SUBASTADA. (ZAYN MALIK) TERMINADA

CAPITULO 81

 El sol de ésta mañana había sido tan intenso que había logrado estresarme, estaba sola, no había trabajo el día de hoy y Zayn no aparecía por estos lares lo cual me hacía feliz, no quería verlo, me sentía vulnerable, como la ultima vez... Lo cual no era agradable su la historia se ha repetido, saber que he caído en sus encantos... Nuevamente, me mata cada vez que en mi mente se hacía presente.

Me había puesto a limpiar toda la casa, no me interesaba el hecho de que el cuerpo me dolía y me iba a dar un dolor infernal el día de mañana, porque yo sólo quería alejar mi mente del mundo, sólo eso pero me parecía que era lo más difícil que podía haber estado intentando desde hace mucho ya.

El tiempo pasaba lento y yo lo mataba con todo el quehacer pendiente, tenia que llamar al señor Roger, quien se encarga de limpiar y asear la piscina. Tome el celular local y marqué su número, necesitaba llamarlo porque si no Zayn se enojaría, no le gusta ver alguna cosa sucia en su casa y menos la piscina, no lo había visto usarla en estos días y de hecho, ni yo había pensado usarla. No era muy amante de eso.

[*...]

En hora y media el señor Roger había atravesado la puerta principal y se había instalado en el patio trasero a comenzar su trabajo, parecía concentrado en lo que hacía así que decido dejarlo solo y subo hasta mi habitación donde pensaba tomar una ducha tibia para quitar ese ya fatigoso olor de mi cuerpo, causado por el sudor que había largado aseando toda la casa, sin ningún rincón que me salte.

Deje que el agua corriera por mi cuerpo mientras mantenía mis ojos suavemente cerrados, dejando que la tensión de mis músculos bajaran y me relajara, fregué todo mi cuerpo y al terminar, 10 minutos máximo después, me rodee con mi paño y con uno diminuto, seque mis pies llenos de agua.

Me coloque una pijama de dormir y cepille mis dientes, baje hasta la cocina y busque que preparar de cena. Aun escuché ruido en el patio así que uní un plato más a la mesa, hice alguna que otra receta en los libros de cheff de hombres extraños que a Zayn pertenecían. Me había dicho hace mucho que los usara ya que, ahí se encuentran sus recetas favoritas, y no me podía quejar porque son deliciosas.

En el momento de que estaba preparando la cena, escuche la puerta abrirse con llave y seguidamente ser cerrada, podría ser Zayn o también podría que el señor Roger se habrá ido pero, no sin su dinero ¿o si?

Asome mi cabeza y ahí estaba como siempre tan elegante y serio, Zayn desabrochaba su corbata roja poco a poco, se veía algo cansado lo cual no me afecto en absoluto, su trabajo era fuerte y se lo merecía en la mayoría de las veces cuando se comportaba como el mismísimo idiota... O sea, siempre.

Me oculte de nuevo y preste atención a lo que debía, bajo la candela de las hornillas y busco en el refrigerio algo que tomar, pero no encuentro nada y tampoco me sorprendía ya que hacía falta hacer algo de mercado y a Zayn parece haberse olvidado de eso. Voltee mi cuerpo hacía la entrada de la cocina, tenía pensado buscar y decirle a Zayn lo que hacía falta, pero no me pareció necesario ya que este se encontraba en el mural de la puerta, con sus manos en los bolsillos, su rostro serio y fruncido, sin alguna expresión, como siempre.