Donceles bendiciones con mariposas

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Beta te luciste! Ahora...... disfruten.
Les invito a leer un crossover que publique recién : Lobos albinos!
Comentarios y votos please!.
............
La belleza de los picos Qing Jing era algo, que sin importar cuanto tiempo pasará, él seguiría notando, la tranquilidad, el olor de los Bamboo, aún después de haber transmigrado hace ya siglos atrás, el sistema había sucumbido al tiempo, dejándolo libre a él y Shang Qinghua de la molesta voz robótica.
Suspiro, agitando su abanico que era adornado con montañas en tinta color verde.
Paz.
- ¡¡¡Shizuuunnn!!!
Si, paz.
Llevaba bastante tiempo escuchando esa voz y sintiendo esos brazos alrededor de su cintura.
Siglos.
- Binghe, debemos partir. -. Palmeo la cabeza que se apoyaba en su hombro.
- Es muy lejos, Shizun. -. Lou Binghe abrazo la cintura del inmortal con un agarre de acero.
- Lo sé, por ello también Shang Qinghua vendrá y Liu-Shidi.
Lou Binghe gruñó ante el mencionado dios de la guerra.
Si bien, las sectas seguían aquí, eran considerados leyendas, pues casi no bajaban, los subordinados de Lou Binghe o los discípulos menores traían las cosas.
Pero los señores de los picos sabían lo que pasaba gracias a espías o comerciantes.
Así se enteraron del santuario de Puji.
***
El camino fue largo; en una ocasión, Lou Binghe no soporto y se llevó a Shen Qingqiu lejos de los otros dos.
- Lejos, muy lejos. -. Suplico Shang Qinghua, preparando unos tapones para los oídos.
- Solo espero que esto no nos retrase. -. Liu Qingge se había resignado a ver al acaramelado par. - ¿No vendrá por ti ese rey del norte? -. Le pregunto a Shang Qinghua, que casi escupió su comida.
- ¡No! *Tos* ¡Él está ocupado! *Tos* -. Si decía su nombre, se aparecería de inmediato y no, no quería que sus celos le cobrarán caro, gracias, habla del diablo y ¡el diablo aparecerá!
- Mmm. -. Liu Qingge tomo los tapones que Shang Qinghua le tendía, terminaron de comer y se dirigieron a dormir.
Esperaban que Lou Binghe se contuviera por el bien de Shen Qingqiu; luego recordó que él tendría problemas si cierto rey, se enteraba que estaba fuera sin avisar.
***
El templo Puji era enorme y rico.
Preciosas puertas de color rojo y dorado, techos negros y mariposas que adornaban las puertas, linternas rojas y flores blancas, lotos blancos estaban en un estanque cercano.
Flores blancas con rocío en ellas se balanceaban dulcemente en la ligera brisa de la mañana.
La belleza y paz del lugar combinaba con los creyentes que llegaban, cultivadores de poder y mujeres cultivadoras con grandes habilidades.
Había muchos allí que rezaban para protegerse de las próximas batallas, a sus hijos, a sus compañeros, a sus amantes o.… esposos.
Ninguno de los fieles se arrodilló, no había cojines donde hacerlo, el incienso era abundante y de dulce aroma.
Nadie les prestó atención.
Llegaron con la marea de gente.
La estatua familiar estaba justo en el centro, enfrente de la entrada dando una visión por completo de la hermosa escultura y sus detalles, como el hecho de la belleza del hombre que sostenía el paraguas, o la gentileza del hombre que tenía flores en su tocado, pero quién llamaba la atención, pues combinaba los rasgos de los hombres que sostenían sus hombros, era el joven de 15-18 años que posaba con una espada, su cabello estaba atado en una coleta baja, una trenza con lo que parecía una cuenca, ésta sostenía la trenza que estaba al lado del rostro del joven, delante de la estatua, una mesa con ofrendas como comida, vino o incluso joyas, estaba puesta allí.
