THE MASTER PLAN - BEN HARDY

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practice makes perfection

—Entonces, ¿cuál es plan? —la pregunta de Ben le hizo sonreír, recordando cómo ella le había preguntado exactamente lo mismo algún momento atrás.

El tiempo parecía haber volado y, en un abrir y cerrar de ojos, se encontraban a tan sólo dos días del matrimonio de Greg y Ashley. Y pese a que el motivo principal por el que ________ y Ben se habían reunido en el departamento del actor era el discutir detalles sobre el evento familiar al que asistirían como pareja falsa, estuvieron más de dos horas comiendo pizza y viendo la sexta temporada de su serie favorita, antes de tocar el tema que realmente les convocaba.

—La cena de ensayo es mañana a las nueve, pero Greg y Ashley necesitan ayuda para recibir a los invitados. Debemos estar allí a las siete, así que deberías pasar por mí a las seis. Obviamente, la vestimenta, es formal —explicó la muchacha. Ben parecía estar tomando nota mental de todo lo que escuchaba y asentía cada vez que podía—. El matrimonio es al día siguiente. Nos reuniremos en la iglesia a las doce y treinta. No te preocupes de la corbata, he comprado una que combina a la perfección con mi vestido. —le dijo, dejando en evidencia que tenía toda la situación más que controlada.

—Vaya, veo has pensado en todo —comentó el rubio, geniunamente impresionado—. Ahora, ¿qué debo saber de tu familia?, cuéntame sobre ellos.

—Bueno, mamá es chef, pero no ha trabajado desde que se mudó a acá a Londres. Cualquier cosa que le hables sobre cocina le parecerá interesante. Papá es oncólogo, pero se dedica más a la investigación sobre nuevas curas para el cáncer que a la atención de pacientes. Greg estudió literatura y trabaja como profesor Universidad de Londres. Ambos aman el rugby, así que cuando converses con ellos tan sólo diles que te encanta ese deporte y te amarán por siempre.

—¡Me encanta el rugby! —Hardy celebró y ________ rio. Luego de unos segundos, otra pregunta surgió en su cabeza—. ¿Qué haremos para que crean que somos pareja? Creo que debemos ver eso, para que lo que hagamos no tome por sorpresa al otro.

—Sí, es una buena idea —aceptó la muchacha—. Bueno, primero te presentaré a una gran cantidad de tías, tíos y primas durante la cena de ensayo, y es probable que deba presentártelas otra vez al otro día, porque no se acordarán de ti —Ben se rio ante el gesto de desagrado que su novia falsa hizo—. Creo que debemos estar tomados de la mano cada vez que se pueda, ¿qué opinas? —él sólo asintió—. Puedes abrazarme, también, de vez en cuando, y prestarme tu chaqueta cuando tenga frío. Espero que con eso sea suficiente para convencerlos.

—¿Y bailaremos?

—Oh, no, eso no es necesario, creo. —apenas ella dijo aquello, el joven actor frunció el ceño.

—¿Cómo no vamos a bailar?, ¡es una boda!

—No sé bailar, Ben y no sé tú pero creo que yo no estoy de ánimos para una humillación frente a toda mi familia.

—Oh, pero, ¡vamos!, ¡bailar no es difícil! —se quejó, riendo—. El otro día bailaste conmigo, ¿o acaso no te acuerdas?.

Por supuesto que recordaba aquel suceso de unas semanas atrás. Para suerte de ________, las cosas no se volvieron incómodas como ella temía, luego de los besos que compartió con Ben aquella noche en el club nocturno. Después de aquella efusiva muestra de cariño frente a Katriona, el actor y ella tomaron taxis separados a sus respectivos hogares, y, al otro día, las cosas parecían seguir como siempre, aunque una pequeña parte de la joven anhelaba que algo hubiese cambiado luego de ese beso. Lamentablemente, a simple vista, nada lo había hecho. El plan seguía en pie y estaba más que segura de que muy pronto Ben recuperaría a su ex novia.