Mi mejor version

Fin de semana

Aneley

Canté y baile todo el viaje, necesitaba esto desconectar, descansar, huir y con él a mi lado era mejor, quería que me perteneciera que me amara de la manera que yo lo amaba, sin límites ni tiempo, pero yo no era para él.

_Estamos llegando.

Lo miré y me derretí, estaba tan hermoso, tocó mi mano y sonrió, abrió el techo del auto y respiré profundo me llené de todo ese aire puro, olía esperanza, paz, olía a casa. Llegamos a una cabaña grande donde nos dieron nuestras llaves y nos guiaron a hacia las nuestras, abrí la puerta saltando, como un niño cuando abre su primer regalo, era gigante con toda la ventana hacia el lago y un balcón que te hacía sentir dentro.

_Bruno esto es increíble, no puede ser tan hermoso

_Es mi regalo, quería que antes de irme te sientas bien.

Me puse rígida, se va, por un momento lo había olvidado, odiaba la idea, pero era su sueño, no el mío. No dije nada y asentí con la cabeza cada uno tenía su cuarto, menos mal porque no paraba de pensar que mi auto control lo dejé en casa, teníamos que prepararnos para cenar, me cambie y salimos.

_Qué bello es todo esto, nuestra cabaña es hermosa, quiero volver para la luna de miel, aunque Pablo quiere ir al mar.

_Decidieron la fecha?

Dije tomando un trago de cerveza y observando a Bruno mirar para otro lado, no quería esta conversación lo sentía.

_El 14 de febrero, San Valentín, No quiero esperar más para que esta belleza sea mi esposa.

Y empezó a besar a Bea como si su vida dependiera de ello

_Basta compórtense, el novio de Mari todavía no conoce sus caras por estar pegados todo el día.

El novio de Mari era callado, bajito, con lentes solo asentía y sonreía a todos los comentarios eran tal para cual, pero se giraba a ver a toda mujer que pasaba por su lado, eso no me agradaba.

_Salimos a bailar necesito sacarme todo este peso de estos años.

_Sacudirse la carrera de encima, An esto recién empieza todavía falta la residencia y las especialidades.

Todos le gritaron a Bruno que era un mala onda y volvió el buen humor; baile y tomé toda la noche, como nunca antes; no recuerdo como desperté en mi cama ni quien me trajo, solo recuerdo unos brazos fuertes y un suave beso en los labios y que soñé toda la noche con mi compañero de cabaña.

Me levanté a desayunar y de ahí nos íbamos a pasar el día al lago. Estaba sentada en la orilla, no era fan de que me vieran en bikini, pero eran mis amigos, solo confiaba en ellos

_ ¿An cómo te sentís?

_Mejor de lo que merezco, pero peor de lo que debería. ¿vos me llevaste a la cama?

_MMM sí, no recuerdas mucho, no

_Lo necesario.

Me giré y corrí al agua, necesitaba sacarme toda la noche de encima, estaba fría pero hermosa. Estuvimos jugando y nadando los seis todo el día y a la noche teníamos fogata, sentados ahí los observé mis amigos, que distinto era todo desde la secundaria ellos estaban para mí y yo para ellos, siempre.

Cuando entré a la cabaña era más de la medianoche, me había quedado hablando con las chicas de sus noches, Mari nos relataba que ayer fue su primera vez y que fue especial, amaba a su chico y eso la hacía dudar de sus planes, estaba tomando agua cuando escuché música desde el balcón y al acercarme esta él, imponente hermoso, mi perdición.