Un mes había pasado desde que Sofia y yo viajamos a Estados Unidos, para acompañar a Simon en su gira por ese país. La verdad que fue muy agotador andar por tantas ciudades, con mil valijas y con una bebe que cumplió sus seis meses de vida mientras viajábamos en un avión rumbo a Nueva York. Aunque fue muy cansado no me arrepentía de habernos unido a esta locura junto a Simon ya que así no se perdió todo un mes de la vida de Sofi, mes en donde le salieron sus primeros dos dientes, aprendió aplaudir y muchas otras cosas mas. La gira fue todo un éxito y por fin había terminado dando así al inicio de unas muy merecidas vacaciones en familia.
Cansados, pero muy felices por lo logrado, arribamos a nuestra casa de Cancun. Simon la compro hace uno año, quería que tuviéramos un lugar en donde llegar con nuestra familia cuando pasemos largas temporadas en Mexico. Intentamos que mi suegra y a la abuela se mudaran a nuestra casa ya que era mas amplia que su casa actual, pero no hubo poder humano que convenciera a la abuela de dejar su hogar de toda la vida. Sin embargo no se pudieron escapar de quedarse en casa durante toda nuestra estadía, ya que Simon las había chantajeado con Sofia.
Estábamos muy emocionados de que las abuelas por fin conocieran a Sofi, ya que solo la habían visto por video llamada y fotos. La familia de Simon se encontraba en la puerta esperándonos, al vernos corrieron hacia nosotros. Mi esposo abrió sus brazos para recibir el abrazo de su madre y abuela, pero fue grande su decepción cuando pasaron por un lado ignorándolo por completo. Yo quise reír al ver su rostro por ese tremendo rechazo, pero quede igual de indignada cuando me arrebataron a mi hija de los brazos y sin saludarme. Fui y abrace a Simon de lado, mientras ambos observábamos a las abuelas llenar de mimos y besos a nuestra pequeña. Sofia las acepto sin ningún problema, regresando cada cariño con una hermosa sonrisa.
"Les valió nuestra presencia, tú y yo pasamos a ser dos ceros a la izquierda, Bonita." Ambos nos sonreímos. "Bueno abuelas hermosas, y a nosotros no nos piensan saludar? Pregunto Simon, logrando al fin captar la atención de ambas. "Ay, perdóname mijito, es que es mi primera bisnieta y me emocione de mas, pero ven acá para apapacharte." Hablo la abuela acercándose a nosotros para abrazarnos. "Están llorando? Pregunte al percibir unas lagrimas en sus rostros. "Y qué pensabas que no íbamos a llorar? Tenemos seis meses muriendo por poder tenerla así cerquita entre nuestros brazos." Contesto la abuela mientras me dejaba de abrazar. "Se perdieron seis meses de su vida porque quisieron, yo les ofrecí llevarlas a Buenos Aires para que pasaran un tiempo con nosotros." Les reprocho Simon. "Hijo tu sabes que tanto tu abuela como yo, le tenemos pavor a los aviones, ademas mi mamá ya no esta en edad para esos viajes tan largos." Hablo la madre de Simon mientras terminaba de saludarnos y cargaba a su nieta en sus brazos. "Camila te estoy escuchando, no hables de la edad de tu madre aunque tengas razón. La verdad que sí viaje para Argentina hace unos años fue porque Ambar me obligo." Todos reímos, incluyendo Sofia, quien dejo salir una carcajada, de esas que me alegran el día.
"Ay pero mira que hermoso te ríes mi amor! Mira esos ojitos azules con sus pestañas grandes y rizadas, tu pelito güerito, y esos rollitos que se te hacen en los bracitos y piernas. Muero de amor eres la bebe más hermosa del mundo." Dijo la abuela dejando un beso en el brazo de mi gordita. "La verdad es que si esta hermosa, los videos y fotos no le hacen justicia a la semejante belleza de mi nieta. Se nota que la hicieron con mucho amor." Dijo Camila. "Si y con muchas ganas también." Contesto Simon riendo. Yo lo fulmine con la mirada mientras un leve sonrojo se apoderaba de mi rostro por la vergüenza. "Pues muchas ganas no creo que le hayas puesto mijito, la niña es una mini copia de su mamá y de ti no tiene ni el modo de mear." El comentario de la abuela provoco que Simon dejara de reír y se quedara sin habla, ahora sí lo había matado. Nosotras al contrario no podíamos parar de reírnos de él.
