Corazón Vertiginoso (Saga #1)

CAPÍTULO 18

Regla #2: Siempre unidos como una soga trenzada.

Su dedo sigue acariciando mi labio inferior, justo casi en la comisura de mis labios, sus ojos dejan de mirar mis labios y ahora observa mis ojos fijamente, me sonríe de una manera que no se descifrar lo que está pensando.

De pronto se separa de mi y se aclara la garganta -tenías chocolate en los labios -casi quiero golpearme en este momento por haber pensado que él podría llegar a besarme otra vez- y luego no quieres que te diga niña.

Dorek se ríe y tengo que ver el lado positivo de la situacion, por lo menos gracias a mi torpeza he logrado que sonria y que de alguna manera he logrado que se sienta mejor y ya no esté triste.

Dorek me lleva a mi casa y me deja dos cuadras antes como siempre lo hace cuando mi padre no está de viaje, me despido de él no sin antes prometer que la vamos a encontrar pronto, el en respuesta asiente con la cabeza y me da un beso en la mejilla izquierda, no sé si es mi imaginación o ya estoy volviendo me loca pero siento que se ha demorado más de lo normal en separar sus labios de mi mejilla.
En cuanto nos despedimos me voy hacia mi casa sintiendo aún el calor de sus labios sobre la piel de mi mejilla, cuando llego a casa hay un arreglo de tulipanes sobre la mesita de té que hay en la sala, solo hay una persona en esta casa que le gustan los tulipanes y esa soy yo, no puedo evitar fruncir el ceño porque tengo una ligera sospecha de quién pudo haber enviado ese arreglo, me acerco hasta donde estan los tulipanes y tomo la tarjetita que vienen con las flores, la abro y me doy cuenta de que he acertado en mis sospechas. No sé que rayos tiene Emanuel en la cabeza al creer que por enviarme mis flores favoritas lo voy a perdonar, subo molesta a mi habitación dejando las flores en el mismo lugar donde las vi, no me interesa meterlas a mi cuarto aún cuando sean mis flores favoritas.
Para ser sincera se me hace demasiado sospechoso que Emanuel haya mandado esas flores justo el día de hoy, ¿Porqué no las mandó cuando descubrí su infidelidad? Algo me dice que Emanuel ya sabía que Mia dejaría de ir a trabajar a la clínica y que el lunes sería su último día. Creo que pensó que como ya me había ayudado yo me olvidaría de Dorek y regresaría con él, pero estaba muy equivocado yo no pensaba regresar con él en ningún momento, lo único que quería de él es que me dijera donde encontrar a Mia.

El mes había transcurrido sin ninguna novedad sobre Mia y eso me tenía un poco desesperada porque sentía que cada día que convivía más con Dorek, era un día que me enamoraba más de él. Después de la primera vez que me invitó a comer, habíamos salido algunas veces más a comer o incluso llegamos a ir al cine a ver una película, muchas veces iban mis amigos con nosotros y otras simplemente íbamos solos.

En la universidad todo estaba saliendo bien a excepción del día de hoy, al parecer a mi profesor no le gustaba mucho el enfoque que tenía mi proyecto más bien estaba más interesado en lo peligroso que puede resultar ser los espectáculos de motocicletas. Lo peor era que el profesor quería que investigará el incidente que ocurrió hace 8 meses en el circo Dreaming.
El motivo por el que me negaba a cambiar el enfoque de mi proyecto era porque me gustaba así como estaba sin entrar en detalles amarillistas como mi profesor pretendía que fuera. Además siento que si le preguntaba a Dorek sobre ese incidente me toparía con algo que tal vez no me gustaría.

Nico y yo salimos del salón para dirigirnos al estacionamiento donde está el auto de él, ahí es donde esperaríamos a mi amiga para después irnos todos a una cabaña que había rentado para este fin de semana, bueno en realidad mi papá había pagado la renta ya que le había mencionado que los mellizos y yo teníamos muchas ganas de quedarnos el fin de semana en alguna cabaña, debido a que mi padre tiene una inmobiliaria eso le facilito encontrar una.
Lo que mi padre no sabe, es que los hermanos Smythe irán con nosotros ya que este fin de semana voy a filmar a los hermanos, solo que esta vez elegimos un lugar en el que pudiera ser un reto para ellos.