—¡Mierda, Alyssa! ¡Quédate quieta!— Evan espeta con enojo, pero no hago caso. Yo forcejeo para zafarme de su agarre e ir tras Jaden.
—¡Que no estás viendo la situación, Evan!— me detengo en mis movimientos, solo para encararlo—. No te importa que Jaden cometa una locura —tiro con fuerza de nuevo, pero hago una mueca de dolor cuando el agarre de Evan me lastima.
—Alyssa Walker, te vas a lastimar —se queja e intenta sostenerme con firmeza, pero de manera que no me lastime.
Me siento de mil maneras. Estoy deseando correr tras Jaden y detenerlo, pero Evan se empeña en impedírmelo. Con cada movimiento que hago para escapar, me siento mareada. No me importa si las náuseas me invaden de nuevo, quiero regresar al bar. ¡Ahora!
—¡Evan, ya suéltame! —casi grito, ya muy molesta y entonces, veo a Evan tensar su mandíbula. De seguro ya lo harté.
—Escúchame, Alyssa... —dice, claramente molesto —,Por tu bien, más te vale quedarte quieta. Podría soltarte, pero te aseguro que no detendrás a Jaden. Créeme que tiene toda la razón del mundo para partirle la cara a Mic —su respiración es agitada y luce realmente molesto.
—Tú qué sabes si es necesario una pelea. ¡Por Dios! ¡Fue un accidente!— digo casi desesperada —. Mic está ebrio y yo no era consciente. Bebí tres cervezas...
—¡Aly, Michael quiso drogarte! —su voz ronca y molesta, casi me grita. Me quedo en estado de shock.
No puedo creer lo que dice. Niego con mi cabeza aturdida. Eso es imposible. No puede ser que haya sido capaz de tal cosa.
—Aly, escúchame —me suelta por fin y coloca sus manos en mis hombros, y me hace verlo directamente —. No sabemos qué diablos te dieron, pero definitivamente era algo para drogarte. Por eso te mareaste y por eso vomitaste.
Ahora siento rabia. Aturdimiento y no sé qué más.
—Tengo que ir... —no espero su respuesta y me giro para ir al bar. Esta vez, Evan no me detiene.
Aún no proceso del todo, lo que me ha dicho. Aún intento conectar los puntos para saber cómo fue que sucedió. Sin embargo, ya estoy llegando a la entrada del bar y no me importa lo que me haya pasado. Solo quiero sacar a Jaden de aquí. No quiero que termine herido o algo peor.
Entro a la estancia de nuevo, y el olor fuerte a cerveza y cigarro me causan una pequeña arcada. Trato de controlarme y seguir hacia adentro. No tengo idea de dónde está Jaden. Con mi vista intento ver entre toda la gente, intento localizar a dos chicos moliéndose a golpes, pero no veo nada. El lugar no luce nada inusual, fuera de la gente bailando frenéticamente. Alguien coloca una mano en mi hombro y giro para ver a Evan. Agradezco que esté aquí.
—¡Sé dónde están! —grita por encima del bullicio y toma mi mano para guiarme entre la gente. Con cada paso mi adrenalina y ansiedad sube —. Esther me llamó. Está con ellos —Evan grita de nuevo. No digo nada, me limito a seguirlo.
Detesto que haya demasiada gente y se nos dificulte avanzar rápido. Nos adentramos a un pasillo que parece llevar a un cuarto de bodega. A penas estamos llegando, y escucho gruñidos, golpes y quejidos.
Me preparo mentalmente para la escena que voy a presenciar.
—¡¡Jad, ya para por favor!!— escucho a Esther gritar desesperada.
Veo a Jaden impactar su puño derecho contra el estómago de un chico y este se arquea en respuesta. Puedo ver que no es Mic, él está a un lado, tirado en el suelo y con su boca sangrando. Es una escena horrible.
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Del amor al odio [DAAO, LIBRO I] [CORRIGIENDO]
RomanceUn adiós por amor. Un beso por odio. Recibí ambos, y no sé cuál me hizo más fuerte. CRÉDITOS DE LA PORTADA A: @EditorialLatina QUEDA TOTALMENTE PROHIBIDA SU COPIA O ADAPTACIÓN. OBRA REGISTRADA EN SAFE CREATIVE: 2109039170215