Dear Sasuke.

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Mi cuerpo estába al tope de emociones, sentía la adrenalina por todo mi cuerpo.- No queda mucho de bueno en mi, nunca lo hubo. Todo lo que podía parecer humano de mi parte solo lo sacaba contigo. Llevo años segandome a mi misma, oprimiendo todo lo que siento para no dejar de verte.-Las lagrimas empezaron a salir solas, sin la necesidad de exaltarme ni entristecerme, simplemente era como sacar algo que a mi cuerpo le sobraba.- Algún día te dije que no puedo ser la buena y es la verdad, simplemente no puedo hacerlo tengo tanto odio dentro de mi que no puedo calmarlo mas, no me importa ya el bien o el mal del resto de la gente.

-La muerte de Nagato te puso sensible, solo necesitas calmarte.

-No puede hacerlo, esta llena de odio.-Las palabras de Itachi hicieron que comenzara a reír a carcajadas.

-Tu no estas lleno de azúcar querubín, pero tienes razón ya no me importa nada mas que satisfacer mi propio odio, matar a todos los que me la deben, hacer pagar a Konoha, Deshacerme de cada desgraciado del mundo, inclusive destruir simplemente por placer, todo eso es lo único que tengo en mente.