Abundaban los bollos al vapor y los pastelillos rellenos con elaborados diseños, colores y formas; el vino en jarras negras, jarras de color rojo y de barro sencillo.
Las personas llegaban, dejaban su ofrenda o solo rezaban.
Shen Qingqiu observó los alrededores con curiosidad, desde su transmigración a la antigüedad, supo que los dioses serían más importantes que en la china de su vida pasada.
Las mejores ofrendas no eran las joyas o el dinero sino las plegarias y el incienso que se ofrecía y el sentimiento que llevaban.
También era consciente de la importancia del deseo que buscaba lastimar, los demonios se aprovechan de esa debilidad del corazón humano con mucha facilidad.
Lou Binghe miró la estatua del hombre que sostenía el paraguas con cierto tono de respeto.
Un respeto que nace del temor y el conocimiento de que está persona es mucho más poderosa que tú.
- ¿Binghe? -. Shen Qingqiu supo que él pensaba en esos cinco años en los que había sostenido su cuerpo, Lou Binghe le había hablado de cómo casi había acudido en su desesperación a el rey Fantasma.
Una decisión que casi le cuesta más de lo que podría aceptar.
- ¡Tú, maldito! -. Un hombre herido, lleno de vendas y sangre, salió de la nada con intenciones nada buenas, aunque estaba completamente cubierto de heridas, se arrojó contra Shen Qingqiu, pero Lou Binghe empujo al hombre vendado (tal vez con más fuerza de la necesaria) al suelo, el hombre estaba cubierto de heridas sangrantes, claramente dolorosas.
- ¡Apártese! -. Un ayudante del templo comenzó a alejar al tipo en el suelo que parecía enloquecido, incluso había espuma en su boca.
- ¡¡¡Maldito manga cortada!!! -. El hombre estaba pataleando mientras varios jóvenes lo arrastraban lejos de los fieles, que murmuraban.
- ¡¿Es él?!
- Lo es, ¡el noble maldito!
- ¡Está peor de lo esperado!
- ¿Crees? Es una suerte que pueda caminar. -. Voces llenas de desprecio, en especial de las mujeres y los jóvenes, los murmullos estaban llenos de desprecio, nadie lamento la suerte del hombre que era arrastrado fuera del templo.
Las voces se elevaban, pero Shen Qingqiu y Shang Qinghua se miraron.
Algo no estaba bien.
- Disculpe…-. Una mujer que llevaba una espada a la cintura se detuvo. - ¿Qué sucede? Ese hombre está herido, ¿por qué nadie lo ayuda? -. Shen Qingqiu estaba seguro que, si alguien se viera así, las sectas o cultivadores, incluso monjes tendrían la intención de ayudar.
La mujer examinó al pequeño grupo, notando la posesividad de Lou Binghe con Shen Qingqiu y el chupetón en el cuello, que le hizo alzar una ceja, pero sonrió, luego hizo una mueca.
- Ese tipo trato de destruir el templo. -. Dijo tranquila, aunque con claro desdén contra el hombre. - Fue porque su hijo se enamoró de un hombre y huyo porque está en cinta.
¡¡¡¡¿¿¿¿Eh~????!!!!
- ¿En cinta? -. Shang Qinghua estaba pálido.
- Si...... ¿No lo sabían? -. El desdén fue reemplazado por la sorpresa.
- Venimos por la popularidad del templo, somos del otro lado del continente. -. Explicó Shen Qingqiu.
La mujer entendió y la sonrisa de su rostro fue relajándose.
- Espero disfruten su estancia. -. La mujer deseó. - Puede preguntar lo que necesite saber, si no sé la respuesta, lo llevaré con quién si pueda resolver sus dudas. -. Prometió
- ¿Sabe del hijo de ambas deidades? -. Shen Qingqiu señaló al último integrante de la familia.
- Bueno....no mucho, pero los asistentes si, síganme, los llevaré con el administrador del templo. - La mujer los llevo directo a donde un hombre mayor mandaba acomodar el incienso para su uso.
- ¡Mayor Ming!
- ¿Si?
***
Wei WuXian estaba durmiendo pacíficamente, sentía los brazos de Lan WangJi a su alrededor, sonrió acomodando su rostro y enterrando su cara en el pecho de su esposo con aroma a sándalo.
Sintiendo entonces que......no quería separarse de él.
Se mantenía así hasta que un presentimiento lo hizo mirar alrededor.
¿Había algo...??
Recorrió con la mirada la tranquila habitación sintiendo que había...... ¿Qué?
Confundido, solo noto que la persona a su lado lo jalaba para abrazarlo.
Lan WangJi miró a su esposo con curiosidad.
- ....
- No sucede nada malo, Lan Zhan. -. Volvió a acurrucarse entre sus brazos.
- Mmm.
***
Jiang Cheng se sonrojo al notar otra caja bellamente tallada en lotos, la abrió con cierta emoción, tratando de verse completamente serio.
Había una horquilla de piedras lilas con forma de lotos florecidos.
Era hermoso y una clara demostración de sus intereses.
Lan Xichen le daba su regalo de compromiso, proclamando la seriedad de su decisión.
Si, estaba feliz...
Se levantó de golpe al sentir algo a su alrededor.
¿Qué había sido eso?
Esa sensación de...
***
La información obtenida en el templo de Puji fue contundente, el anciano administrador le hablo de la leyenda de la calamidad y la deidad con más detalle.
- Debería venir más a menudo. -. El anciano bebió el té con calma, mirando la interacción entre los esposos. - El joven señor suele ser calmado como un lago lleno de lotos…pero si arrojan una roca sobre él, puede realmente quién arroja la piedra, ¿lidiar con las ondas? ¿Contenerlas? -. El anciano Ming sacudió con pesar la cabeza
- El hombre maldito....
- Él insulto a sus señorías y a su propia sangre, ¿quién realmente puede soportar que insulten a su familia y bendiciones? -. Ming le dio amuletos y sobre todo a Shen Qingqiu y Shang Qinghua les dio un libro con un sello que se "abriría en el momento adecuado", los despidió en la puerta del templo con una sonrisa, diciendo un: "las bendiciones del joven maestro, sin duda son increíbles". Los vio partir con alegría en los ojos.
Ahora, Shen Qingqiu estaba atrapado entre los brazos de Lou Binghe, el administrador les había dicho que la secta Nie tenía a un médico Demoniaco que sabía más sobre las concepciones entre hombres, el camino fue algo accidentado, encontraron algunos cadáveres que caminaban sin rumbo, sin embargo, se enteraron de algo.
El patriarca Yiling estaba vivo y en la secta de GusuLan.
- ¿Patriarca Yiling? -. Shang Qinghua hablaba con el mesero que atendía su mesa en la pequeña posada.
- Si, dicen que regreso de la muerte, es nigromante, ahora casado con el segundo maestro de la secta GusuLan. -. El joven de jovial sonrisa, sirvió un poco más de vino a Lou Binghe, no noto la completa sorpresa que sus palabras provocaron. - Se dice que ambos se encargan de los problemas de los pueblos cercanos…más porque….
- ¡Disculpe, más vino! -. Un comensal lo interrumpió, el joven se disculpó volviendo a atender al hombre.
- ¿Qué piensas? - Liu Qingge miró a Shen Qingqiu.
- No había escuchado de algún nigromante en mucho tiempo. -. Shen Qingqiu estaba seguro que era famoso por sus métodos y conocimientos.
- Sé que algunos de ellos intentaron controlar a unos Demonios, no salió bien. -. Lou Binghe se bebió el vino con un solo trago.
- Binghe. -. Advirtió Shen Qingqiu.
- Está bien, Shizun. -. El joven se iluminó al tener la atención de su esposo.
¿GusuLan?
Shen Qingqiu se sobresaltó al igual que Lou Binghe.
- ¿Sucede algo? -. Shang Qinghua estaba comiendo su carne miró al par que parecía confuso.
- Me parece que…-. Shen Qingqiu miró todo.
Juraría que había una persona de blanco al lado suyo.
Lou Binghe se tensó al ver una mariposa plateada pasar por la ventana.
***
La llamada fue en Caiyi, un problema con cadáveres ambulantes que acosaban a una familia, Wei WuXian estaba al lado de Jiang Cheng, que lo amenazaba con romper sus piernas, Lan WangJi y Lan Xichen estaba hablando con los lugareños, que acostumbrados a que la pareja de esposos bajará por el licor favorito del patriarca, estaban celebrando su ayuda.
Nadie dijo nada del pasado.
Lan Sizhui estaba tomando discretamente la mano de Jin Ling que estaba rojo y, Lan JingYi trataba de no ganarse una amenaza, conteniendo sus carcajadas, si seguía así se rompería una costilla, estaba seguro.
La alegre familia fue interrumpida cuando un cadáver enloqueció, llevando a sus congéneres a seguirlo.
- ¡Huyan rápido! -. Lan Xichen saco su espada junto a su hermano, Wei WuXian saco talismanes y Zidian destelló.
Los cadáveres gritaban, llamando a más, pronto, una multitud de ellos se dirigió al grupo y la ciudad que protegían.
***
Los gritos los hicieron apresurarse, allí, en esa ciudad, los cadáveres se destrozaban por la acción de un hombre pálido, de ojos negros y ropa desaliñada, su rostro era melancólico, pero fiero a la vez, con sus manos destrozaba a los cadáveres.
Algo los había estimulado.
Saco a Xiu Ya de su funda y Lou Binghe saco su espada.
Shang Qinghua se separó y Liu Qingge saco su Cheng Luan con rapidez.
Uno a uno, los cadáveres fueron cortados, algo no cuadraba pues se volvían más y más violentos en cada ataque.
- ¡Son demasiados! -. Shen Qingqiu estaba inquieto.
¿Porque de repente un montón de cadáveres aparecen?
- ¡Rápido por aquí! -. Shang Qinghua evacuaba a los lugareños, sin embargo, un cadáver lo derribo.
- ¡Hermano! -. Shen Qingqiu trato de defender al otro cultivador, sin embargo, un rayo púrpura arrojó al cadáver lejos.
Una flauta resonó, la melodía hizo que los cadáveres comenzarán a caer, doblegados por el sonido, un par de hombres de túnicas blancas, dos jóvenes de túnicas blancas, uno de túnicas amarillas y finalmente el dueño del rayo púrpura cortaron a los cadáveres, un hombre de túnicas negras se acercaba tocando una flauta negra adornada con borlas rojas.
Shen Qingqiu supo que ese joven era el temido patriarca Yiling.
La energía resentida estaba rodeando al joven, volviendo sus ojos rojos.
Sin desaprovechar un segundo, Lou Binghe y Liu Qingge se deshicieron de los demás cadáveres.
- ¡Shizun! -. Lou Binghe le vio ayudar a Shang Qinghua, lo apartó del otro y abrazo con fuerza a su esposo.
- ¡¿Quiénes son?! -. El de púrpura se acercó con su látigo electrónico, se veía altamente peligroso, amenazante y autoritario.
- ¡Venimos en paz! -. Shen Qingqiu trato de soltarse de Lou Binghe, si bien sabía que el patriarca Yiling era un manga cortada, casado con un hombre, no iba a dar un espectáculo de su propia relación, ya era bastante la burla de su hermana marcial, gracias. - ¡Binghe! -. Le reprochó y el medio demonio lo soltó con algo de renuencia, se acomodó la ropa, escuchó una risa estrangulada venir del joven de negro y rojo, miró a Liu Qingge en advertencia y Shang Qinghua asintió. - Somos de las montañas, soy el maestro de Qing Jing peak, Shen Qingqiu. -. Dio una reverencia elegante. - Mi... Mi esposo, Lou Binghe. -. El medio demonio se iluminó un poco al escuchar su presentación y, Shen Qingqiu tosió un poco antes de continuar. - Mi Shidi, Liu Qingge, señor del pico Bai Zhan. -. El mencionado solo miró a todos atento. - Mi otro hermano, señor del pico An Dong, Shang Qinghua. -. Shang Qinghua dio una reverencia corta.
- Inmortales. -. Lan Xichen se acercó, dando una señal, todos guardaron sus armas, aunque aún desconfiaban.
- ¿Dicen qué son inmortales? -. El joven de morado se acercó, mientras Shen Qingqiu detallaba al joven de vestimentas negras y rojas.
- Si. -. El abanico de Shen Qingqiu se agitó y Wei Ying recordó a cierto miembro de la secta Nie.
- Pues me parece que tiene sentido... Más siendo tu esposo un demonio. -. La sonrisa de Wei Ying era reluciente, pero Shen Qingqiu se sorprendió y Lou Binghe se puso en guardia.
- Nigromante. -. Lou Binghe señaló con calma.
- Si.... Pero tú sabes que no fui yo. -. La conversación se volvió extraña.
Lou Binghe miró tras de sí.
- Más porque ese resentimiento tiene más edad que tú. -. Wei Ying saco su flauta y Lou Binghe saco su espada.
Ambos miraron donde Lou Binghe miraba y los demás se pusieron en guardia.
De las sombras, salía un fantasma de vestimentas rojas.
Sus ojos negros vacíos, el largo cabello con adornos ricos de oro, su velo se había movido para mostrar la cara de una joven sangrando por los ojos.
Por qué…. ¿Por qué me dejas?
¿El fantasma femenino estaba más allá de la salvación?
Ella sollozaba.
¿Por qué me dejaste atrás?
Todos estaban en guardia, la energía maligna de ese fantasma era lo suficiente para levantar a los ancestros de sus tumbas.
- ¡Retrocedan! -. La voz de un hombre resonó, sin más lo hicieron, mirando con sorpresa al hombre vestido de blanco, con un tocado de flores, espada negra en mano y una venda blanca que cortó la cabeza de los cadáveres reanimados, salió enfrentándose a la novia. - ¡Detente!
- Tú... Tú te lo llevaste. -. Las lágrimas de sangre se volvieron abundantes, sin esperar, se dirigió a atacar al hombre de blanco.
No llegó.
Una presión altamente poderosa hizo a todos casi caer de rodillas.
- Tienes agallas para intentar algo así.... Zhong Mei. -. Guapo, peligroso y poderoso, vestido de rojo, botas negras y brazaletes de plata.
Shen Qingqiu vio a su esposo palidecer, Lan WangJi vio al suyo temblar.
Ante ellos, el rey Fantasma hizo su aparición protegiendo a su esposo.
Una espada curva y el fantasma femenino grito de agonía hasta que se desvaneció.
La calma regreso, los cadáveres que habían sido reanimados cayeron al suelo al no tener el soporte de su invocador.
- Hua… Hua Cheng. -. Shang Qinghua estaba mudo, ante él, dos leyendas se hallaban.
***
Lan ZhaoYun miró a la puerta de la secta, su papá y mamá debían regresar pronto.
- ZhaoYun. -. Lan QiRen llegó y palmeo suavemente la cabeza del niño. - Ellos no tardarán.
- ¡Abuelo, mira! -. Mariposas blancas revoloteaban, pero se fueron cuando las mariposas plateadas las persiguieron, fue cuando las blancas huyeron lejos, que las plateadas se quedaron estáticas.
Cómo si solo comprobarán algo.
- Plateadas…mariposas plateadas. -. Lan QiRen no sabía de dónde, pero la presencia de esas alas plateadas le ponían nervioso.
