Puzzle [B-L/GAY]

C A P Í T U L O 0 3

 Me apresure en llegar a casa, tengo mucho en lo que pensar y pensar en algo para deshacerme del rubio ese, cuál era su nombre Jackson creo. Procesare todo que acaba de pasar, en mi cabeza paso todo en cámara lenta. Al llegar a la puerta saque un par de llaves de mi bolsillo para abrir la puerta. Al abrirla y entrar, arroje me mochila al suelo y subí las escaleras, me cambien el uniforme por una ropa más holgada y listo para recostarme en mi cama y analizar todo.

Que Jackson sepa algo de Samantha significa que Logan le dijo algo al respecto, pero eso nos responde a la pregunta del ¿Por qué el busca a mis demás chicas falsas? Él dijo que no buscaba a Samantha en específico, entonces busca a las otras yo. Un patrón...tal vez debería dejar de trabajar hasta que las aguas se tranquilices.

Como él se enteró de que hay "otras chicas" que están a los chicos, es decir yo nunca di un nombre o apellido real, ni mi número de teléfono o mi dirección, tal vez eso fue demasiado sospechoso. Sin darme cuenta caí en un profundo sueño que fue interrumpido por el sonido de mi alarma.

Son las 6 en punto de la mañana, aún falta una hora y media para entrar a la escuela, preferiría dormir un poco más pero el estómago me ruge por no haber cenado ni almorzado ayer. Me talle los ojos y baje a la cocina, me prepare un sándwich y un café. Hace ya buen tiempo que no desayuno tan calmadamente. Al terminar dejo la taza y el platillo en el lavadero. Tal vez te preguntes ¿Y tu familia? Mi madre murió en un accidente en avión y no me gusta hablar sobre mi padre y demás familia. Subo a mi habitación para cambiarme con el uniforme escolar y cepillarme los dientes. Recojo mi mochila, está precisamente donde la deje ayer y parto con rumbo a la escuela, al llegar hago lo mismo que todos los días, recoger algunas cosas de mi casillero y caminar hacia el salón sentarme y mirara por la ventana.

Comienzan las clases, miro a mi lado derecho y lo encuentro a él mirando un cuaderno de apuntes, con unos gráficos extraños y garabos sin sentido. Este chico sí que es una caja de sorpresas, lo olvide al llegar a casa no tuve tiempo de pensar si iría o no a la dirección anotada en el papel que me dio. Tal vez, si valla me urge saber que trae este chico bajo la maga.

Que sabe y que no, quien le dijo sobre eso, rebusque en mi bolsillo para encontrar en papel, al sacarlo lo desdoblo y comienzo a leerlo

Tal como él lo dijo una dirección y su número de celular, al releer la dirección escrita en el trozo de papel me di cuenta de que estaba a 2 cuadras de mi casa. Es realmente cerca, ahora puedo asegurar que iré no pierdo nada caminando 2 cuadras.

Volví a voltear para observar al rubio, este seguía centrado en su libreta con gráficos sin sentido, tal vez no está del todo cuerdo e intenta fingir ser un súper detective. Que quiere encontrar a "las chicas misteriosas" que en realidad solo son yo vestido de chica, con pelucas y lentillas. Será mejor que deje de perder su tiempo.

Ya sonó la campaña que indicaba que era la hora del almuerzo, otra vez una multitud de chicas se acercaba al rubio. Espero que esto no se vuelva costumbre de estas chicas, yo me perjudico.me levante de mi asiento, dispuesto a lárgame a la azotea, donde hay paz y tranquilidad.

Sin más, me senté en el mismo lugar que ayer. Habían pocas nubes, me concentre en el azul claro del cielo, me recordaba a mi madre, un sentimiento de melancolía me invadió.

-Ella amaba este color- mencione, sabiendo que nadie más escucharía más que yo mismo.

El azul claro, era el color favorito de mi madre.

Estaba recordando momentos y recuerdos con ella, hasta que el sonido del timbre que indicaba que debíamos volver a las aulas me distrajo.

Al retornar al salón, di con el mismo panorama de ayer, un montón de chicas rodeando al nuevo galán del instituto.

-Que fastidio- susurre y camine hacia mi asiento, no me agrada en lo absoluto.

Las clases continuaron, al pasar unas 2 horas, un papel doblado cayó sobre mi escritorio. No sabía si era para mí, ¿En qué piensas Lucas? Obvio no es para ti. Nadie te escribiría por ello, para cerciorarme levante la cabeza y mire para mi lado derecho. Si, era él tenía una mirada fija en mí, sus ojos decían "ábrelo" según yo.

·