—¿No crees que RenJun ha estado actuando raro?- Cuestionó Jeno, a lo que Jaemin, quién caminaba a su lado, contestó bufando exageradamente.
Al ver la expresión de confusión total en el rostro del mayor, Jaemin no pudo evitar reir un poco.
— ¿Recién lo notas, y además no sabes el por qué? ah, Jeno-yah. —Jaemin negó con una sonrisa, sin contestar las intrigas que su amigo tenía, haciendo oídos sordos el resto de la caminata.Un tanto más lejos, a cabecera del camino, RenJun y DongHyuck permanecian en un silencio tenso e incómodo, al menos para el mayor de ellos.
DongHyuck caminaba despacio, con su vista en el nocturno cielo, mientras Renjun lo seguía con la mirada, dudando si tomar o no su mano para evitar que se tropezara. Cuando un pequeño pozo apareció en el camino de tierra, RenJun se decidió en entrelazar su mano con fuerza con la del chico más alto.
DongHyuck se detuvo por un momento para verlo a él y a sus manos pero como si no fuera nada, siguió caminando, sin soltar palabra alguna.
Renjun soltó un suspiro con cansancio.
— ¿Acaso no hablaremos más? — DongHyuck levantó sus hombros en un gesto que trató de verse despreocupado, ahora con su vista en el suelo.—Tú dímelo, quizás ahora tienes una prohibición para que te diga algo. —
RenJun frenó de golpe, frenando a su vez a DongHyuck, quién evitó su mirada.
— ¿Estás actuando así por los estúpidos besos? Te dije que me incomodaban. — RenJun no quería que su tono saliera tan agresivo pero por su frustración y sentimientos, simplemente no pudo contenerlo.Aunque DongHyuck intentó ocultar su rostro de la vista ajena, RenJun logró forzarlo a que quedaran cara a cara, de esta forma, siéndole imposible ocultar ante sus ojos el puchero que se formaba en sus labios.
—No es solo eso. — La voz de DongHyuck salió diminuta aunque tratara de sonar con enojo. —¿Por qué siempre quieres alejarme? ¿Tanto me odias?
Las cigarras chillaban bastante fuerte esa noche de verano, incluso si una refrescante brisa apareciera de vez en cuando.
Al estar caminando cerca del río que atravesaba la ciudad, éstos insectos se hacian notar de cerca entre los arbustos y plantas. — ¿Por qué no puedes entenderlo? — RenJun explotó repentinamente asustando a su amigo. —En verdad no lo notas, no notas nada. No te das cuenta que para mi es dificil soportar tus gestos de cariño constantemente cuando mi cabeza se llena de cosas... Sentimientos. Quiero poder pensar en paz, volver a pensar claramente sin que tú seas una de mis preocupaciones ¿Quieres saber por qué te alejo? ¡Es porque me estoy enamorando de ti!
Creí que sería una buena idea ponerte un limite porque estaba asustado de que siguieras causando tanto en mi.Una vez la voz de RenJun se apagó, solo las cigarras y su respiración agitada se oyeron.
DongHyuck se encontró sin palabras, sorprendido y ciertamente, con sus orejas ardiendo. Viendo que a medida que los segundos pasaban RenJun parecia perder poco a poco su convicción, DongHyuck decidió hablar aunque su cabeza aún diera vueltas por la conmoción.
—Realmente pensé que me odiabas...— El sonrojo en las mejillas de RenJun era tan fuerte que brillaban ante la débil luz de la luna y los lejanos faroles de la carretera; por esto, DongHyuck sonrió con mucha más dulzura. —Me alegra que no lo hagas, sino sería un desastre el que me empezaras a gustar.
Renjun pareció no entender bien sus palabras, a lo que DongHyuck decidió hacérselo entender con la acción que RenJun le había prohibido hace semanas, con la diferencia que en esta ocasión, DongHyuck le besaría por primera vez sin que RenJun se rehusara o le alejara antes.
Al sentir lo frio de los labios ajenos sobre su mejilla, RenJun, que había cerrado sus ojos por inercia, los abrió para poder ver la cercanía del rostro de DongHyuck.
— Cuando seamos novios, te besaré propiamente.