La Hija De La Sirvienta

Capitulo 4

Christopher

De conducir y conducir, encontré a mis amigos charlando y riendo mientras caminaban. Acelere hasta ellos y toque bocina, rápidamente voltearon. Pare enfrente de ellos.

Chris:Hola-dije abriendo la ventanilla con una sonrisa- chicos.- abrí la puerta y slai del auto- ¿Y?¿Les gusta?- pregunté apoyandome en mi coche.

Richard:No me gusta- dijo serio pero luego sonrio- lo amo- chocamos los cinco.

Zabdiel:¡Wow! Esta genial Chris-Chocamos los cinco también.

Chris:Me encanta mi papá le pidió al de la tienda que lo guarde, mi papá es el mejor.

Joel:Si amigo, es lo bueno de ser ricos.

Chris:Si, este bebé es el mejor regalo- golpeo el techo de mi bebé.

Richard:Ya lo creo hermano, está genial.

Erick:Somos ricos, tendremos siempre los mejores autos.

Zabdiel:Es verdad, mi mamá pensó que querré más a mi auto que a ella- ríe-. Pero no es un problema. Estoy enamorado del azul.

Cada uno tiene un auto, menos Erick, dijo que pronto lo tendrá. Eligió un Ferrari gtc 4 Lusso 2016 color rojo fuego.

Zabdiel tiene un ferrari 458 Italia color azul pitufo, es hermoso.

Joel un Ferrari también, Ferrari GTC4 Lusso, color negro.

Richard también un Ferrari gtc4 Lusso color blanco.

Joel:ami me encanta el mio
Auto De Joel

Richard:ami me trajo Joel

Chris:y el tuyo Erickin ¿pa' cuando?

Erick:mañana ya lo verán es una belleza

Zabdiel:morimos por verlo eh wey

Richard:oigan tengo hambre¿vamos ala cafeteria?

Joel:huy si tengo hambre!

Chris:yo más, vamos suban- los cuatro subieron a mi auto: Zabdiel en el asiento del copiloto y Joel, Richard y Erick detrás.

El recorrido fue divertido, Erick puso la opción de entender la radio e íbamos cantando a todo pulmón.

Estacione el auto detrás de uno deportivo negro, apague a mi bebé y salimos de el.

Mire un local grande que tenía un letrero grande que nombraba en nombre del lugar: café y restaurante "luna nueva".

Erick:¿Comemos dentro o afuera?

Richard:A dentro, hay aire acondicionado.

Joel:Si es mejor adentro.

Los cinco nos pusimos de acuerdo, así que entramos, al entrar sentí el frío viento del aire acondicionado y la música. Sip, lo mejor sin duda fue venir adentro.

Recorrí el lugar con la mirada. Es lindo, esta la mitad café y mitad restaurante. Algunas mesas eran de cinco o menos. Había una televisión donde estaba la canción Daisy de Ashnikko.

Caminamos hacia una mesa de cinco, mis amigos agarraron un menú y comenzaron a ver que querían comer.

Seguí recorriendo el lugar, es lindo, no se porque nunca vine.

Mi mirada paro en una chica que estaba de espaldas atendiendo una mesa, se me hacía familiar.

Se dio vuelta para caminar hacia la barra y darle una hoja a un chico. Voltio su mirada hacia el lugar y pude verla bien.

No...

Puede...

Ser...

Es ella.

Tn

Me puse a escribir una rima que se me vino a la cabeza en mi pequeña libreta.

Candela:Oye- la mire- hay un grupo de chicos que entraron.

Tn:¿Y?- la mire confundida volviendo a escribir.

Candela:Es que uno no te deja de mirar- canturrea alargando la a.

Tn:¿Y me debe preocupar?- reí.

Candela:Iré a atenderlos el de ojos claros se ve que tiene hambre- dio un golpe al mostrador, agarró su libreta y lápiz para irse.

¿Un chico mirándome? El único hombre que me miró fue un viejo pervertido que intentaba sobrepasasrse conmigo. Con suerte Kevin trabajo ese día y me ayudo. Y con más suerte es que ese viejo no volvió nunca más.

Me dio curiosidad y voltie para ver a ese chico―enrealidas es para ver si es un chico y no es otro viejo pervertido―. Mire la mesa donde estaba atendiendo Candela, busque al chico y era...

No-Puede-Ser

¿Es el?

Sin duda el mundo me debe odiar.