Epílogo

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“Estás cordialmente invitado a la celebración del cumpleaños número 15 de Jungkook.

De gala. Será su pequeña coronación aunque él no lo desee porque “ya soy lo suficientemente grande para ello”.

De: el padrino hermoso y genial, Kim Namjoon junto a la pulga molesta Kim TaeTae.

pd. ¡No olvides el regalo!;)”.








-Pero…

-Jungkook, no. ¡No te lo quites! -repetí entre dientes, bajando sus manos para volver a acomodar su corbata de manera correcta. Él bufó, casi pataleando.

-Pero pica.

-Jungkook.

-Ah, papá Tae. Dejalo. No me gusta, ¡no me gusta!

-¡Jung!

-Sólo para que no te quejes después -y finalmente se quedó quieto, rodando los ojos y jugando con mi corbata hasta que logré acomodarla dentro de su traje. Jungkook se puso de pie en cuanto se dio cuenta había acabado y se echó a correr escaleras abajo, gritando <¡Yuyu!> cuando llegó a la sala. Jungkook se estaba poniendo pesado a veces, pero había otros momentos donde era incluso más empalagoso que de pequeño; claro, esos momentos eran casi escasos. Demasiado. Acomode mi corbata que había sacado de su lugar y bajé hasta la cocina, donde Jin peleaba con una botella de vino.

-¿Sabes que para eso existen los sacacorchos, hyung?

-¡Esta cosa no puede vencerme! -exclamó sin mirarme, liándose más hasta unos segundos después que bufó y dejó la botella en la mesa del centro-. ¿Dónde está? Esa cosa estaba aquí, en este cajón.

-Movimos las cosas la última vez que Jungkook lavó los trastes y medio los cuchillos en otro cajón y me corté -le señalé en la otra esquina, donde en la esquina había una pequeña pegatina de un cuchillo, si así no se equivocaba-. La fiesta está empezando y tú ya quieres ponerte ebrio.

-Shh. Tengo 36, necesito esto -se quejó volviéndose para sacar dos vasos de los gabinetes de arriba, sirviendo en ellos un poco de vino, y me extendió uno-. Y tú también, ¿te hizo enojar de nuevo?

-¡Sé que tiene quince y esas mierdas! Pero está insoportable a veces.

Jin se rió, pellizcando mi nariz y burlándose de mi queja.

-Suerte que no me hago cargo de él casi todos los días. En cambio tú… oye, tengo una pregunta, ¿cuándo empezó a decirte papá?

Incluso la arruga que se ocasionó por fruncir el ceño se desvaneció cuando lo preguntó. Él volvió a burlarse cuando vio la sonrisa que puse en mi rostro y apretó mi hombro contento.

-No sé, hace unos meses, cuando habías ido de nuevo a un viaje y estaba triste. Yo… me quedé toda la noche con él en su habitación cantando canciones juntos y luego él sólo lo dijo… en ese momento creí que era porque estaba más dormido que despierto, pero me ha estado llamando así desde entonces. Me hizo increíblemente feliz escucharle, aunque a veces me sentía mal pero Hobi me convenció de que estaba bien. Todos estos años en que he sido el novio de Hobi lo he visto crecer, madurar en muchos aspectos, lo estamos criando juntos…

-Ay Tae, pero tú… debes de superar esa culpa que tienes porque él te diga papá. Eres eso. Hani siempre será su mamá.

-Pero él… ya sabes, ha dicho cosas.

-¿Cosas?

-Sí, cosas -moví mis manos, incapaz de decirlo. Pero Jin sabía cosas porque era confidente de Jungkook, así que me entendió rápido.

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