—¿Eres psicólogo?— indagó JiMin divertido.—Yo también viví eso cuando era joven— respondió YoonGi antes de soltar un pequeño suspiro, con la vista clavada en el suelo pero manteniéndose alerta.
Un pequeño ruido de algo chocando duramente llamó la atención de ambos.
JiMin, encerrado en su propia burbuja de curiosidad reflejada en sus oscuros ojos, optó por apoyar su pie en el duro asfalto para bajar del capó y asomar su cabeza, encontrándose solamente con el espesor de las sombras cubriendo los autos abandonados de aquella destruida calle.
—¿Qué fue eso?— salió de sus labios como un murmullo confundido, con la ceja alzada y la vista paseándose por todos lados.
—No lo sé, deberíamos entrar ya— soltó YoonGi con el entrecejo fruncido ante la desconfianza que le tenía a la situación. Porque para él podría tratarse de cualquier cosa, y ninguna posibilidad entraba en algo exactamente bueno para ellos—. Deben ser infectados.
—¿Pero y si es tu amigo?— puso una opcional el rubio dando unos ligeros pasos hacia adelante, pretendiendo adentrarse en la oscuridad que abrazaba lejos de YoonGi, siendo confidente para cubrir cualquier cosa extraña que sucediera por ahí.
Suga lo tomó del brazo deteniendo su andar, negando seriamente con la cabeza. Creyendo que el chico estaba mal de la mente por querer meterse ahí, por detrás de los autos y totalmente solo, pues él no tenía planeado seguirle el paso.
—No lo creo, vámonos ya— musculló entre dientes, volteandose con la mano aún sosteniendo la extremidad de JiMin, estando dispuesto a llevárselo arrastrando si era necesario. Más el rubio fue más escurridizo y se le escapó con vivacidad, yendo distraídamente hacia donde él creía que había provenido aquel ruido—. Niño, ven aquí— bufó con cansancio, y aunque estaba dispuesto a hacer todo lo contrario decidió seguirlo, caminando a unos metros detrás de él.
JiMin daba pasos ciertamente inseguros, buscando algo que realmente no sabía dónde se encontraba, sin saber por dónde empezar a buscar. YoonGi, en cambio, caminaba con vagancia a sus espaldas, procurando cuidarlo de cualquier ataque que podría sorprenderlos a ambos, no, en definitiva él no quería eso. Observaba con cierto desinterés esa maraña de cabellos color rubio que tenía en frente, y luego daba un rápido vistazo a su alrededor para asegurarse de que no hubiera nada raro por allí, pensando en que antes ya se había cruzado con aquél pelo claro que se le hacía terriblemente conocido a su memoria.
—Ya ves que no hay nada aquí, volvamos— insistió una vez más cuando lo vió deterse de repente, obteniendo la misma respuesta por parte del chico, YoonGi estaba siendo jodidamente ignorado por un mocoso arrastrado por la curiosidad.
—YoonGi, hay alguien ahí— señaló JiMin en un pequeño murmullo, y Suga se asomó solo un poco para ver prácticamente nada, pues un auto interfería con lo que el menor le indicaba.
Los dos estando ahí quietos agudizaron su sentido auditivo, oyendo unos penosos sollozos y jadeos pidiendo por ayuda. La oscura ceja del militar se alzó mientras veía descolocado como el rubio se acercaba a eso que para ellos era completamente desconocido. Sus sentidos se pusieron alertas al instante extendiendo su mano para tomar la campera de Jimin entre sus finos dedos, más ésta se resbaló lentamente de sus yemas rojizas, dejándolo suelto.
—Ayudame por favor.
Decidió quedarse ahí parado solo para observar como JiMin se agachaba frente a un muchacho. Pensó que mantenerse a una distancia prudente sería la opción correcta, ya Park sabría que hacer con ese chico mientras él se encargaba de hacerle de perro guardián, esperando atentamente a que algo ocurriera para saltar al ataque, claro, si era que el destino les tenía preparado algo en ese mismo instante.

ESTÁS LEYENDO
INFECTED
Fanfiction" 03/09/2023. ¡Último momento! Una gran infección de la cual se desconoce su proveniencia atacó repentinamente a los habitantes de la ciudad de Seúl, aparenta volver violentos a los infectados convirtiéndolos en una especie de caníbales que atacan s...