Capítulo 13. Juntos

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Sonreí por una milesima de segundo hasta que caí en lo obvio, estoy en su habitación.

En su cama, con su camisa del pijama. Mierda, ¿que diablos hiciste anoche ____ Abigail Black Moseley?

Tan rápido reaccioné de lo que estaba sucediendo y de pronto salté de la cama cosa que me hizo arrepentirme minutos despues pues mi cabeza me lo reclamó casi instantaneamente. Al recuperarme del dolor pude ver los detalles, otro lado de la cama estaba destendido, sin embargo no había rastros de alguien más hubiese pasado la noche ahí. 

Al observar el resto de la habitación no había rastro de la ropa que Skandar usó anoche, en la esquina de la cama estaba mi vestido acomodado cuidadosamente junto con una nota escrita a mano: 

Abichuela borracha, relajate que ya se lo que estás pensando. No pasamos la noche juntos aunque lo hubiese deseado de esa forma, no era el momento adecuado. 

Pasé la noche en la habitación de al lado y probablemente cuando revivas ya sera algo tarde. Dejaré comida lista en la nevera, te recomiendo tomes una ducha y me llames cuando estés mas tranquila

Saldré a firmar un contrato pero pasaré el resto de la tarde/noche en casa, te quiero. 

Skandar.

Al terminar de leerla pude respirar con tranquilidad, a pesar de los años, el sabía la forma en la que mi mente funcionaba. No me pensaba torturar con los recuerdos de las cosas que habia hecho o dicho anoche, tendí la cama como pude y tomé mi ropa junto con la nota para subir a mi habitación. 

En mi cama estaban mi abrigo junto con mi bolsa y mi telefono descargado, lo puse a cargar mientras puse musica en la Alexa. Saqué de mi armario un short de mezclilla y una blusa holgada estilo oversize. Antes de meterme a bañar, aspiré el aroma de Skandar en su playera una ultima vez antes de quitarme la ropa y entrar en la regadera. 

Dejé que el agua fria y los body wash relajantes hicieran su trabajo, al salir de la ducha me lavé los dientes y cepillé mi cabello. A pesar de mi resaca sentía una libertad total, mi animo estaba vibrando muy alto. 

Mi telefono comenzó a sonar con el tono de llamada y recordé que estuve sin batería practicamente todo el día. Al mirar la pantalla noté que era Will, así que contesté mientras me ponía unas pantunflas para bajar a la cocina.

Llamada:

Will: DIME QUE ESTÁS VIVAAA! —dijo al otro lado con un aire de exhaltación. 

____: Una ya no se puede quedar sin batería unas horas —dije riendo— claro que estoy viva, incluso estoy en casa. 

Will: Eso lo sé, tonta —dijo ya mas tranquilo— Skandar me mandó un mensaj como a medio dia avisandome que estabas bien y el te había llevado a la casa. 

____: Si, nada de que preocuparse —reí— supongo sigues en casa de Anna?

Will: Es correcto, pasaré la noche aquí —hizo una pausa corta— a menos que te incomode dejarte a solas con Skandar

____: Estaremos bien, tu tranquilo —contesté mientras llenaba un vaso de agua para las pastillas de la resaca— iré al supermercado que está cerca por algunas cosas y pasaré el resto de la noche en la casa, tranquilo que cualquier cosa te mantendré informado. 

Will: Es un trato, pequeña. No dudes en llamarme en caso que te sientas incomoda, recuerda que haría cualquier cosa por ti. 

____: Lo se yo también haría cualquier cosa por ti —dije riendo— saludame a Anna, disfruten y no me hagan tía aun!!

Escuché su risa antes de colgar y después de tomar las pastillas, al abrir la nevera encontré un tupper lleno de spaggetthi a la boloñesa y en otro tupper mas pequeño había ensalada de lechuga con tomates cherry, elotitos, zanahoria y una pizca de queso cheddar. Sonreí mientras sacaba la comida del refri para servirme y calentar la pasta mientras comía la ensalada directo del tupper. Sin darme cuenta empecé a bailar mientras comía, hacía montones que no probaba el sazon de la comida preparada por Skandar, seguí así por un rato hasta que sentí una mirada en el marco de la puerta de la cocina. 

