- ¡Es que no me lo creo! ¡Es tan irresponsable! - se quejó Charles - Acabamos de cometer un error de los grandes por culpa de no estar pendientes de los móviles y ahora no contesta. ¡Debe ser el único veinteañero que no está todo el día pegado al móvil!
- A lo mejor es porque lo estás llamando con el de Rachel. - intentó tranquilizarlo Rhonda - No la conoce, es normal que no responda.
- También es cierto. - suspiró- Venga, centrémonos en nuestra cena.
Rhonda y Charles habían preparado una cena especial para celebrar su nuevo trabajo. Era muy tarde, pero Rhonda había insistido en esperarlo, aunque cenar a las tres era para Charles prácticamente desayunar.
Estaban ellos dos solos a la mesa. Rachel se había ido a una boda y Scarlett ya estaba en cama durmiendo.
Se había ido la luz y por eso estaban cenando rodeados por pequeñas velas, lo que además hacía la cena un poco más romántica.
- Es que me tiene preocupado. - dijo a la vez que volvía a marcar - ¡Lo siento, Rhonda, no puedo evitarlo!
Su móvil se había quedado sin batería y el de Rhonda estaba en el taller, por lo que se veía obligado a usar el de Rachel, que se lo había dejado en casa la última vez que los había visitado.
Su mujer se rio.
- Te comportas como la primera vez que Rachel salió de fiesta por la noche.
- Esto es diferente, Rhonda. Mike le disparó dos veces, es normal que me preocupe. Además, todo lo que dijo después...
Rhonda ya conocía una gran parte de la historia de Mike. Charles no podía seguir llegando a las tantas a casa ocultándole en que andaba metido. Además, le daba miedo no regresar un día a casa y que a Rhonda se le cayera el mundo encima.
- Está buscando su camino, Charles. Sabes que los jóvenes exageran mucho. Ya verás, el lunes estará de vuelta en la comisaría, listo para cumplir con su deber.
Rhonda sonrió al recordar el día que conoció a Arthur.
- Qué bien me la colasteis el día de la cena. Jamás hubiera creído que era un robot.
- Te recuerdo que fuiste tú quien lo invitó a cenar. - se rio Charles.
- Cuanto más me cuentas de él, más increíble me parece. Deberías volverlo a traer un día.
Charles suspiró al ver que su compañero seguía sin contestar.
- Charles, relájate, estará bien.
- Ya lo sé. Estoy siendo muy tonto. - se sonrojó Charles.
- Creo que le has cogido cariño.
- Es una máquina.
- Es un chico que se parece mucho a tí de joven.
- Para nada.
- ¿Tú crees? Arthur tiene ambición, quiere ser un gran policía. Pero también tiene sus miedos, sus inquietudes. No es muy distinto al Charles de hace treinta años que quería salir de la pobreza y convertirse en un policía conocido en todo el país. ¡Y mira dónde has llegado!
- Bueno, yo no diría tanto...
- El secuestro de Eddie Johnson: ¿Quién rescató con vida al pequeño de siete años de aquel almacén abandonado en el puerto?
- Yo. - contestó - Pero fue gracias a la casualidad de que...
- ¿Y quién logró desterrar de New York a los "Pink Eyes"? - lo interrumpió.
ESTÁS LEYENDO
Metallic Killer
Science FictionTodo el mundo imaginaba que la Dr. Reed había muerto de sobredosis. Era una mujer mayor con muchas adicciones: aquella era la opción más probable. Todo el mundo lo imaginaba... Hasta que la autopsia desveló que había muerto estrangulada. Inmediatame...