"Bueno muy chistosas, ya denme a mi bebe que la quiero abrazar." Dijo un muy serio Simon, extendiendo sus brazos para que le entregaran a su hija. "Ni lo pienses, la niña es de nosotros por todo el tiempo que estén aquí. Solo se la entregaremos a su madre para que la pueda amamantar. Desde este momento quedan solos y sin hijos, tómenlo como una segunda luna de miel." Dijo la abuela cerrándonos un ojo y sin mas comenzaron a subir hacia las habitaciones con mi hija, dejándonos ahi pasmados y sin chance de protestar. "Es joda cierto? Yo no voy a poder estar sin mí bebe Simon." Él se rió de mi preocupación. "Parece que no conoces a mi abuela mi amor, sabes que es muy bromista." "Si, lo sé pero también la creo capaz de secuestrar a nuestra hija todo el mes que estemos acá." Ambos comenzamos a reír, la verdad es que la abuela Isabel es un loquita adorable.
Simon dejo de reír y fijo su mirada en algo, camino lentamente a una mesa en la sala que se encontraba repleta de fotografías familiares. Levanto uno de los porta retratos y se quedo observándolo con la mirada triste. Me acerque a el y vi que la foto que miraba con tanta nostalgia, era una donde se encontraba un señor morocho de algunos treinta años de edad muy parecido a Simon, junto a el se encontraba un hermoso niño de unos siete años quien le sonreía a mas no poder a otro señor mas grande de edad. Cada uno sostenía una guitarra en sus manos, conocía muy bien la del niño era esa inconfundible guitarra azul con relámpagos amarillos, que solía cargar Simon por todas partes y que ahora guardaba como un gran tesoro en su estudio de grabación. Era una bella foto de Simon, su padre y su abuelo, justo la tomaron el día que ambos le regalaron esa guitarra a Simon. "Los extrañas mucho cierto?" Pregunte abrazándolo por atrás poniendo mi barbilla en su hombro. "Si, como no tienes idea, me hubiera gustado que ellos estuvieran compartiendo la alegría de conocer a Sofia y que ya mas grande le enseñaran a tocar la guitarra tal y como lo hicieron conmigo." Me contesto con la voz entre cortada.
Cuando Simon y yo nos hicimos novios, le pedi que me contara todo sobre su familia. Su padre y abuelo materno murieron en accidente automovilístico cuando el tenia ocho años. A causa de eso Simon fue criado por su madre y abuela , ambas trabajaron mucho por sacar a su hogar y a Simon adelante, pese a todo su dolor. Simon no tiene mucha familia, su papá fue hijo único y los padres de el murieron antes de que Simon naciera, así que solo tiene a su mamá, abuela, tia y tres primos. Por eso es que Simon quiere construir una familia grande a mi lado, siempre anhelo eso.
"Sabes, tengo miedo que se repita la historia, que me pase algo y las deje a ti y a Sofia solas tal como paso con ellos." Confeso Simon al borde del llanto. Yo negué y me pare frente a él. "No digas eso mi amor, vos vas estar a nuestro lado siempre, veras a tu hija graduarse, casarse, conocerás a tus nietos y moriremos juntos ya todos viejitos y arrugados." El limpio las lagrimas que corrían por mis mejillas y me beso suavemente, sus labios sabían salados a causa de sus lagrimas. Soltamos nuestros labios lentamente para después juntar nuestras frentes, dejando salir un suspiro. "Te amo tanto Bonita perdóname por hacerte llorar." "Yo te amo mas, y tu dolor siempre sera mi dolor, somos uno mismo mi amor. Pero ya! No debemos estar llorando." Dije secándole las lagrimas y regalándole una sonrisa. "Estamos en tu país, con tu familia y al parecer vos y yo pasaremos mucho tiempo solos, por que no lo aprovechamos ah? Simon levanto la ceja soltando una sonrisa de lado. "Que tiene en mente señora de Alvarez?" Pregunto, pegándome más a su cuerpo y yo rodeaba su cuello con mis brazos. "Que te parece vos, yo, sol, playa y arena, desnudos haciendo el amor." Sugerí en un tono coqueto, mientras veía sus muy apetecible labios y mordía los míos. "Me parece que es algo arriesgado ya que nos podrían ver, pero en peores lugares lo hemos hecho." Dijo capturando mis labios y llevándome en brazos hacia la playa.
Que Sofia creciera rodeada de una familia era importante para nosotros. En Argentina tenia tíos, tias, primos, un bisabuelo, y a sus abuelas Sharon y Silvana. Y en Mexico tenia a las abuelas mas tiernas y consentidoras. Mi hija estaba rodeada de mucho amor, eso y una familia es lo único que pido que nunca falte en su vida.
Hola!!! Hace tiempo me venían pidiendo este one shot y aquí lo tienen espero les guste.