Capítulo 10

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Había pasado un mes desde la última vez que lo vi.

Lo admito.

                                                                                                                                                    Lo extraño demasiado.

El no llamaba como siempre, supongo que no me extrañaba. 

Quien extrañaría a alguien como yo? A mi? Sin el mi vida había vuelto a la normalidad, aburrida. Detestaba mi vida. Saben? Poco antes de que dejaramos de comunicarnos había empezado a fantasear con la probabilidad de que podríamos ser algo algun día.

-Porque te interesa tanto?

-Eres mi mejor amiga, Madeleine. Como no importarme lo que te sucede?

Pero no. El solo me veia como su mejor amiga. Genial! 

Ya hasta me soñaba con el. Con un posible nosotros. Soy una estupida. Como puedo ilusionarme así?  Un hombre como Michael nunca querria tener algo conmigo, no más que una amistad. El artista más grande de la historia que le pudiera ver a una simple periodista? De todos modos, siempre dijo que odiaba los periodistas...

Narrador omnisciente:

La luna decoraba la boveda oscura, bajo la luz de la luna dos enamorados se tenían de la mano. Caminando en la playa. El tipo portaba un sombrero negro y ella tenía sus sandalías en la mano disponible. Bañados en color plata se besaron. Y Madeleine despertó gracias a el despertador en su mesilla de noche a la izquierda.
-Diablos! Que buen sueño iba teniendo, estupido despertador! Apagó el despertador y se levantó para darse una ducha, en el camino se dió en el meñique del pie con un borde de la cama. 

-Maldita sea!

Se fue al baño y continuó maldiciendo. 

Alcanzando Lo InalcanzableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora