La hojas de los arboles caían como si fueran lluvia, el viento azotaba los arboles haciendo que todas las que ya estaban secas cayeran de una forma bastante agradable, al estar ya en el suelo una pequeña castaña no perdía el tiempo y saltaba rápidamente para pisarlas y escuchar el crujido que estas hacían debajo de sus zapatitos.
Las carcajadas de la pequeña llenaban aquel gran parque que por alguna razón se encontraba completamente vacío con excepción de una pareja joven que estaba sentada en unas bancas no muy lejos de donde la pequeña estaba jugando.
- Lisa, ten cuidado – grito la mujer viendo como la nena se alejaba de ellos, los orbes marrones de aquella hermosa niña se dirigieron a los de su madre y ensanchó una gran sonrisa, sin pensárselo dos veces salió corriendo a los brazos de aquella mujer pero no calculo bien y tropezó haciendo que se raspara las manitos y una de sus rodillas.
- Hija – dijo la señora Manoban acercándose a la pequeña que se encontraba llorando mientras sostenía su piernita – Mi pequeña Lalisa... no llores, mamá está contigo – acaricio la mejilla de su hija y deposito un tierno beso en su frente – eres una niña fuerte, no debes llorar por pequeñeces ¿sí?
- P-Pero duele – dijo la pequeña aun sollozando.
- Hija – dijo el señor Manoban poniéndose a su altura – Solo dolerá por un rato, luego sanará y olvidaras lo que ocurrió – Su padre la cargó y la llevó a donde estaban aguardando, curaron su herida con el pequeño botiquín que tenían en su auto y a los minutos la pequeña Lisa ya estaba feliz de nuevo, comiéndose su helado de chocolate mientras su padre la cargaba sobre sus hombros.
- Te amo mi pequeña Lisa – dijo la señora Manoban.
- Te amo mami, te amo papi
Una lágrima cayó por la mejilla de Lisa, la morena que no había despegado ni un solo ojo de ella se percató de eso - ¿Lisa? Amor, ya despierta – La castaña frunció el ceño pero no hizo ningún esfuerzo para despertar, Jennie miro con desespero al doctor - ¿Por qué no despierta? Está así desde hace casi tres horas...
- Señorita Kim – dijo el doctor bastante relajado – Lisa se encuentra bien, la herida que recibió en el abdomen no fue muy profunda y aunque perdió sangre no se complicó, en este momento se encuentra descansando, en los exámenes de sangre la señorita Manoban presento que ha estado un tanto anémica, por lo tanto se tardara un poco más en despertar, su cuerpo necesita más tiempo para recuperarse... sea paciente.
Jennie solo asintió y volvió su vista a su novia - ¿Qué estas soñando amor mío? – se preguntó al ver como en el transcurso del último par de horas la castaña sonreía, fruncía el ceño y de vez en cuando soltaba una que otra lagrima, pero rápidamente otra sonrisa aparecía.
- ¡Te encontré! – Dijo su padre cargándola y haciendo que la pequeña soltara un grito por la sorpresa - ¿Creías que podrías escapar? – dijo haciéndole cosquillas, Lisa pataleaba y carcajeaba mientras intentaba de escapar de las garras de su padre.
- Déjame villano – decía la pequeña intentando parecer enojada pero segundos después mostraba otra sonrisa, logró escapar de las manos de su padre, corrió hasta la cama y se paró sobre ella, se coloco los lentes de sol de su madre – Ahora soy súper Lisa, no me puedes ver por mis lentes de invi-inva-ininvisibililidad – dijo con dificultad a lo que su padre soltó una carcajada.
- Así que unos lentes de ininvisibililidad ¿eh? Se le olvida una cosita señorita – Lisa vio con confusión a su padre – aun la puedo escuchar – después de decir esto cargó a la pequeña sobre sus hombros – no tienes más opción pequeña, ahora tienes que acompañarnos a tu madre y a mí a almorzar, yo gané
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Protegerte °Jenlisa & Chaesoo°
FanfictionLisa tiene un secreto, una oferta por aceptar, una oportunidad que le cambiara la vida... °Portada by: @unssstoppablegirl °Historia 100% mía °No adaptar sin mi consentimiento