Estare a tu lado.

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-          Que quieres decir con eso? – pregunto alarmada la mujer mayor

-          Le conto porque estoy aquí? – la mayor negó – estuve apunto de perder a mi hijo, tuve un accidente después de una discusión con el. – le relato un poco lo sucedido, la mujer mayor dejo caer sus lagrimas mientras entendía las razones por las que Ha Ni no quería  a su hijo mayor con ella o cerca  de ella, pero no quería dar su brazo a torcer

-          Hija, entiéndelo por favor, dijo eso porque no sabia nada, el solo esta confundido

-          No, ya basta de entenderlo, cuando será el momento en que me entiendan a mi? – se quejo la menor ya cansada de todo eso. – siempre debo entenderlo, esperarlo y aceptar las burlas y humillaciones de el, pero que recibo a cambio de ello, solo  termino lastimada, estaba confundido? – la mayor asintió – pero no le costo nada acostarse con Hae Ra y embarazarla al mismo tiempo que se acosto conmigo, lo lamento Ajumma pero yo no lo esperare y menos me convirtire en su amante, eso nunca – dijo muy enojada

-          Es por ese muchacho verdad?  - dijo en tono de reproche la señora Baek – es por el que ya no esperaras por mi hijo – reclamo

-          Que pretende señora Baek – dijo Ha Ni ya enfurecida - que me pase la vida esperando las migajas de cariño que me entregara su hijo, eso suponiendo que volverá a mirarme una vez que se case con Hae  Ra. Lo lamento pero no naci para ser la amante de un hombre, la Ha Ni tonta y manipulable que usted conoció murió junto a Gi Dong y Ahora solo hay una mujer que vera por su felicidad y la felicidad de su hijo.

-          Estas enamorada de ese muchacho? – pregunto ya mas calmada aunque aun un poco enojada la señora Baek

- Aun no lo se, solo se que a su lado puedo sonreír y ser yo sin avergonzarme o reprimirme, el me cuida y me quiere, si me lo pregunta si, deseo enamorarme de  el, pero lamentablemente mi corazón aun pertenece al idiota de su hijo.

-          Ha Ni, dale una oportunidad mas, por favor, Seung Jo cambiara, el estará a tu lado – suplico por ultima vez la mujer mayor

-          Lo siento, pero ya no puedo, ahora debo ver por mi bebe y no por mi y lamento decirle que lo mejor para nosotros es que las cosas sigan como están – corto – ahora le agradecería que se retirar de mi habitación, ya no ahí nada mas que hablar
 

 
Guem Hee estaba atónita, la joven llena de vida que un día llego a su casa ya no existía, se había marchado, muerto a sus propias palabras, junto a su padre, pero ella la entendía perfectamente, su hijo la lastimo hasta el cansancio, y a pesar de eso ella deseaba regresar y rogar nuevamente para que le diera una oportunidad, sabia que seria inútil, y sabia que no tenia derecho, era verdad que Seung Jo había rechazado a su hijo antes de saber de su existencia, pero quizás solo lo dijo sin pensar, aun así el muy idiota había firmado un acuerdo renunciando a sus derechos, nada podían hacer, el así lo había decidido y ellos debian respetar su decisión, trajera las consecuencias que trajera.
 

 
-          Estas bien? -no había visto en que momento entro pero se mantenía en silencio observándola y eso le agrado, el que simplemente estuviera ahí para ella, para preguntarle su estaba bien, si necesitaba algo, si tenia hambre, o incluso para abrazarla si necesitaba llorar, nadie a excepción de su padre y Ga Eul la habían visto llorar, pero con el tenia la confianza y la libertad de mostrarse débil, vulnerable; el la confortaba, le daba la fuerza que necesitaba y eso le encantaba

-          Ahora si – respondió y le dedico una sonrisa

-          Traje jugo – dijo mostrando el vaso en sus manos – es de fresa – añadió con una leve sonrisa

-          Me encanta – dijo feliz llamándolo para que se sentara a su lado

-          Todo esta listo, al salir de aquí nos vamos a casa, Ga Eul y Jan Di recogerán tus cosas en casa de la familia Baek, si no te molesta

-          Puedo ir? – pregunto temerosa

-          Me encantaría decirte que no, que no es conveniente, porque no lo es para tu salud, pero yo no puedo prohibirte nada, solo te aviso que si tu vas, yo voy contigo – anuncio

-          No hay problema – le sonrió
 

Tres dias despues la castaña dejaba el hospital en una silla de ruedas, la cual la acompañaría por los siguientes meses, debido a su estado ella no podía hacer ningún tipo de esfuerzo o perdería a su bebe, era acompañada por el Joven Yoon y sus amigas, Jan Di y Ga Eul, irían directamente a casa de los Baek y luego a  la mansión Yoon, Ga Eul ya había empacado todas sus cosas y las había enviado a su nuevo hogar, ahora solo faltaban las pertenencias de la castaña.
 

 
Al llegar ese lugar la castaña palidecio, le traía tantos recuerdo, la mayoría compartidos con su padre, otros con el genio, buenos y malos recuerdos, que en ese momento le estaban jugando una mala pasada.
 

-          Ha Ni querida, estas en casa, me hubieras avisado para recogerte en el hospital y asi tus amigos no se molestaban en traerte – dijo la mayor después de saludar y las respectivas presentaciones

-          No Ajumma, vine por mis cosas, desde hoy, vivire en casa de mi prometido – anuncio justo cuando la puerta de entrada se abria para dar paso a los prometidos

-          Felicidades – dijo la chillona voz de Hae Ra a sus espaldas – Ha Ni me alegro que encontraras a una persona compatible contigo – dijo con intención de herirla

-          Mi novia, es una mujer hermosa, estoy seguro que si no fuera yo el afortunado estaría celoso de cualquier otro tipo cerca de ella – interrumpió Ji Hoo – ahora si me disculpa señorita – dio una reverencia y se arrodillo para quedar a la altura de la castaña – cariño te cargare para subir las escaleras – le aviso y luego la tomo en sus brazos

Pasaron toda la tarde guardando sus pertenencias, hasta que ella le pidió a Ji Hoo que la llevara al cuarto que ocupaba su padre y la dejara sola unos minutos, necesitaba sentirlo cerca nuevamente, necesitaba creer que todo eso era simplemente una pesadilla y que al despertar su padre estaría ahí para regañarla como lo hacia siempre,  un mes, dos meses, un año, nada seria suficiente para superar su perdida, ella aun quería creer que esa pesadilla acabaría y ella podría sentir su abrazo nuevamente. Sintió un par de brazos sostenerla fuertemente y por un segundo se sintió tranquila, pero al minuto siguiente entro en pánico, esos brazos no eran los que quería sentir, el olor de esa persona era diferente al que necesitaba en ese momento de vulnerabilidad la voz que oyo en ese instante la congelo en su sitio y la hizo sentir miedo en lugar de alivio

 
-          Ha Ni, perdóname por favor – susurro en su oído – yo… te amo – añadió Seung Jo

-          Aléjate de mi – pidió ella en suplica – me hace daño el sentirte cerca – añadió aun entre sus brazos – lo siento pero tardaste demasiado