CAPITULO 89

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  Al terminar de alistarme, baje lo más rápido que pude y me conseguí a Zayn en el patio montado ya en el auto, con el motor encendido y a punto de partir—no si, déjame si quieres—dije para mí, ya que él se encontraba muy lejos como para escucharme. Acomode mi saco y corrí donde la camioneta y me monte en el asiento del copiloto—tenías que levantarte a las cuatro y media de la mañana, no he desayunado y me has atrasado—refunfuño y me regaño entre dientes—disculpe señor Malik, pero según su lista, la hora tope en la que debería presentarse en la empresa eran las siete y de hecho, usted puede llegar a la hora que desee, al fin y al cabo, es el jefe—le recordé mientras registraba sus tareas en una agenda que conseguí sobre la mesa, supuse que era para mí. Y no me importaba si no.

{*...}

El día transcurrió lento y pesado, Zayn se había dedicado todo el día a someterme en el trabajo, no había dejado de darme órdenes y ordenes... posiblemente soñaría con cada una de ellas.
Al llegar a casa, me di una larga ducha y me concentre en hacer el almuerzo, esta mañana había pasado hambre, Zayn no se dignó en darme si quiera un poco de lo que había ordenado en un Restaurant cercano... desgraciado. Como todos los días, prepare una de las recetas que en los libros de cocina se encontraban, Zayn comió y yo lo hice después de limpiar.

Las horas pasaron rápidas, nada comparadas a la de esta mañana, estas habían parecido eternas y hechas para mi sufrimiento. Cuando llego la noche, me procure en hacer una sencilla cena el cual sería apetitoso para Zayn. E hicimos con en el almuerzo, el comió primero y yo después de haber terminado de limpiar.

Como habíamos planteado ayer, no nos hablamos, miramos o hicimos contacto físico en el transcurso de la tarde y si llego a dirigirme alguna palabra, era sobre negocios o para solicitarme algún mandato emergente o para reclamarme sobre algún error que supuse haber cometido.
Así hasta dos semanas después.

***

Me levante, cepille y bañe, hoy había tenido "día libre" ya que, Zayn había planteado una reunión con la gerencia y administradores de la empresa, por lo tanto muchos de los trabajadores nos quedamos en casa.

Centre mi atención en limpiar, barrer, ordenar y lavar la ropa todo lo que pude de ocupar de la mañana, ya casi era hora del almuerzo y Zayn no aparecía, supuse que se quedaría a comer con sus colegas de trabajo o comería afuera en algún restaurant. Hasta que el sonido del teléfono de la casa, me saco de mis pensamientos, conteste y era Zayn, obvio—necesito que hagas almuerzo para dos personas, llevare a alguien comer allá, espero todo esté en orden, es importante para mí—escuche su voz ronca detrás de la línea, ¿Traería nuevamente y seguido a esas chicas que conseguía en bares?—no cocinare para otra de esas mujercitas, que se cocinen ellas—reproche—solo hazlo—y sin más que decir, finalizo la llamada.  

SUBASTADA. (ZAYN MALIK) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora