ᙓᒪ ᒪᗝᕊᗝ. #Wattys2019 SAGA MI LUNA II.

.11.

Estamos de vuelta en casa, cuando hemos llegado ya no hay mucho que hacer, por suerte hemos cogido a tres de los suyos, que por supuesto están muertos, entro a mi cuarto y aún que la oscuridad aquí está presente veo la silueta de Ella en mi cama, entro al baño y me doy una ducha de agua fría, salgo y me visto para ir a la cama y tumbarme juntos ella en el lado libre de la cama.
_Has conseguido algo. Su voz es lenta y suave.
_No mucho, pero tu deberías de dormir y no pensar en eso.
_No puedo.  _¿Por que?  _Estaba preocupada, por ti.  _ A mi esos aficionados no me pueden hacer daño. Ella posa su mano sobre mi pecho desnudo.
_Menos mal.  Yo me quedo quieto, debería de apartada de mi pero no puedo mi lobo no me deja, su tacto es tranquilizante. _Hugo. _Dime.
_Eloy es tu hijo.  Como la gusta sacarme de quicio.
_No. _El te llama padre, no me mientas.
_No te miento, no suelo hacerlo, el no es mi hijo. _¿Y entonces? _Duermete. _Cuentame.
_Eloy, era un niño que encontré abandonado, le acogí hace muchos años.
_Vamos que eres su padre.  Mira que es pesada. _Lo que tu digas. _Gracias. Y ahora que la pasa. _¿Por?
_Por confiar en mi y contarme lo. Ella se vaya por fin y se acerca más a mi. _Hugo. Ya decía yo. _Dime. _Estando contigo me siento bien, me siento protegida. No respondo, pero en mi cara se dibuja una sonrisa por alguna razón me gusta que se sienta así.

Despierto acalorado, Odette esta totalmente cruzada en la cama con las piernas sobre mi cuerpo, y los brazos colgado por el otro lado, esta mujer es frustrante, como es posible que haya acabado así, la miro y veo como duerme plácidamente, no quiero despertar la no me apetece escucharla desde primera hora del día pero sus largas patas me impiden moverme sin que ella se entere.
Paso las manos por mi pelo, y con cuidado levanto sus piernas, me tiro hacia el suelo y caigo haciendo más ruido del que querría, me levanto despacio y miro hacia la cama donde sigue dormida, suelto el aire de mis pulmones con alivio, entro en el baño y me doy una ducha, pongo los ojos en blanco al salir de ella y comprobar que me he dejado la ropa fuera con las malditas prisas, enrollo la toalla en mi cintura y salgo con cuidado, para mi sorpresa ella honesta en la cama, miro por la habitación y no esta. Donde narices se habrá metido ahora, me visto con tranquilidad y antes de salir aparece  con los pelos echos un desastre y bostezando. _¿Donde te has metido? _Buenos días a tu también. Se tira a la cama boca bajo y no puedo evitar reírme. _¿Vas a seguir durmiendo? _Si no te importa, apaga la luz cuando salgas. Ella busca la sábana con su mano pero sin abrir los ojos. _Toma. Cojo la sábana y se la echo por encima parece una niña pequeña. _Gracias. Dice entre bostezos, me acerco a la ventana y bajo las persianas para que no la moleste la luz para después salir de la habitación apagando la luz.
No me esperaba que tuviera tan buen despertar, pero aún asi debería preparar una habitación para ella.

Bajo y tengo a mis lobos deseado salir en busca de respuestas, en busca de quien tanto quiere mi muerte como para poner en peligro a una humana que nada tiene que ver conmigo.
_Alpha, estamos listos.
_Salimos ya. Ordeno a mis lobos.
_Hugo. La voz de Efren que es el único que me llama así me hace mirar hacia mi derecha.
_Dime.  _ Quizás deberías quedarte. Su frase me causa risa, rabia, furia. _No. No digo más ando hacia el bosque con el resto de la manada y una vez allí todos cambiamos de forma, corremos siguiendo el rastro de los que ayer matamos, parece que eran listos los muy hijos de perra sabían como ocultar su olor.

Pasan horas y parece que nada de lo que hacemos nos acerca a ellos, las horas se nos echan encima y decido volver junto  a la mayoría, solo se quedan mis mejores rastreadores, al parecer esto va a ser más difícil de lo que me esperaba y sin Eloy aquí que es el mejor quizás nos lleve más tiempo de lo normal.

Llegamos a casa, estamos destrozados, la mayoría se van a sus habitaciones y otros van directos a la cocina a comer, de allí sale un olor muy rico y decido asomarme antes de subir a darme una ducha.
_Toma, coge más. La voz de Odette se hace presente, esta paseando entre mis lobos con una bandeja de comida, ofreciendo a todos, se gira y sus ojos se encuentran con los míos y empieza a acercarse despacio hacia mi. Me ofrece la bandeja antes de decir nada. En la bandeja hay pequeños cachos de pastel de carne, me gusta mucho el pastel de carne y no dudo en coger algún trozo, se acerca más a mi y como si nadie la escuchará me habla muy bajito.
_ Hola hugo, ¿todo bien? Me da por reírme por que en esta casa todos la han escuchado, pero ella sigue sin darse cuenta y yo la sigo el juego y la susurro.
_Si todo bien. Y antes de que diga nada más ella me interrumpe y dice todavía más bajo. _Lo siento por esta noche acabar encima tuya. Todos se centran sus miradas  en ella y en mi y mi cara cambia al instante.
_Aqui todo te escuchas estúpida. Le digo mucho más alto y ella suelta de golpe la bandeja haciendo un ruido espantoso.
_Imbecil. Se gira y yo me voy a toda prisa a mi habitación, esta mujer me va a matar a disgustos. 

Me ducho rápido y salgo sin más, para mi sorpresa ella está aquí y mis ojos se fijan en la cara de sorpresa y los ojos saltones que tiene. _Que miras. Le grito.
_Nada dice apartando la vista de mi miembro.
_Que haces aquí.
_No se a lo mejor y digo solo a lo mejor duermo aquí.
_A partir de hoy no, te buscaré otro sitio. Ella se sienta en la cama pero no dice nada ya no me.mira solo mira el suelo.
_¿Que pasa ahora? Ella coge la toalla que hay sobre la cama y me la tira. _Pontela. Yo hago caso y me acerco más a ella. _¿Que pasa Odette? _Quiero dormir aquí, puede que nunca haya dormido tan bien como hoy.  Mierda, que hago ahora.
_Y yo puede que haya sido la peor noche. Me mira enfadada. _Exagerado. _¿Exagerado? Si has acabado encima de mi, no podía ni moverme y tus ronquidos son torturadores. _ vale que me muevo mucho, pero yo no ronco. _Eso lo dices tú.
_Por que es verdad, mira déjalo, ¿donde quieres que me vaya?
Yo me separo de ella y paso las manos por mi pelo, que hago con ella, me va a volver loco. _Quedate aquí, ya veré donde te puedo hacer un hueco. _No, me quiero ir ya.  _Pero que te pasa, no decías... _Si pero si tan estorbo soy. _Odette, ya vale no te portes como una cría, quédate si quieres yo he dormido bien.  _ Ah ahora sale la verdad, vale me quedaré solo porque duermes bien conmigo. Pasa por delante de mi y sale de la habitación dejándome solo, realmente  esta loca y me temo que voy a acabar como ella o peor.

Después de una tarde tranquila en la casa y sin ningún alboroto de Odette salgo al jardín donde contesto a la llamada de Hennor.

_Hola hermana.
_Que narices te crees, que no me iba a enterar, le has mandado tu.
Mierda.
_Que?, no claro que no ellos ya son mayores Hen, hacen sus planes no se nada pero supongo de que hablas.
_No te rías de mi, sabes de que hablo.
_Jamas hermana, escucha me en poco tiempo estaremos allí para la ceremonia no crees que es mejor que se venga ahora y así está poco tiempo fuera, con suerte a la vuelta ya se le ha quitado la tontería y se queda allí. Ella se queda casada durante un minuto. _Puede que tengas razón, pero como le ocurra algo, te prometo que voy y yo misma te pego una paliza.

_Hugo!!! ¿Donde estas? Hugo!!!
Mierda es Odette.

_¿quien es esa Hugo?
_Nadie. 
_Nadie te llama Hugo?

_Hugo, por fin te encuentro, necesito salir y Efren me ha dicho que te avise, no me hacia gracia el tener que avisarte de mis cosas pero ya que dormimos juntos he pensado que puedo hacer el esfuerzo.  Mierda, por que será tan bocazas.
_No ves que estoy hablando por telefono.
_Perdone majestad, no ves que tengo prisa.
Es imposible con ella. _Vete donde quieras.
_ Iba hacerlo de todos modos.  Miro como se aleja y un impulso me hace hablar.
_Espera, te llevo yo, un segundo. Le grito y presto de nuevo atención al móvil.

_Hen te tengo que dejar, mañana hablamos.
_No se te ocurra colgar sin decirme quién es la valiente que te habla así, y que para más datos duerme contigo.
_No es lo que piensas.
_A no?
_No ya te contaré, ahora tengo que colgar.
_Hugo.
_Te quiero hermana, no seas cotilla.

Cuelgo el móvil y ando hacia Odette que está esperando a pocos metros de mi.
_Tienes una hermana. Que cruz me ha caído con esta mujer.
_Si. _¿Solo ella? Mi cara cambia, no quiero hablar de este tema.
_Si, solo.
_No quieres hablar del tema.
_No.  _Pues dilo, es sencillo. La miro mientras ella me sonríe y se sube al coche, yo sigo acto y después arranco para ponernos en marcha.
_¿Donde necesitas ir?
_A una farmacia. Le pasará algo, pero no digo nada solo conduzco hasta la farmacia más cercana.
_Esperame aquí vale. Me lo pide tan bien que sospecho que lo que vaya hacer es algo que no quiere que sepa, pero me da igual yo la hago caso y me quedo en el coche  revisando el móvil, miro hacia la farmacia y veo que ya esta pidiendo intento enfocar pero no puedo verlo desde aquí, las tripas se me revuelves solo de pensar que quizás este comprando condones y que quizás los vaya a usar con algún lobo mío, en mi casa, no pienso consentirlo, por nada de mundo.

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