Capítulo IV

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Pov Alienor

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Pov Alienor

Nos encontramos en la cabaña de los Cooper donde toda la manada ha venido a presenciar la llegada de un nuevo integrante.

-¿Entonces el bebé va a salir por la cosita de mi mami?- le pregunta una niña a Carrie una de las guerreras más fuertes de la manada pero también con un filtro nulo.

-Así es primero comienza a...

-Ejem- Samuel carraspea la garganta para llamar la atención de Carrie- no creo que sea correcto que le hables de eso a una niña.

-¿y porque no?

-porque aún es muy pequeña y no lo comprendería del todo.

- Tú ya eres mayorcito y no pareces madurar- redobla Carrie

Sinceramente creo que Carrie tiene un ligero enamoramiento por mi hijo aunque si fuera su mate ya lo abría notado hace bastante tiempo

-Soy tu futuro Alfa debes respetarme-se le resalta una vena del cuello a Samuel esto realmente lo pone de malas.

-Un futuro Alfa se gana el respeto de los otros y tu no lo haz ganado- Carrie le lanza una mirada mordaz a mi hijo y se marcha llevándose a la pequeña en brazos.

Samuel suspira y se frota el rostro con sus manos.

-Ella es tan...

-¿Hermosa?- lo interrumpo

-¡NO!- su rostro de asco casi me hace sonreír- es muy irritante

-Algún día hijo mío encontrarás a alguien que te pondrá en tu lugar, y cuando eso suceda estaré ahí para verla hacerte papilla.

No le da tiempo de responder porque un aullido se oye en la habitación donde Marie Cooper está dando a luz.

El bebé a nacido. El bebé está sano. Hay un nuevo integrante en la manada, otra personita por la cual pelear.

Todos comenzamos a aullar al cielo obscuro en forma de tributo.

Poco tiempo después se comienza la gran celebración.
Todos nos reunimos en el centro de la ciudad y dejamos descansar a la feliz familia, cada quien llevaba el platillo más grande que se pudiera encontrar en su hogar y el nuestro no fue el más pequeño en cambio siempre procuramos tener variedad de alimentos. Yo al ser la Alfa tenía que aportar con 2 grandes platillos, aún compadezco a la pobre Ana que fue la que se encargó de todo.

A las 10 de la noche nuestra diosa luna hizo acto de presencia saliendo detrás de las nubes que la ocultaban pero no duró mucho puesto que volvió a esconderse poco después.

La fiesta estaba en su máximo esplendor, todos bailaban, reían, bebían, comían y se desentendían de las preocupaciones diarias.

Samantha se encontraba con Diego platicando. Samuel estaba discutiendo con Carrie otra vez. Daemon hablaba con algunos de los guerreros que lo admiraban y yo estaba aquí, rodeada de gente pero sola.

La alpha (#1 Saga Colmillos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora