•Dreamer In The Rain• ✿YeWook✿ ⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝

||•Capítulo 16•||

Todos estos sumergió en un horrendo silencio, Yesung sudaba frío y Tiffany sentía que al menos media tonelada de problemas caían sobre ella.

—¡NO SIGAN!—Wook gritó levantándose lentamente y acercándose hasta donde ellos estaban—he sufrido demasiado por culpa de ustedes dos, aunque no lo creas fuiste parte importante...—entregó a la pequeña con su padre y tomó a Tiffany por la garganta con fuerza—escúchame perra...este enano ya se cansó de ser un marginado...puedo parecerte alguien frágil...y es verdad lo soy, pero también puedo luchar por lo que me importa y no voy a permitir que vengas a acechar a mi familia...—sus uñas ya estaban un poco crecidas por lo que aprovechó para enterrarlas en la piel de la chica.

—Ryeowook...—Yesung lo miraba perplejo, nunca había visto esa faceta de su menor.
El rostro de Tiffany cambio drásticamente, ya no mostraba esa sonrisa burlona, ahora tenía miedo.

—No pienso hacer más, tengo una hija de por medio...—susurró con rabia soltando su cuello con brusquedad, las marcas de sus uñas se notaban bastante rojas.—ahora largo de aquí...y no vuelvas a molestar a mi familia..no voy a detenerme ante nada ¿Entiendes?.

—Este no es el fin...enano...—con un gruñido la desabrida chica corrió hacia el ascensor.

Cuando estuvo solo con Yesung, se dejó caer al suelo y bajó la mirada, las lágrimas nuevamente bajaron por su rostro, mojando la alfombra del pasillo.—Eres un maldito idiota...—podía parecer fuerte pero simplemente se derrumbaba con facilidad.

—En serio lo lamento Wook yo...ni siquiera he hablado con ella en meses, creí que lo nuestro sería solo un trato pero...todo pasó a algo más y entonces terminé aquí, estoy totalmente apegado a ti y a la niña y no quisiera dejarlos por nada.

—Sólo...dejalo así... Sólo olvidalo...—el mas bajo se levantó lento y entró a la habitación, Yesung por su parte fue a dar la conferencia.

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Antes de salir Yesung tomó su cabello frente al espejo del camerino, estaba frustrado, no había podido decir nada y su esposo no lo había dejado seguir. Cuando dio la hora, salió viendo a la gente acumularse con emoción para verlo, suspiró con ironía y se colocó frente al podio.

—Buenas noches... Ustedes seguro ya saben quien soy y si no, voy a presentarme...Mi nombre es Yesung, tengo una extensa gama de supermercados, centros comerciales, editoriales y empresas en general...sin embargo hoy me di cuenta de algunas cosas. Ustedes vinieron acá con la intensión de escuchar como logré todo lo que tengo y que pueden hacer para ser iguales. Pero les hablaré de algo más, escuchen ¿De que me puede servir todo lo que tengo?, ¿De que me puede servir que mujeres y hombres quieran acostarse conmigo?, ¿De que me sirve si mi propio esposo no puede amarme?...—sus ojos se cristalizaron y los talló para no llorar.

—Yesung...—susurró Wook quien lo miraba entre la multitud, su corazón latía con fuerza, no podía creer lo que estaba haciendo frente a toda esa gente.

—Los negocios no lo son todo ¿saben?, a veces solo necesitas prestar atención a lo que tienes en casa, hay un cuento donde un anciano dice que la gente obtiene lo que merece...yo no merezco a mi familia y esta conmigo... Debería poner atención también ¿no creen?.—rió con ironía—cometí una estupidez, vine aquí para pedirle matrimonio a quien amo a pesar de todo y a pesar de como soy y creo que saldré sin escuchar su dulce voz decir "Acepto". ¿Ven esto?—de su bolsillo sacó una cajita con el anillo y lo mostró —era para el y lo arruiné...