- Mamá. -. Lan ZhaoYun se dirigió a paso rápido a Wei Ying, el cual cargo a Lan ZhaoYun, miró a Lan QiRen que se acercó a los invitados.
- Shen Qingqiu, Lou Binghe, Shang Qinghua y Liu Qingge, venimos de los picos Cang Qiong en busca de respuestas a los sucesos recientes y al doctor demoniaco Shen Wang. -. Un cultivador de vestimentas verdes y blancas hablo mostrando su respeto con una reverencia de manos unidas.
Lan QiRen se quedó sin habla.... ¡¿no eran inmortales?!
Dirigió su atención a el hombre de rojo que sonreía con algo de burla, a su lado, un joven se veía sereno con ropa blanca sencilla.
- Me disculpó por la llegada sin invitación. -. El hombre de blanco se disculpó. - Estamos comprobando las bendiciones de mi hijo.
- Su… ¿hijo? -. Lan QiRen se vio en un percance.
- Si, Hua Zhejiang. -. El hombre de rojo sonrió, el parche sobre su ojo le daba un aire de maldad.
- Ustedes son....
- Me disculpó, soy Xie Lian. -. La reverencia corta. - Mi esposo, Hua Cheng.
- ....-. Lan QiRen vio a sus sobrinos asentir, para luego....
- ¡Tío! -. Lan Xichen logro sostener a su tío antes de que diera en el suelo.
- ¡¡¡¡......!!!!! -. Wei Ying comenzó a reír de forma incontrolable, Lan ZhaoYun miró a su madre preocupado por su abuelo, Jiang Cheng suspiro con algo de diversión, Jin Ling estaba desconcertado y Lan JingYi fue rápidamente por ayuda con Lan Sizhui, Lan Zhan calmó a su esposo, Shen Qingqiu trato de no reír, Shang Qinghua sudaba de los nervios, Liu Qingge solo resopló y ambos dioses estaban mirando, uno divertido, el otro preocupado.
- ¿Quién diría que una calamidad y un dios vendrían? -. Wei Ying dejo de reír para cargar a Lan ZhaoYun mientras miraba a los invitados.
- Las barreras son buenas. -. Hua Cheng sonrió. - Pero realmente no son nada para mí a esta edad.
- San Lang. -. Reprendió Xie Lian.
- GeGe, está el rastro por aquí pero no hay más.
- Zhe-er es muy bueno huyendo. -. Suspiro Xie Lian.
- Lo sé.
- Los llevaré adentro. -. Jiang Cheng le dijo a Lan Xichen que asintió.
- Debe ser un gran viaje. -. Wei Ying se acercó a la calamidad y al semi-demonio. - ¡Un gusto! ¡Wei WuXian, Patriarca Yiling!
- .... Lou Binghe rey demonio del sur.
- Hua Cheng, rey Fantasma. -. El de parche sonrió.
- Wow, ¡su belleza casi rivaliza con la de Lan Zhan! -. Wei Ying observó a los esposos detrás, que hablaban tranquilamente sobre las comidas. - Creo nos llevaremos bien.
- ¡Oye! -. Jiang Cheng trato de detener a su alocado hermano, mientras Lan ZhaoYun miraba a los invitados curioso.
- ¡Es cierto! Además, ¿quién más puede hablarnos de como consiguió la bendición Shen Wang?
Jiang Cheng suspiro de nuevo, mientras con ayuda de su hermano y su sobrino, llevaba a los invitados a descansar y comer.
- Hermano…. ¿WangJi? -. Lan Xichen vio a su hermano sostener a Wei Ying de la cintura, con todo y Lan ZhaoYun.
- Tío, espero estés consciente pronto.
- Aunque será interesante tener a semejantes invitados. - Lan Xichen formó una sonrisa la cual se amplió con alivio al ver a los médicos detrás de sus sobrinos.
Sería una movida semana.

Hijo del Jade y el NigromanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora