Mi mejor version

Salvandolo

Aneley

A veces quisiera decirle que no, decirle que arregle solo su desastre, pero hay algo que me impulsa hacia él, según Bea es el amor que le tengo, según Mari es mi instinto de ayudar y solucionar los problemas de los demás. Mis padres siempre fueron muy hippies, ellos se olvidaban de pagar las boletas y seguido sufríamos cortes de algún servicio, cuando me fui haciendo mayor tomé esa responsabilidad de asegurarme que estuviéramos bien, pero según ellos solo necesitábamos encontrar lo que nos apasiona y seguirlo y a eso sumarle amor y después, la madre tierra o pacha mamá se encargaba del resto. Por eso quizás siempre busqué estabilidad y mantenerme ocupada planeando mi futuro, amo a mis padres, son grandes padres, pero solo están ahí todos los días igual y yo quería marcar la diferencia en el mundo, quería ayudar y salvar vidas por eso tengo 2 trabajos para mantenerme y estudio medicina.

Empiezo hacer los panqueques cuando aparece él, en calzoncillo y secándose con una toalla el pelo,

_mmm que rico huele eso

Dios, que hice para merecer esto, toda su hermosura, delante de mí y yo girando panqueques, se me pasaron mil cosas por la cabeza y creo que estuve una eternidad mirándolo hasta que muy profundo retumba en mí

_An, ¿estás bien?

_Eh, si, mala noche eso es todo.

Entrecerró los ojos y me ruboricé al instante.

_Hoy es el almuerzo en casa de mamá, estas invitada recordá que nos dan esa tan esperada noticia.

Me había olvidado, sus padres, el almuerzo.

_Uh, bueno, pero tengo que volver temprano abro el negocio hoy a las 17.

_No hay problema, me da excusa para escapar

Trabajaba en una cafetería los fines de semana y en la semana hacía de secretaria a un médico bastante mayor amigo de mis padres. Aunque no eran muy de mi agrado los padres de Bruno, realmente iba solo para apoyarlo a él y comer comida de Rosita su ama de llaves, que cada vez que iba me traía el auto lleno de viandas.

Gloria su mamá era una señora que destilaba clase, pero le faltaba amor, cuando me conoció me desprecio, pero Bruno la puso en su lugar diciéndole que sin mí él ni siquiera estaría donde está en la facultad. Y aunque ella quería que sea abogado como sus padres y su hermana él estaba haciendo una carrera bastante importante, y desde ahí creo que me tolera bastante, por lo menos siempre me invita a los almuerzos. Ella y su marido Julio, se odian siempre discuten y viven en dos alas separadas en la misma propiedad, pero ante la vista de todos ellos son la familia perfecta.

Julio no habla mucho, y cuando habla se queja de su esposa.

_Va tu hermana?

Casi se atraganta con el panqueque sin masticar y tuvo que tomar agua de golpe

_Si, va con el inútil del marido

Estefanía era hermosa, alta y muy delgada para mi gusto, con los mismos ojos que Bruno, era alegre y conservadora y estaba casada con un juez bajito medio gordito que no tenían mucho en común y nunca los vi ni tomarse la mano, es mas en su boda él le beso la mejilla.

_Que bueno, no la veo hace tiempo

_Se fue de viaje por 3 meses a Europa con Camila su amiga.

_Que suerte tienen algunos y yo acá con dos trabajos y salvándote el culo a vos.

_Qué harías sin mí! Me guiño el ojo y se fue a vestir.

Solo suspire, que haría sin él.

En algún momento tengo que salir y hacer mi vida, conocer a alguien que me mueva el piso.

Lo intenté varias veces, pero la inseguridad que tengo con mi cuerpo hace que solo lleguen a sacarme la remera y los termino echando. Es mi culpa, es mi enamoramiento que hace esperar algo que nunca va a pasar.

_Vamos, pasamos por tu casa a cambiarte.

Vivíamos a dos cuadras, solo me puse un vestido negro sobrio que tenía para los funerales y me até el pelo en una cola alta, me puse base, perfume y listo.

Salgo del cuarto y el solo me observa, quisiera entrar en su cabeza para saber qué piensa de mí, me ha dicho alguna vez borracho que soy hermosa o que merezco más, pero siempre se va con mujeres flacas, que dan la sensación de quebrarse al medio.

_Estoy lista!