—Acepto...—Wook subió por las escaleras al escenario y lo miró con los ojos llorosos.

—Ryeowook...—Yesung corrió a el y lo abrazó con fuerza, cuidando de no lastimar a su pequeña quien estaba en medio de ambos, tomó el anillo y lo colocó en su mano. La gente aplaudió y ambos se besaron.

Ambos decidieron volver a casa después de a conferencia, ya a ninguno le quedaban ganas  de quedarse en esa isla.

Tiffany había llamado un par de veces desde que Wook la corrió del hotel, y cumpliendo la promesa hecha, Yesung sólo la rechazó, no quería tener nada que ver con ella pues ahora su hija y su esposo eran lo que importaba.

—La cena está servida—susurró el ama de llaves entrando a la sala donde ambos se encontraban viendo televisión.

—Gracias —Yesung se levantó y cargó a su pequeña, seguido de Wook quien solo fue tras ellos.

—Sungmin me dijo que tal vez llegue en el transcurso de la noche...—él menor hizo una larga pausa algo melancólico, hasta que suspiró y contuvo el sentimiento—¿a que hora sale tu vuelo?

—A las 3:00AM; estaré llegando a Japón un poco después que Kyuhyun.

—Tengo un mal presentimiento acerca de ese viaje Yesung ¿Es obligatorio?

—Calma cariño, todo va a salir perfecto ya verás, y cuando menos lo esperes estaré acá para que podamos tener una gran boda.

El rostro de Wook resplandeció de la nada —¿Gran boda?

—Cuando regrese de Japón vamos a casarnos, ya esta todo preparado...quiero estar bien con mi familia y por lo tanto me casaré por todas las de la ley contigo, quiero que sea algo estable.

—Yesung...—los ojos del mas chico poco a poco se llenaban de lágrimas, derramadas completamente por la emoción.

Ambos se abrazaron y al calmarse fueron al comedor para por fin cenar.

Ambos se quedaron solos en la habitación pues la niña dormía, Wook no aguantó y tomó a Yesung por la camisa acercándolo a su cuerpo—Yesung...—susurró sonrojado —hazme el amor antes de que te vallas. Quiero sentir tu piel.

—¿Estas seguro?—lo cargó y lo recostó en la cama, quitándole lentamente la ropa.

—Lo estoy sólo... Hazlo ahora por favor...—su respiración se entrecortada debido al tacto.

Ambos se despojaron de sus ropas, mientras Yesung repartía besos por todo el cuerpo del menor, sonriendo ante como se retorcía de placer, bajó hasta su miembro y dio un par de lamidas a este.

—Hazlo ahora por favor, te necesito... —Wook se sentó y se quitó por completo la ropa, al igual que al mayor, se colocó n cuatro contra las almohadas y meneo las caderas.

—Oh valla... —sonrió acercándose, masturbó un poco su miembro y lo perfiló para meterlo con cuidado, entonces embistió suave pero profundo, aumentado gradualmente hasta que se tornó todo algo duro.

Para el menor ese fue el mejor sexo que había tenido, la sensación que le daba el miembro ajeno golpeando justo donde debía lo volvía loco, sus gemidos eran imposibles de callarse, sus puños apretaban las mantas y sus caderas se movían para recibir mas de ese delicioso golpeteo.

—¡Carajo más fuerte!—gimió casi gritando cuando estuvo a punto de venirse.

Yesung lo tomó con firmeza de las caderas y lo embistió de manera casi violenta, ambos terminaron con un fabuloso orgasmo, segundos después cayeron exhaustos uno al lado del otro.

Wook lo atrajo y se recostó en su pecho, lo miró directo a los ojos y sonrió —Te amo...—susurró con sinceridad.

—Yo también te amo...—lo abrazó con fuerza y besó su frente—seremos muy felices pequeño...te lo prometo...

—Yo ya soy feliz...