Protegerte °Jenlisa & Chaesoo°

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~ Jennie ~

Me levante agotada de mi silla, he estado todo el día trabajando en las malditas cuentas que mi empleado no puedo hacer bien, después de despedirlo y estar de mal humor con todo el mundo he terminado mi horario laboral

- Señorita Jennie, la señorita Kim Jisoo solicita verla – Sonó el comunicador

- Dile que pase Soyeon.

No pasaron ni dos segundos cuando la puerta se abrió de golpe.

- Jisoo, por favor no vayas a hablar muy fuerte, cargo una migraña que me está matando – Mi amiga no hablo, se dirigió a la pequeña nevera que tenia, saco una pastilla y un vaso con agua, me lo entrego y se sentó frente a mí.

- ¿Ocurre algo? ¿Por qué esa cara?

- Bobby me llamo, cancelo nuestros planes para hoy - Su cara no se veía triste, si no mas como agotada.

- ¿Cuando terminaras con él? Ambas sabemos que el no te gusta.

- No puedo hacer nada Jen, mis padres lo escogieron para mí, es como tú y Kai – Fruncí el seño.

- La gran diferencia es que amo a Kai – Soltó una carcajada.

- Vamos Jen, deja de engañarte, ambas sabemos que no lo amas ni un poquito – Desvié la mirada, tal vez no lo amo, pero lo aprecio.

- El punto es mi querida Jisoo, que si no te gusta no deberías estar con él.

- Dejare a Bobby cuando tengas el valor de decirle a Kai que bateas hacia el otro bando – La patee y ella se quejo tomando la parte afectada

– Te juro que si alguien se entera te mato Kim Jisoo, la única razón por la que sigues viva es porque eres mi amiga y te tolero ¿ok?

- Si si si lo que digas Jenduk, pero sabes que algún día le tendrás que decir. ¿Qué no te gustaba esa tal Irene?

- Irene es mi amiga Jisoo, el hecho de que tenga mi misma orientación no significa que me guste, además creo que a ella le gusta Seulgi.

- ¿Es esa tristeza la que veo? Wow, la gran Jennie Kim enamorada, quien lo diría – Me levante y di un golpe al escritorio, me agarraste de mal humor Jisoo, ahora asume las consecuencias.

- Fuera de mi oficina ¡Ahora! – Me saco la lengua y se fue - ¿Qué edad tienes Kim Jisoo? ¿Cinco años?

Definitivamente no la soporto, dije para mí misma, tome mis cosas y me dirigí al estacionamiento, en el ascensor mi celular sonó, conteste de inmediato al notar que era mi padre quien llamaba.

- ¿Hola? – El ascensor marco el número del estacionamiento y baje sin mucho problema.

- Hola hija ¿como estas?

- Bien padre ¿necesita algo? – Estaba por llegar a mi auto ¿donde carajos deje las llaves?

- Si hija, tu madre y yo quería-

No pude escuchar lo que me estaba diciendo pues alguien arrebato mi celular, voltee muy enojada, lista para cortar cabezas.

- ¿Quién carajos te-

- Oh no linda, yo que tú me quedo tranquilita – Retrocedí.

No era uno si no cinco hombres los que estaban detrás de mi ¿Quién los dejo pasar? El cuerpo de seguridad de este maldito lugar no hace bien su trabajo.

- ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué quieren? – A pesar de que intente sonar lo más fría posible estaba muriendo del miedo.

- Así que tu eres la temida Jennie Kim... interesante – Empezaron a avanzar peligrosamente, yo retrocedía cada vez que ellos deban un paso hasta que me tope con una maldita columna. Típico.