Mi primera vez

Capitulo II Vacaciones de Primavera

Narrado Por Candy...

Mis padres salieron de vacaciones a Italia por dos semanas. Eran las vacaciones anuales que siempre hacían solos. -Algo así como una veinteava luna de miel.
Como eran vacaciones de primavera, mi hermano pudo quedarse en la casa para hacerme compañía; -por no decir para cuidarme.

En ningún momento le pregunté por su amigo. -Estaba cumpliendo la promesa que hice, de ya no pensar en él, cuando Albert me chismeó que una tipa estaba coqueteando con Terry en la universidad.

Mentira. -Hice el intento. -La ociosidad no solo era la madre de todos los vicios, sino que también ayudaba a Terry a escabullirse dentro de mis fantasías. -En ellas, Terry me perseguía para robarme un beso, le seguían otros y palabras y caricias amorosas. Terminábamos recostados en el jardín, bajo los calientitos rayos de sol que entibiaban nuestros cuerpos.

El primer día que nos quedamos solos en casa, me desperté muy temprano. ¡Por Dios, eran vacaciones! ¿Por qué mi cuerpo no podía reconocer que eran sus días de descanso?
Bajaba las escaleras para ir a la cocina cuando tocaron a la puerta. -Fui a abrir a regañadientes. -yo no funcionaba bien sin antes tomar una taza de café.

-¡Hola! -me saludó Terry cuando abrí y me quedé con la boca abierta. No sonrió, a pesar de que su saludo fue algo efusivo.

-¿Qué haces aquí? -le pregunté con tono algo molesto. -Fue fingido, por supuesto. Estaba encantada de verlo de nuevo, pero no se lo iba a hacer saber.

-Vengo a ver a tu hermano -respondió entrando a la casa-. Por cierto, bonitas pantuflas -susurró burlón cuando estaba por pasarme. -Se había agachado tanto a mi oído para hablarme que sentí la calidez de su aliento acariciando mi piel seductoramente. -Su aliento olía a menta.

-¡Albert! -gritó Terry después, aun cerca de mi oído, rompiendo el momento.

-¡Ya bajo! -gritó mi hermano desde su cuarto.

Logré cerrar la puerta y despegarme de ese lugar. Aún seguía estremecida por Terry. Quise correr a mi cuarto, pero, por educación, tuve que hacerle compañía en la sala. Fue incómodo porque aun traía pijama, al menos era una coqueta.

Al poco rato bajó mi hermano en pants. -Terry le dio los recados y siguieron con otras cosas. -Como ambos me ignoraron por completo, aproveché para ir a mi cuarto.
No podía creer lo cerca que estuvo Terry de mí. -Tanto que por un momento pensé que ahora sí me iba a robar un beso.

Me cambié de pants y bajé a la cocina para prepararme un cafe, también agarré una pieza de pan y salí al jardín. -Hacía un poco de frío para desayunar en la mesa del jardín, entonces fui directo a la casita de madera para comer ahí. -No quería volver a babear por Terry.

Cuando terminé, miré a mí alrededor. -Mi papá había pospuesto ordenar todo lo que tenía ahí por meses. -Arreglar el lugar iba a ser una buena actividad que me mantendría alejada de mi hermano y Terry.
Comencé a sacar cosas para hacer un poco de espacio.-Ya tenía bastantes cajas afuera cuando mi hermano salió con Terry.

-¿Qué haces? -me preguntó Albert muy intrigado.

-Preparando una sorpresa para mi papá. Le respondí.

-¿Quieres que te ayudemos? -me preguntó Terry.

-No, gracias -respondí entrando a la casita. -Quise cargar una caja pero era demasiado pesada para moverla por mi cuenta.

-¿Dónde quieres que la pongamos? -me consultó Albert cuando entró con Terry.

-¡Argg! ¡Como quieran! -dije rindiéndome a que, por lo menos hoy, iba a tener que soportar su compañía.