Skandar: Se ve que te sientes mucho mejor —dijo con una sonrisa en su cara. 

Tragué el bocado que tenía en la boca para mirarlo mientras me sonrojaba al asentir. Como si me hubiese leído la mente, el ya se había adelantado con las compras del supermercado pues  en sus manos traía algunas bolsas consigo. 

____: ¿Me leíste la mente mientras dormía? —dije ayudandolo con algunas de las bolsas. 

Skan: Es la conexión que jamás se rompío —contestó mientras ponia las demás bolsas en la barra de la cocina. 

Y vaya que tenía razón, trajo las cosas que yo habría comprado junto con algunos extra's que imagino se le antojaron en el camino. Subí mi mirada para sonreirle, hasta que recordé mi vergonzosa escena de la noche anterior, mi rostró perdió un poco de color y acto seguido habló.

Skan: ____ tranquila, no pasó nada anoche —luego una risa traviesa se salio de su boca— bueno si, pero fue muy divertido. 

Puse mi cara entre mis manos antes de soltar una risa nerviosa, algunas de las imagenes se aclaraban pero me quería morir y enterrarme minimo 3 metros bajo tierra. 

Skan: Es que fuiste a cantarme a todo pulmón, la canción que yo canté cuando me puse mal —dijo riendo— aquella de Paquita la del Barrio —volvío a soltar una carcajada— Cuando decidí que tu concierto ya había durado lo suficiente te tumbaste en mis brazos, tardé media hora en convencerte que te pusieras una pijama porque aun traías el vestido puesto y solo aceptaste cuando te dije que sería una pijama mía —dijo viendome nuevamente. 

No había palabra que saliera de mi boca porque estaba completamente avergonzada y al mismo tiempo quería reír de imaginarme la escena.

Skan: Quiero aclarar —dijo carraspeando— que tu te cambiaste en el baño, jamás me aprovecharía de una situación así.

____: Que pena, de verdad, perdón —balbucee como pude y nos quedamos viendo a los ojos hasta que estallamos en risas. 

Skan: Pasamos de ser los abichuelos a ser las ratas de dos patas —dijo riendo. 

____: Creo que es una respuesta que ya tienes —dije mientras reía— extrañaba esto —solté sin pensar y las risas cesaron. 

Skan: Yo también Abichuela —dijo mientras me daba un abrazo. 

El abrazo se sentía reconfortante, había el sentimiento de pertenencia y era como un rompecabezas, nuestros cuerpos encajaban a la perfección. Todo el dolor, el resentimiento que alguna vez senti lo dejé en el pasado y ahora podía verlo como una enseñanza. 

El levantó mi rostro y me miró a los ojos, sus manos estaban frías lo que indicaba que estaba nervioso sin embargo eso no lo detuvo pues de un momento a otro, sus labios presionaron los mios. 

Nuestro beso era lento, como si ambos aun estuvieramos reconsiderando si esto era una buena idea o no aunque no bastó mas de unos segundos para que pudieramos expresar en ese beso lo que con palabras no habíamos sido capaces. 

Sus labios eran tal como los recordaba, suaves y carnosos con un toqué dulce. Jamás pude sentir con alguien mas lo que estaba sintiendo en este momento con ese simple beso, ninguno de los dos teníamos ganas de separarnos pero la falta de aire nos separó solo unos centimetros, pues sus brazos aun rodeaban los míos.

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Si cambíe un poco la historia pero comprendan que es para darle un poco de sentido, aun asi el factor del drama seguirá presente chicas. 

¿Que pasará con Chris? ¿Acaso Georgie se dará por vencida? Averiguemoslo juntas.

¿Amor a distancia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora