Crónicas de un corazón roto.

La noche más larga pt II

Jungkook se levantó del suelo y pasó la mano por su labio roto. Su abdomen dolía y estaba sangrando.

-Maldito cubito, tenía que darme justo en el rostro... ahora que explicación daré mañana, un ojo morado y un labio roto. ¿Acaso hoy es el día de golpeen a Jeon Jungkook?

Introdujo su llave en la cerradura y abrió lentamente. Sabía que Jimin estaría ahí, y que era inevitable la confrontación, pero quería retrasarla un poco más.

Cuando entró, el castaño lo miró sorprendido y corrió hasta él.

-K-kookie, ¿Q-quién fue?- lo ayudó a llegar al sofá y corrió hasta el baño para traer el botiquín.

-¿El enfermero Park va a salvarme de nuevo?

Jimin comenzó a limpiar el rostro de Jungkook

-Las veces que sean necesarias Jeon.- Respondió soltando un suspiro que parecía ser de cansancio.

Kook tomó su mano para que Jimin pusiera atención a lo que estaba a punto de decirle.

-Jiminie... yo...-

-¿Fue Yoongi?- lo interrumpió volviendo a su labor.

-Hoseok en el ojo, Yoongi en el labio.

-¿Quién es Hoseok?

-El nuevo novio de Tae... ¡Auch!.- dijo Jungkook quejándose.

Jimin había apretado la gasa contra el rostro de JK cuando escuchó eso.

-¡¿Tae tiene novio?!... lo siento.- se disculpó apenado por su acción.

-Sí, eso parece...

Jungkook se puso de pie y caminó directo a la nevera, necesitaba una cerveza y un pedazo de hielo para su rostro.

-El cubito dijo que querías hablar...¿Cerveza?.- sacó una mano para ofrecer una lata.

-¿Por qué lo llamas cubito?

-Es un cubito de azúcar...

Jimin sonrió, es cierto que el pálido era un poco amargado, pero eso era demasiado.

-Quiero terminar nuestra relación.- soltó sin más.

Jungkook se detuvo de la barra que dividía la cocina de la sala. Es cierto que ya lo veía venir, pero no creyó que su suerte fuera tan mala como para hacerlo perder todo en una sola noche.

-No quiero que pienses que es tu culpa, o digas que soy una buena persona y no me mereces. La verdad es que mis motivos son demasiado egoístas y patéticos Jungkook.

No quiero ser tu premio de consolación, o tu pretexto para decir "no puedo"

-Jimin-ah...-

-Déjame terminar, por favor...

Quiero que seas libre, que no tengas ataduras, que busques tu felicidad de cualquier modo. Pero sobretodo... quiero que me elijas sin que yo tenga que pedirlo.

Jungkook bajó la mirada, estaba apenado y triste.

Era más que obvio que aún sentía cosas por Taehyung, pero ya era tiempo de soltarlo completamente. Él tenía razón, debían empezar a ser felices sin la presencia del otro en sus respectivas vidas.

Caminó hasta llegar a Jimin y lo abrazó.

-Enano...-soltó un pequeño suspiro.- Quiero ser feliz contigo... realmente soy feliz contigo.

Jimin negó y acarició su rostro. Dejó un par de llaves en sus manos y lo abrazó nuevamente.

-Siempre voy a ser tu amigo y te voy a cuidar, justo como lo prometí. Pero tienes que darme un poco de tiempo, y darte a ti una segunda oportunidad.

Dio media vuelta y tomó la maleta que estaba detrás del sillón, se puso el abrigó y sonrió una vez más.

-¿Recuerdas lo que dijiste el día en que se fue?

-Jimin...-

-Dilo.

-Juro por mi vida que no voy a soltarlo, si lo vuelvo a ver...- sus lágrimas comenzaron a caer nuevamente.

-Jungkook, las personas cambian. Los sentimientos no.

Salió del departamento y cerró la puerta detrás de él.

Bajó las escaleras rápidamente y se tiró al piso para poder llorar sin ser interrumpido una vez más.