Signos de amor [ZODIACO Yaoi/Gay]

🌟Décimo quinto signo🌟

🌠🌠Enjoy 🌠🌠

Sí, eso era una noche incómoda.

Movió su cuerpo hacia la izquierda, queriendo abrazar a Tauro. ¿Desde cuándo la cama era tan dura? ¿Y dónde estaba la almohada que siempre le robaba a su novio? Girando un par de centímetros más, la luz lo cegó pese a tener los ojos cerrados.

Se incorporó de golpe. ¿Dónde estaba? ¿Sagitario lo había vuelto a arrastrar al baño cuando dormía? Si era así, iba a dejar a Libra viudo antes siquiera de casarse.

—Hasta que al fin despiertas.

Volteó hacia Acuario recién separando sus párpados. ¡Ah! Ya se acordaba.

Se acordaba de que quería estrangular al pelinegro hasta la muerte porque, gracias a él, su precioso cuerpo había debido pasar la noche en el frío pavimento, rodeado de sacos de arroz y otras legumbres no comestibles de forma cruda, ¡siquiera había comida para picotear! Indignante.

—Quita tus manos de mi cuello, Géminis.

—¡Je! Me pillaste, hijo de puta—como ya no podía ahorcarlo, se conformó con un ligero puñetazo en el hombro—. Si Tauristotis se enoja conmigo, date por muerto.

—Vale, vale... ¿Sabes?, ¡mientras roncabas, se me ocurrió una excusa para cuando nos pillen aquí!—lo miró expectantes, todo oídos para que Acuario continuara—. Decimos que se me cayó una moneda aquí y que cuando entramos a buscarla el viento cerró la puerta y tuvimos que pasar la noche aquí víctimas de la mierda de puerta que se trae este hotel de lujo.

—¡Fantástico!

—E-Es que a mi amigo se le cayó el viento aquí y cuando entramos a buscarlo una moneda cerró la puerta. —¡Ay! ¿Lo había dicho mal? Por la cara de la chica, muy joven, que los había pillado, juraría que sí. Pero, ¿en qué se había equivocado? ¡Qué complicado!

—Mi amigo es un poco tonto—se apresuró a decir Acuario, acariciando el cabello de Géminis—, ¡y como durmió con frío despertó más bobo! Lo que quería decir era que-

—Lo he entendido—los interrumpió la chica. ¡Vaya! Sí que era inteligente—, y voy a fingir no haberlos visto—. Seguido, les dio la espalda entrando a aquél cuarto donde ambos signos de aire habían pasado la noche.

Compartieron una mirada. Había resultado tan fácil que el más bajo llegaba a sospechar, ¡pero no tenía tiempo para eso!

—¡Iré a ver a Tauro!

—¡Iré a desayunar!

Con distintas prioridades cada uno, optaron por separarse. Géminis tomó el ascensor y, saliendo de este en el cuarto piso, se encontró con su queridísimo novio.

—¡Taurito!—saltó a colgarse de su cuello. ¡Eso sí era calidez, lo contrario a dormir en el suelo!—. ¡No creerás lo que-!

—¿Dónde estabas?

—¡Pues verás que...!

—¿Dónde mierda estabas, Géminis?—. Lo miró, confundido. ¿Por qué usaba las palabras "mierda" y "Géminis" en una misma frase? ¡Ah! ¡Ya sabía!

Lo pinchó con el dedo, juguetón—. ¿Estás enojado?

—No.

—¡Pues estaba yo encerradito con Acuario en ese cuarto tan raro que vimos a-!

—¿Con Acuario?

—¡Sí!

—Ya me lo suponía.