CAPÍTULO 24: PUNTO DE QUIEBRE

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Con la irrupción de los Mugiwaras, quienes se habían pronunciado atravesando el boquete que habían formado en aquella sala de subastas de humanos, el auditorio se había quedado mudo. Considerando que los espectadores tenían delante al más poderoso dúo de los Supernova: Monkey D. Luffy y Eustass Kid, era totalmente comprensible. Esos dos sanguinarios piratas estaban ahí respirando el mismo aire que ellos. Segundos antes, inconcebible para cualquiera.

Entre el público, el caos no tardó en hacerse presente.
Estaban más que aterrados y abandonar el recinto de pronto se había convertido en la máxima prioridad. Bajo ninguna circunstancia nadie quería quedarse a presenciar el estallido de ningún combate. De modo que el presentador, que era el encargado de mostrar los productos delante de todos y subastarlos, también había huido dejando atrás al artículo encerrado en la jaula.

Se escuchaba el ir y venir de la gente. Se aglomeraban en la salida formando un tapón de personas. Demasiado escándalo. A más de uno la situación debió de enervarlo. De ahí que inesperadamente pareciera que el tiempo se congelara y la gente empezara a caer uno por uno al igual que un castillo de naipes al desplomarse.

¿Qué te ha hecho esta "pobre" gente para que sean víctimas de tu Haki? —acusó Usopp que no se lo podía creer.

No he sido yo —negó Luffy con convicción —Ha sido él.

Mira a quiénes tienes aquí, Gatita... ¿No crees que ya va siendo hora de que los recibas como se debe? —se burlaba Kid tratando de evadir los ojos del azabache.

A la bella muchacha que acompañaba al fiero Kid en aquella subasta, algo se le retorcía en el estómago. ¿Qué diantres hacían ellos en un sitio como ese? Aunque era innegable que se sentía como una coincidencia poéticamente perfecta.

No tan solo se sorprendía por que hubieran entrado sin decir agua va; menuda entrada habían hecho, sino que también por lo que Luffy había entrado gritando a todo pulmón. ¿A qué navegante se refería? ¿Era posible que la hubiesen encontrado y la quisiesen de vuelta? No, eso no tenía sentido.

Disimuladamente, sin la necesidad de girar su cabeza y sin levantarse de la butaca; añadiendo que era la única persona despierta que quedaba en ellas, miró de reojo a los que unas semanas atrás habían sido su tripulación y que de pronto, ninguno le pareció familiar.

Le producía un no sé qué al examinarlos. No parecían ellos. Sus presencias eran imponentes hasta decir basta. Venían con un objetivo claro impreso en aquellas miradas que en ese momento aún le era difícil de adivinar.

*

*

"—¡Maldita sea...! Si por lo menos hubiese sabido antes que ella era la oficial de ese bastardo... —exhaló Luffy —Lo he decidido, necesitamos un nuevo navegante que nos lleve a Erlandia. Iremos al rescate de Vivi.

Es lo mejor. Ahora que ya sabemos la verdad no hay nada más que hacer —suspiró Sanji quien debajo de sus ojos se abultaban terribles ojeras."

¿Tenía que sentir resentimiento? Únicamente sentía que era demasiada casualidad encontrársela ahí, en Erlandia. En el interior de Luffy, cuántas emociones se desbocaban y se compactaban en divisar esa inconfundible cabellera naranja.
Tensó los puños y un sudor frío empezó a recorrerle la piel.
La mujer que estaba sentada dándole la espalda como si nunca se hubieran conocido era la culpable de esa adrenalina en sus venas poniéndolo en una difícil tesitura.

TRAICIÓN PLANIFICADA (Luffy×Nami)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora