11: Ámame pero no te enamores.

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Pasado

Playlist: ♪♩"From now on", The Features. Y "(Not) The One de Bebe Rexha" ♪♩


Es diciembre veintiuno.

En diez días se acaba el año. En tres días es noche buena y es el último día que los chicos salen juntos al menos en ese año.

Claro que es Niall quién tiene la idea de salir a una cena elegante y luego a un club. Como ahora son nueve, (porque Niall de verdad parece estar muy enfrascado en Perrie) Niall decidió rentar una limosina. Y son nueve porque la linda novia del beta ha traído consigo a sus amigas, quienes todas son tan divertidas para los demás como el resto.

Las tres amigas de Perrie eran, una chica alfa llamada Jesy, con su largo pelo rizado teñido de un muy convincente pelirrojo que tenía la mirada de que podía matar a alguien, pero era muy linda y divertida. Luego estaba una chica morena de cabello negro que era demasiado tierna y que sabía mucho de moda. Leigh, beta, se llevó de maravilla con Zayn al instante. Y en último lugar, una omega de cabello castaño y piel tostada con el nombre de Jade, conocía a Louis también y se llevaban bien, pero sabía mucho de libros y de cómics, así que se llevó mejor con Harry.

Así que todos iban elegantes, con vestidos y faldas, chamarras de punto y jeans ajustados. Zayn y Liam a juego (porque son demasiado patéticos) Harry llevaba una camiseta fajada blanca y abierta hasta la mitad del pecho. Louis no se alejó de él ni un momento, casi babeando por el alfa. Las chicas reían de los chistes y conversaban interesantemente con los chicos. Se abrían botellas y se elevaban brindis sobre las mesas, bajo candelabros de cristal y sobre manteles de seda.

Pero todo terminó saliéndose de contexto. Festejaron en un club, bailando y bebiendo como los adultos responsables que son. (Claro) y rentaron una sala privada de karaoke. (Y por rentar, me refiero a Niall, quién es el que podría sustentar un pequeño país con su fortuna.) Zayn cantó felizmente junto a Leigh y Jesy "Rolling in the deep", y por muy borrachos que estuvieran cantaron sorpresivamente bien. Increíble, incluso.

Liam se moría de la risa junto a Niall y Perrie, mientras se burlaban de los chicos y les abucheaban, lanzándoles papitas y refresco. Jade hablaba hasta por los codos con Harry y Louis se reía de ello. Los nueve sentados en la enorme mesa llena de botanas y refresco y un mesero que les servía alcohol infinito.

La canción "22" de Taylor Swift sonó, así que Niall y Perrie cantaron y se subieron a la mesa. Terminando con un dramático beso en los labios un poco demasiado húmedo. Causando las risas estridentes de Zayn y Jesy.

Fue loco y fue divertido, porque incluso Harry se puso ebrio aquella noche. Y una vez que el alfa bebía, se convertía en la persona más rara del mundo, que incluso cantó "Single Ladies" con Niall mientras las chicas bailaban. (Si, raro) pero Liam grababa todo con su teléfono y subían fotos borrosas a Instagram, videos estúpidos a su Snapchat, cantaban canciones que muchos no conocían, y la máquina de karaoke los abucheaba de vez en cuando.

Y estaba bien, porque eran jóvenes, tontos e inexpertos jóvenes, con una vida por delante y un camino lleno de corazones rotos, risas estridentes y experiencias para marcarles la vida. Estaban listos.

A las casi tres de la mañana, la limosina llevó a todos de vuelta a sus hogares. Con las chicas dormidas una sobre otra y los demás en los brazos de sus parejas. Niall dejó a las amigas de Perrie en sus respectivos apartamentos y dejó a Zayn en casa de Liam. Luego Louis y Harry, quienes se acurrucaron en el fondo del vehículo mirando la cuidad por las ventanas, se bajaron en el suyo, despidiéndose de Niall y Perrie quienes eran los últimos en regresar a casa.

New York (l.s.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora