ᴅᴀʀᴋ sɪᴅᴇ • poe dameron ✓

catorce • hermanos

La mano de Ben continuaba extendida, a pesar de que Lyra retrocedió. Han se encontraba en el comienzo de la pasarela, mirando a sus hijos.

—Lyra—escuchó una voz—No lo escuches.

Dirigió su mirada a su cinturón, junto a su sable se encontraba el comunicador.

—Tienes que volver, tu madre te está esperando—el sonido era tan bajo que Ben no podía oírlo— ¿Quieres que ella me mate por dejarte ir?

—Ben...—murmuró—Mamá quiere verte, ven con nosotros.

—No—contestó, seguro—Si no estás conmigo...—puso una mano en su sable—entonces eres mi enemiga.

— ¡Sal de ahí! —escuchó mientras apagaba el comunicador.

Lyra puso una mano en su sable también. Ben estaba a punto de prenderlo pero recibió un disparo de parte de Chewbacca. Se tambaleo y estuvo a punto de caerse.

—Lyra, salgamos de aquí—gritó su padre.

Lyra comenzó a retroceder rápidamente de espaldas a Han, no iba a darle la espalda a su hermano.

— ¡Vuelve aquí!—gritó Ben— ¡COBARDE!

Caminaba rengueando a causa del disparo en la pierna. Lyra corrió hacia su padre y subieron la escalera. Esquivaban los disparos mientras Chewbacca eliminaba a los stroomtropers.

Lyra sabía que debía enfrentarse a él para convertirse en una Jedi, pero no serviría de nada si moría allí cuando se destruyera la Base Starkiller, si es que los pilotos lo conseguían.

Salieron del lugar, luego de detonar las bombas, y corrieron por la nieve hasta el bosque. Han y Chewbacca desaparecieron de la vista de Lyra, pensó que tal vez habrían ido a buscar el Halcón. La nieve caía y el bosque estaba muy oscuro, por lo que corrían uno cerca del otro. Entre la penumbra, el sable rojo de Kylo Ren brillaba e iluminaba el ambiente.

—No hemos terminado.

—Ibas a asesinarlo, eres un monstruo.

— ¿Dónde está ahora para salvarte?

Rey le apunto pero con un solo movimiento voló por los aires y se golpeo contra un árbol.

— ¡Rey! —gritó Finn, agachándose a su lado.

Kylo extendió su mano e hizo lo mismo con él.

— ¡Detente! —dijo Lyra mientras prendía el sable de su abuelo.

—Ese sable—lo señaló—Me pertenece.

—Ven a buscarlo.

Los sables chocaron y las chispas rojas y azules salieron en pequeños destellos de luz. Ren atacaba con furia y sin siquiera pensar. Lyra esquivaba sus ataques.

— ¡Pelea!

—Ben, no quiero dañarte—exclamó mientras se agachaba, el sable rojo atravesó de un lado a otro un árbol. La acorraló y el sable quedó muy cerca de su rostro.

—Pues yo si quiero—le murmuró en la cara.

Con un extremo del sable, le quemó el hombro.

— ¡AH!

Volvió a atacar pero lo esquivó y le devolvió el golpe. Ahora los dos sangraban. Dirigió su vista a sus amigos y vio que ninguno se movía. Kylo aprovechó para atacar con todas sus fuerzas y el sable de Lyra voló un montículo de nieve a unos metros de ella. La golpeó y atravesó su pierna derecha con su arma.

Cayó al suelo. Sintió como la sangre salía más rápido de su cuerpo. Intento moverse, pero no podía. Todo comenzó a dar vueltas para Lyra, pero pudo ver con dificultad como Rey se paraba y tomaba su sable.

Lyra comenzó a arrastrarse como pudo hasta Finn y se recostó a su lado. Pensó que podía hacer y palmeo su cinturón buscando el comunicador.

— ¿H-hola? —preguntó, tosiendo.

— ¡Lyra!

—Finn está herido.

—¿Dónde estás?

—Seguimos aquí.

— ¿Estas bromeando? ¡El lugar está a punto de explotar! —exclamó

—Ben lastimó mi pierna—explicó—No puedo irme.

Rey y él continuaban peleando. No podía verlos, pero escuchaba el ruido de los sables. El suelo comenzó a abrirse y se aferró a Finn.

— ¿Dónde está Han?

—No lo sé.

—Iré por ustedes.

—No, no hay lugar en tu nave y no hay tiempo—dijo Lyra—Vete.

—Pero...

—Si vienes, morimos todos—los mareos comenzaron a empeorar—Creo que estoy viendo una luz.

— ¡No! ¡No veas la luz!

—La del Halcón, idiota—murmuró riendo, para luego toser—Si me muero, ¿le dices a mi madre que lo siento?

—No vas a morir, te lo prohíbo. Mantén los ojos abiertos.

Alguien se agachó frente a ella y supuso que era Rey. No lo sabía porque comenzó a ver todo negro. Trató mantener los ojos abiertos, pero no pudo.