Después de estar dándole vueltas a la cabeza decido levantarme e ir al baño a darme una ducha rápida, de unos 15 minutos. Luego, opto por ponerme un body negro, unos shorts vaqueros y mis converse negras, son fundamentales en mí.
Me desenredo el pelo y lo dejo que se seque al aire, me echo rimmel y un poco de corrector, no me suelo maquillar mucho a no ser que sea un acontecimiento muy especial.
Después de prepararme bajo a la cocina a desayunar, allí me recibe Michaela con su encantadora sonrisa:
-Buenos días- sonríe.
-Hola- le devuelvo la sonrisa.- ¿Qué hay para desayunar?
Pero antes de que Michaela me conteste se oye un ruido proveniente de las escaleras, y segundos después aparece Tayler corriendo en la cocina y Beatrice detrás de el. No puedo evitar sonreír al ver la escena que han montado mis hermanos.
-Beatrice, Tayler, comportaros- dice Michaela dejando un plato con tortitas en la mesa.- ¿Y vuestro padre?
-Está duchándose- anuncia Beatrice colocando 5 platos con cubiertos en la mesa.- Ah Jo, hoy los chicos han planeado que vayamos a la fiesta que hay en el puerto, ¿qué te parece?.
Me quedo mirándola, esperando que esta tarde no este Paige, no la aguanto, aunque bueno, el odio es mutuo.
-¿Va a estar Paige?- le pregunto.
-Claro- Beatrice se ríe- venga Jo, daros una oportunidad.- Me mira poniendo cara de cachorro.
Titubeo un poco, pero al final acabo cediendo.
-Vale- me río.
-¡Bieeeen!- grita Beatrice y me abraza.- Verás como no te dice nada.
Mi historia con Paige no es muy larga que digamos, cuando llegue aquí y Beatrice me presento a su grupo de amigos a la primera que conocí fue a ella, desde que la mire a los ojos noté que no le caía muy bien, ¿porqué? pues la verdad que ni idea. Siempre que salimos todos ella me tiene que echar alguna pulla, nunca para, pero lo dejo pasar, de momento.
Decido apartar a Paige de mis pensamientos y servirme dos tortitas con sirope de chocolate. Mientras estamos desayunando baja Charles y antes de que podamos saludarle ya nos esta besando la cabeza a cada uno. Charles es una persona maravillosa y muy risueño, siempre tiene una sonrisa en la cara y es positivo en todo, bueno, todos en esta casa lo son, menos yo más o menos, no suelo tener siempre ideas positivas en la cabeza, al contrario, suelo ver antes el lado negativo de las cosas que su lado positivo. Pero antes de que siga pensando Michaela rompe mi ensimismamiento.
-Jo cariño, ¿estás nerviosa por empezar el instituto el lunes?- me sonríe.
-La verdad es que no lo he estado pensando mucho- me río.- Aunque ahora que lo dices sí que lo estoy un poco.
Michaela se levanta y se pone a mi lado.
-Verás como te irá genial- me sonríe con su calida sonrisa y me da un beso en la frente.
-Si alguien te hace algo me lo dices que le pegaré- dice Tayler haciendo movimientos extraños de Kung Fu.
No puedo evitar reírme.
-Claro- le digo.
Pasamos unos veinte minutos todos juntos desayunando y hablando, después recogemos entre todos la mesa y Beatrice y yo subimos a su cuarto.
Beatrice coge su móvil y pone cara de asco.
-Joder- suspira.
-¿Qué pasa?
-Hero viene esta tarde con nosotros- gruñe.- No lo aguanto.
-Cuando yo llegué no os llevabais tan mal- le digo encogiéndome de hombros.
-No es que nos llevemos mal, pero desde que llegaste o incluso antes se volvió un poco insoportable- se tumba en su cama y se tapa la cara con un cojín.- No sé como le gusta a Paige.
Me quedo un poco en shook al oír lo que ha dicho mi hermana.
-¿A Paige le gusta Hero?- digo un poco mosqueada.
No es que me guste Hero ni nada de eso, pero creo que si él y Paige llegan a estar juntos algún día, ella le manipulará como quiera, solo es eso.
-Claro, ¿no te has dado cuenta?- dice Beatrice quitándose el cojín de la cara.- ¡Está pillada de el desde que lo conoció!, pero todas las veces que Paige ha intenado algo con el, Hero la ha rechazado.
No puedo evitar reírme.
-¿Enserio?
Beatrice empieza a reírse también.
-Sí hermanita- ríe.- Paige ha echo mucho el ridiculo con Hero- ríe.- Lleva así con él por lo menos 3 años.
Me encojo de hombros y mientras mi hermana pone música y empieza a sacar modelitos para esta tarde no puedo dejar de pensar en Hero, desde que lo conocí sentí unas intensas ganas de descubrir su secreto, porque sé que oculta algo y no nos dice nada.
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Tenías que ser tú.
RomanceJosephine es una adolescente con una infancia muy dura, pero su vida cambia cuando la adoptan sus padres adoptivos y se muda a Los Ángeles, allí conocerá a sus amigos, a enemigos y lo más bonito, a su alma gemela.