Novios por una broma

11_ Buenos días

Día domingo Adrien pudo estar sólo ya que cuando los padres de Marinette descubrieron que se quedó a dormir en la casa de un chico y no de Alya, la chica fue tan regañada.

"No creó poder volver a casa con está lluvia así que me quedaré en casa de alguien."

Ésas fueron las palabras que usó Marinette cuando llamó a sus padres, los cuales creyeron que ése alguien era Alya o otra de sus amigas.

El domingo pasó con normalidad para él y cuando menos se dio cuenta, el día lunes había llegado.

-Hoy, luego de esgrima tienes sesión de fotos, luego práctica con piano, luego debés asistir a una reunión importante, representando a tu padre, al regresar practicaras escritura y a las 23 hs tendrás el resto del día libre.

Dijo Nathalie mientras le quitaba el plató con su desayuno a medio comer, haciendo que el chico dé un suspiro.

-Me voy al colegio.

Avisó antes de agarrar su mochila e irse.

Nathalie cerró sus ojos con preocupación.

¿Por qué su jefe ponía tantas cargas sobre Adrien?

Traer de regreso a su mujer por el bien de Adrien, más bien nuevamente usaba a su hijo para uno de sus propósitos.
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Mientras Adrien era llevado al colegio y Plagg comía queso en el interior de su mochila, miraba por la ventana con aburrimiento.

¿Cómo debe ser desperdiciar el tiempo como un adolescente normal por una vez?

Era algo que no sabía ya que en sus únicos tiempos libres o era perseguido por fans o debía ser héroe.

Al menos con lo segundo podía ver a Ladybug.

El auto se detuvo, dio un suspiro profundo y abrió la puerta.

Hora de comenzar su día.

-¡Hola Adrien!

Un gran saludo lo recibió y levantó la cabeza para ver a una muy alegré Marinette, esperandola.

Como sí un gran peso saliese de encima suyo, en sus labios apareció su primer e imborrable sonrisa en ése día.

-Buenos días.

Marinette se acercó y lo abrazo, cosa a lo que él correspondió, ignorando las burlas de los de alrededor.

Energía restaurada.