 2018.
Grecia.

Paulo Dybala.

Luego de unos días en Italia junto a mi novia, decidimos pasar lo que me queda de vacaciones en Grecia, Mykonos para ser más exactos, uno de los lugares más hermosos de éste país.

Luego de confirmar nuestra relación oficialmente, las redes sociales y medios estaban revolucionados, muy.

Me fijo en las publicaciones de la gente que sigo en Instagram e inevitablemente busco su nombre y la stalkeo, otra vez. Su última foto seguía siendo la que subió en Los Angeles junto a él, Asensio, y que la foto sea tan sugerente me ponía de mal humor. ¿Era necesario?

Veo si los mensajes que le envié por la red social fueron contestados o por menos vistos pero claramente me estaba ignorando, Instagram era mi único medio de comunicación ya que en Twitter y WhatsApp me bloqueó.

Bianca se estaba comportando como una nena, era una chiquilina y yo ya no necesitaba eso en mi vida.

—¡Buen día, amor!— bloqueo rápidamente mi celular mientras veo a mi novia salir de la casa que estábamos alquilando, llevando un vestido de playa y bajo del mismo un bikini negro, con el pelo perfectamente peinado y la cara limpia y libre de su excesivo maquillaje.

Oriana era una mina, muy hermosa, pero a veces el exceso de su producción no la hacía ver tan bonita. Al natural era una preciosura... como Bianca.

Entonces mis pensamientos proyectan la imagen de Julenk, la tenista era bellísima, al natural, de mal humor, recién despierta, teniendo sexo o posterior a ello. Pero lo que más le llamaba la atención de la mendocina era su sinceridad, sin importar quién o la situación ella era totalmente sincera y mucho de eso en su vida no tenía.

» Eu, chiquito— me llama la cantante, rompiendo la burbuja de mis pensamientos sobre Julenk— ¿Estás bien?— pregunta, acariciando la parte de atrás de mi cabeza. Rodea la tumbona donde estoy sentado y se sienta sobre mi piernas para comenzar a besar mi cuello.

—¿Podemos coger acá?— pregunto con una sonrisa de nene chiquito, seguramente.

Estábamos sobre las tumbonas blancas que estaban a un costado de las puertas de la casa y cerca de la piscina que tenía la misma, había un largo paredón rodeando el exterior así que era imposible que alguien nos viera.

—¿Vos estas loco?— pregunta alterada, levantándose de encima mio, bufo.

Bianca hubiera dicho que sí. Y otra vez las estoy comparando y esta mal pero no puedo dejar de hacerlo, es algo que hago inconscientemente.

Oriana entra a la casa murmurando que va a desayunar y si tengo ganas que la acompañé.

Suspiro por lo bajo, desbloqueo el celular por ver por última vez el perfil de Bianca, bajo hasta encontrar una de las fotos que subía mientras estaba en Rusia, su sonrisa es lo que más me llama la atención.

Creo que la extraño y eso esta muy, pero muy, mal.

***

paulodybala

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R U M O R S  | ᴘᴀᴜʟᴏ ᴅʏʙᴀʟᴀ [terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora