UN CAFÉ CON MI PROFESOR Y SU EX ESPOSA [EDITANDO]

Chapitre Dix

La pequeña salida iba bien, hasta ahora y el sólo pensar que talvez no sea la última lo alegraba.
Escucharla hablar era una melodía hermosa, la mejor canción que había escuchado, nadie hubiera creído que tras esa chica frívola y soberbia se encontraba alguien con un millón de metas y sueños.

-Y estoy esperando a que alguna editorial me habrá las puertas-escucha a su melodiosa voz-Sebas quiere ayudarme-no sabe porque menciona ese maldito nombre sino va a aceptar su maldita ayuda.

Solo espera que Francis no lo haya notado.

Pero, para Francis ella siempre tuvo su total atención, la oyó decir cada palabra desde que salieron, y también ese nombre, ese maldito nombre.

"Sebas" aquel nombre le incomodaba. Sabía quien era, es decir no lo conocía fisicamente, pero había conversado con su alumna y la había oído hablar sobre él por los pasillos;si la perseguía por los pasillos, más maldito acosador no podía ser; la relación que tenía Merlina Antonia no podía ser más tóxica y más rara. A ciencias cierta, no tenía idea de que eran.
Cada día oía a Merlina hablar sobre el, de lo peor pasaba de decir lo mejor y viceversa durante la semana.
Era una relación inestable y que un ángel como ella no merecía, además se decían que ese chico estaba en malas mañas.

Y Merianto ya había pasado por eso como para volver.

-Entonces ¿Escritora?-pregunta curioso a lo que ella asiente-¿y sobre qué escribes?
-Sobre cualquier cosa-dice restando importancia, pero la cara de Francis le dice que no aceptara eso como respuesta
-Merianto, cuéntame-dice con tanta tranquilidad y paciencia que lo suelta
-Romance-contesta
-¿Romance?-dice incrédulo-no te veía muy romántica
-Y yo no lo veía con esposa e hijos-comenta ella fingiendo cinismo
-Touché-responde y eleva sus manos asimilando su derrota

Merlina suelta una pequeña risa por su acción.

-Me inspiró en los romances de los mitos griegos, en especial el de Hades y Perséfone-responde-Es mi favorito-añade y sonrie al recordar el mito.
-¿Hades y Perséfone?-pregunta extrañado, ella asiente-Hades y Perséfone no tienen ningún romance-ella frunce el ceño por su comentario-fue un secuestro, nunca se enamoró.
-claro que si-defiende ella-Perséfone vuelve cada invierno por algo ¿No?
-Si, Porqué Hades la engaño, para hacerle comer la mitad de la granada-
-Leaselo bien. Hades la detiene en la cuarta semilla-dice-recapacita y se da cuenta de su error y así le concede felicidad a Peréfone.
-Perséfone nunca será feliz al lado de Hades-Francis se pone serio-no lo ama y nunca lo hará
-Pero con el tiempo aprendió a amarlo-cierra la conversación cruzándose de brazos y recostándose en la silla
-Por mera obligación-dice el imitando su postura, haciendo que ella habrá la boca indignada

Los dos cambian miradas de odio, hasta que estallan en carcajadas.

Es en ese momento que Merianto se da cuenta de lo hermoso que su rostro es cuando sonríe.

Francis para de reír.

-¿Pasa algo, Merianto?-ese apodo es dicho por sus compañeros en forma de broma o de burla, pero en sus labios suena simplemente perfecto
-No-niega.Ella sabe cuanto sus ojos brillan al verlo, ese mismo brillo tenía cuando miraba a Sebas.

Sebas.

Su cara se vuelve seria y en esos minutos medita su relación con el, nunca llego a reír así con el, ni a tener una conversación tan agradable y mucho menos un debate como el que acaba de tener con Francis.
Lo único que obtenía de él eran peleas y celos, ¡ni siquiera sabía qué relación tenían! A veces solo follaban y luego cada uno iba por su lado y otros días iba a recogerla a la universidad reclamando que era suya y eso terminaba en una pelea donde los dos salían perdiendo, luego le llamaba diciendo que necesitaba una paja y que la amaba y ella de estúpida iba porqué era adicta al sexo.
Era mujer y como mujer tenía necesidades, pero con Francis era diferente y ella sabía que podía ser así.

Pero tenía miedo de cambiar a Francis, así como Sebas la cambio a ella.

Ese año que no fue a la universidad y fue por su culpa.

"Deja de pensar en eso ¡Déjalo ya!"

-¿Pasa algo?-la perfecta voz de Francis interrumpe sus demonios y al ver su cara preocupada, las defensas de ella bajan.

"No merece que lo lleve a la oscuridad"

No, no lo merece, pero ella también sabe que si quiere seguir adelante debe dejar todo eso atrás, incluyendo a Sebas.

Sobre todo Sebas.

-No, Francis-sonríe-nada