❀J I M I N❀

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Al llegar a su departamento, JiMin no pudo evitar hacer una ligera mueca de fastidio, pues desde que se habían bajado del avión, TaeHyung no había apartado la vista de su teléfono. Tenía una estúpida sonrisa en su rostro y eso estaba comenzando a hartarlo.

-TaeHyung, creo que ya es suficiente.

-¡Claro que no es suficiente! Kookie y yo tenemos más en común de lo había imaginado, ¿recuerdas la consola que quería hace unos meses? ¡Jungkookie la tiene!

El pelinaranja frunció el ceño ante tal nombre, ¿quién carajos era Jungkookie ?

-¿Quién es?

-¿Kookie? Oh, fue mi compañero en el avión, ¡es una cosita preciosa!

-Bien, estoy harto, iré a desempacar mis cosas, cuando termines con... Él, me avisas para pedir algo de cenar.

-Jiminnie... ¿Estás celoso?

¿Celoso? ¿Cómo podría? Más bien se estaba hartando de que su distraído mejor amigo estuviera con toda su atención fija en ese chico que nisiquiera conocía.

-No.

-Lo estás.

Cuando JiMin vio a TaeHyung acercarse a él, este negó y colocó sus manos en sus hombros.

-En verdad no lo estoy, está bien que hayas conocido otra persona, eso demuestra que tenía razón, ¿ves? Las personas como yo no pueden tener personas como tú en sus vidas amorosas.

Dicho esto, JiMin sonrió y le dio una pequeña palmadita en su hombro izquierdo para después ir a su habitación.

Debía admitir que el mayor estaba un poco desilusionado, sabía muy en el fondo que TaeHyung y él nunca hubiesen podido tener una relación más allá de lo amistoso. Pero aún tenía la pequeña esperanza de que no fuera así, quería estar equivocado y que su mejor amigo fuera esa persona que tanto deseaba en su vida. Pero la vida siempre le daba un golpe de realidad cuando empezaba a soñar despierto.

Entonces recordó al chico que estaba sentado a su lado. No sabía por qué, pero había algo en su persona que le decía que él lo entendía, que si tan sólo hubiera olvidado por unos instantes su timidez, tal vez hubiera podido conocer a alguien que lo entendiera, alguien que pasara por su misma situación.

Suspiró y despejó su mente dedicándose de lleno a acomodar sus camisas, pantalones y chaquetas donde debían ir, no debía hacerse pensamientos estúpidos con un chico que nisiquiera conocía, nisiquiera sabía su nombre, ¿cómo podía tener pensamientos recurrentes hacia una persona que sólo había visto una vez en su vida?

"Ya estás lo bastante jodido como para que un desconocido venga a adueñarse de tus pensamientos" y con ese pensamiento, JiMin terminó de arreglar sus cosas para salir nuevamente a la sala de estar, TaeHyung se encontraba sentado en la barra de la cocina aún con ese maldito celular en las manos y tres platos de comida rápida frente a él, uno abierto y los otros dos cerrados.

-JiMin, ¿conociste a YoonGi hyung?

-¿A quién? No, espera, ¿cómo sabías que estaba aquí?

-He vivido contigo cuatro años... Aprendí a saber cuando estás y cuando no, ahora responde, ¿hablaste con él?

-¿Y cómo carajos pretendes que conteste eso si no sé quién es?

Su amigo tecleó algo en su celular y se lo mostró:

Su amigo tecleó algo en su celular y se lo mostró:

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"Tiene que ser una jodida broma..." pensó JiMin tomando el celular de su amigo para poder ver mejor la foto. En verdad se trataba de su acompañante en el avión.

-¿Por qué tienes esto?

-¡Entonces sí lo conoces! Es amigo de Kookie, se la he pedido para que supieras de quién estaba hablando.

-Fue mi compañero de asiento, más no hablé con él.

-Entonces supongo que lo que te diré será bastante incomodo...

-Kim TaeHyung... ¿Qué hiciste?

El castaño sonrió ligeramente y después tomó uno de los platos de comida.

-Antes de iniciar en la escuela, le dije a Kookie que nos viéramos, los cuatro... Él, YoonGi hyung, tú y yo...

"No... En definitiva esto no es una jodida broma" el mayor suspiró sujetando el puente de su nariz, a veces TaeHyung era tan idiota.

-No iré.

-¡Tienes que ir!

-Tae, no, tengo que terminar de hacer el papeleo de la universidad, tú puedes ir con ellos.

-¡Pero así ya no es divertido!

-A veces eres como un niño... No iré, y no insistas, en verdad no lo haré.

Dicho esto, JiMin tomó el plato de comida que sostenía su amigo y se lo llevó a su habitación. YoonGi... En verdad la vida no podía ser tan injusta, es decir, no es como si ese par también estuviera en la misma universidad que ellos, ¿verdad?

Second Chance »Y.M«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora