UN CAFÉ CON MI PROFESOR Y SU EX ESPOSA [EDITANDO]

Chapitre Trente

Con un gruñido se levantó de las manos de Adonis dirigiéndose a su bolso donde se encontraba su celular, presionó con fuerza y lo colocó en su oreja.

-¿Que?-dijo fastidiada
-caray, prima ¿Acaso cada vez que te llamo es que follas con Francis?

Meri negó con la Veneza mientras sujetaba su nariz.

-¿Que deseas Milly?-habló más tranquila
-Salir con mi prima que me trae abandonada

Merlina abrió la boca para protestar, pero.

-Follar no es estar ocupada, si es la excusa que ibas a darme.

La receptora gruñó.

-Pasó por ti, ponte algo bonito iremos a bailar-dice
-Bailar, pero si es temprano-dijo tomado su teléfono para ver la hora
-Meri-su voz es alarmante-son las 4:30
-¡¿Que?!-chilli-¡¿Son las 4:30?!-cuestionó mirando a Francis quien tomó enseguida su celular para verificar si era cierto.

Vio ella su teléfono también y si era esa hora.

-Mierda-murmuró
-¿Te sorprende? Creo que si-dice-pasó por ti en una hora
-¿Una hora?
-Tik tok, el reloj avanza

Y colgó.

-¿Problemas?-preguntó Francis con una sombre de sonrisa
-¿Quieres ir conmigo a una discoteca?-dice esperanzada a que acepte

Francis sonríe como si se burlara de ella.

-Obviamente no-dice-¿Porque no me dijiste que eran las 4:30? ¿A qué hora llegamos anoche?
-Creo que a las dos-respondió observando su celular

Meri lo estudio con cuidado se veía guapísimo con su pelo rubio fresa despeinado y desnudó, sus ojos que no estaban ocultos tras sus gafas lo hacían ver más joven, podría pasarse por alguien de su misma edad.

Francis se paró tapando sus partes nobles, fue hacia ella par estamparle un beso, beso que ella acepto gustosa.

-Te amo-murmuro a su Adonis
-Te deseo-dijo con una sonrisa juguetona ganándose un ligero golpe de ella junto a una sonrisa.

Negó divertida.

-Me voy a bañar-dice-me acompañas-aumenta con un tono coqueto
-Seria un honor-sonríe

Francis la toma de las caderas cargándola y obligándola a enrollar sus piernas en su cintura y así ambos se dirigen al baño.

-Sera una larga ducha-dice sonriendo

Él responde con una carcajada.

——

Luego de la muy merecida, y larga ducha, Meri tuvo que ir en el coche de Francis a su apartamento para escoger un conjunto.

Siempre fue de tardar una odisea eligiendo ropa, pero termino justo a tiempo.

Con unos pantalones negros ajustados y una blusa de hombros descubiertos se puso sus zapatos de tacón rojo.

Su maquillaje fue muy recargado en especial sus labios que eran un tono pasión.

Su cabello caía en bucles sobre sus ombros y los mechones de adelante estaban sujetos por pasadores.