La Chica del Futuro: The New Future

Epilogo. La promesa del Futuro

17 DE DICIEMBRE DE 2037 — 1:38 AM

— Rápido tenemos que llegar a la habitación principal donde se encuentra el Dictador— Voy corriendo para salvar lo antes posible a Yui y Celeste.

En este momento estamos a punto de conocer el arma definitiva que usara el Dictador para terminar con este mundo. Celeste y Yui tienen la energía suficiente en su Letni Inside para poner en marcha el plan, por eso es que el Dictador (Que es un Christopher de otra línea Temporal) las secuestró.

— Kouta si lo deseas puedes huir y dejarme a mí el resto— Me dijo Christopher.

— ¿Acaso quieres que me haga atrás cuando hemos llegado tan lejos? Ni en tus sueños dejaría que un amigo muera por mi culpa.

— Entonces creo que ya estamos listos...— Dijo abriendo la puerta que conduce hacia donde está el Dictador y las chicas.

— ¡Detente de una vez!— Grite hacia adentro de la habitación.

Era un lugar sin techo, por lo tanto se podía ver el cielo completamente opaco por culpa de la contaminación.

A un lado está el Dictador escribiendo datos en la computadora y, en medio de la habitación, estaban Celeste y Yui.

— ¡Ayuda!— Gritaron al unísono ambas.

— Vaya por fin están aquí...— Dijo el Dictador poniendo su mirada en nosotros.

— Déjalas ir— Dije en un triste intento para que las libere.

— ¡Imposible! Ahora ellas serán las fuentes de poder para esta máquina— Nos dijo el Dictador señalando algo que parecía ser una refrigerador con varias conexiones de fuera y muy inestable.

— Al menos cuéntanos que planeas hacer con esa máquina tuya— Le grito Christopher.

— Ese será tu último deseo... Cuando esté lista y recargada entrare en la máquina y me pasara energía por medio de estos condensadores, luego tendré poder inigualable, tanto que con solo pestañear podría destruir el universo como lo conocemos.

— Estas loco... ¿No puedes elegir a alguien más que tenga otro Letni Inside en lugar de Yui y Celeste?— Pregunte preocupado.

— Resulta que el Letni Inside que tiene tu hija Celeste en el cuello es único, solo necesitaba a otro Letni Inside normal para que pueda llevar a cabo mis ideas.

— Maldito...

— Pero basta de habladurías y vean el cómo logro gobernar este mundo.

Comenzó a caminar hacia su extraña máquina, tratamos de detenerlo pero simplemente es imposible. Cuando tratamos de golpearlo nuestros golpes lo atraviesan, luego de un tiempo el encendió la máquina.

— Christopher... todo está perdido, es imposible que lo venzamos— Le dije desilusionado y furioso a Christopher... ¿Acaso yo había fallado? ¿Por qué el destino me eligió a mí si no puedo hacer nada? Todo ha acabado...

— No te preocupes, aun en los momentos más difíciles hay que levantar la mirada y sonreír...

— ¿No lo entiendes? Todo ha terminado.

— Hasta en los peores momentos hay esperanza ¿Lo recuerdas? Mira lo que pasara— Me dijo señalando la máquina.

Se oían los gritos de dolor provenientes de las chicas a las que les estaban fusionando sus poderes... Pero, cuando todo estaba llegando a su clímax ocurrió algo inesperado...

— Kouta ¡Abajo y escóndete!— Me grito de forma brusca.

Una luz cegadora envolvió toda la habitación, no se podía ver absolutamente nada, pero se oían los gritos del Dictador... Eran gritos de un dolor inmenso...