Solo Tú (Higuel)

Un Bar.

-Ni por donde comenzar- exclamó el joven de piel morena suspirando en señal de derrota.

-Soy Miguel, tengo veintiún años y acabo de terminar una gira de seis meses por México. Entonces yo regreso a San Fransokyo para retomar mi vida y la universidad, tal y como la dejé.
Pero no. Todo cambio tan repentinamente en estos meses, y no hablo de las clases o de mis amigos habituales, me refiero a mi mejor amigo, el chino genio de la robótica que me robó el corazón.- Miguel tomó otro trago de la cerveza que traía consigo y prosiguió...

-Cuando me fui de gira, estaba orgulloso de saber que ese chino tan orgulloso por fin se había abierto a mí, tarde años en que nuestra amistad llegara a ese nivel de confianza, yo sabía todo sobre su vida y por ende yo le conté todo sobre la mía. Claro que no me creyó nada respecto a mi vista a la tierra de los muertos, pero era de esperarse de un chico de ciencia, ¿Sabes?

A pesar de todo no lo tomó a mal ni me dejó de hablar diciéndome que estaba chiflado.
No te imaginas cuanta gente se alejó de mí al intentar hablarles de mi aventura mágica y el no lo hizo, fue honesto me dijo:
-Miguel tú historia suena increíble, una parte racional en mí me grita que es pura fantasía obra de un niño de doce años, pero hay otra parte en mí que sabe que jamás me has mentido y si tu crees que es verdad, lo más probable es que lo sea, no dudo de tú palabra pero soy un chico de pruebas. Aún así el lugar que describes me encanta, siento que es el lugar perfecto para que el alma de Tadashi descanse por la eternidad, tal vez este año me puedas ayudar a hacer una ofrenda para él.

-En ese momento sus grandes ojos avellana me miraron con un brillo que denotaba un poco de esperanza, eso me llenó de fuerza y disipó el miedo que sentía pero también me hizo sentir un extraño cosquilleo en mi estomago que subió hasta mis mejillas.- Habló el joven moreno soltado un suspiro lleno de sentimiento al aire.
-Fue la primera vez que me detuve a admirar lo fino del rosto de Hiro, su piel tan blanca y delicada como la porcelana, junto a su esponjoso cabello azabache y lo que más me fascina en él, su sonrisa.

La verdad tenía un chingo de miedo por su reacción, digo para el tampoco fue fácil admitir ser un héroe frente a mí pero el tenía la ventaja de poder darme pruebas.
Y bueno después de todo eso nuestra amistad era ya tan estrecha ¿sabes? Y-y aunque lo intenté no podía dejar de pensar en el de forma diferente ya no solo como un amigo, de la noche a la mañana sus labios se volvieron tan interesantes que mi mirada siempre terminaba observandolos y el no solía sonreír mucho pero cuando estábamos juntos comenzaba a hacerlo más seguido su sonrisa tan encantadora y sus ojos tan brillamtes cada ves que los veía, comenzamos a pasar tanto tiempo juntos y las pocas ocasiones que no nos veíamos solo podía pensar en verlo, hablabamos más y más. Yo estaba listo para dar el siguiente paso, lo arriesgaría todo Hiro lo valía!! Y entonces la noticia llegó...-

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Miguel se encontraba en el patio del SFIA revisando los acordes para una nueva canción que escribía, cuando una silueta femenina se posó frente a el.

-Ah joven Rivera, me alegra verlo estaba buscándole.- dijo la mujer de cabellos grisáceos con una sonrisa.

-Oh, ¡directora!- Exclamó con algo de pánico. -amm... Yo, lo lamento si está aquí por lo sucedido en la clase de apreciación músical, déjeme explicarle fu- el joven fue interrumpido por la mano de la directora que fue levantada a la altura del joven mexicano mientras negaba con la cabeza.

-Estoy segura que la historia que tiene al respecto debe ser fascinante, pero no vengo a hablar de eso. ¿Recuerda el show de talentos del año pasado?
Pues entre el público se encontraban algunos caza talentos en busca de sangre joven y me alegra informarle que uno de ellos le echó el ojo, Rivera.

En fin, el representante se ah contactado conmigo para ofrecerle la oportunidad de tener una pequeña gira por su natal México, aparentemente usted sería el numero de apertura de una banda famosa en su país. La gira tiene una duración de un año pero al ser un estudiante accedieron a contratarte solo seis meses, y así tener la oportunidad de volver para completar sus exámenes. Me han pedido que le informe de la propuesta y que tiene hasta el viernes de esta semana para confirmar su asistencia al evento.
La decisión es solo suya joven Rivera piénselo y hágame saber su respuesta para más tardar el viernes, linda tarde y no más problemas porfavor.- el rostro de la directora denotaba fastidio, dio la vuelta y se marchó a paso firme.

El moreno estaba atónito ante la repentina noticia, feliz pero a la vez impactado. El no quería dejar san fransokyo sus padres y su hermana estaban aquí, Hiro estaba aquí.

¿Que iba a hacer el solo por seis meses en México? Digo, claro que extrañaba México es su país, su pueblo y el resto de su familia pero tenia ya tanto tiempo viviendo en San fransokyo que sentía que su hogar era ahí.
Sin saber que hacer se levantó del piso y comenzó a correr en dirección de la única persona que le podría ayudar.

Así se encontraba el moreno jadeante frente a las puertas de los laboratorios después de correr un largo camino, tocó la puerta y esperó alguna señal para entrar. La puerta entonces se entreabrió dejando ver una mata de cabellos rebeldes.

-¡Miguel!, ¿Qu-que haces aquí tan repentinamente?- El joven de ojos rasgados dirigió su mirada al piso y sus mejillas se tornaron ligeramente carmín.

-Hiro, no se que hacer... El moreno hizo un lindo puchero con su carita triste fascinando aún más al asiático.

-¡Ven pasa! Cuéntame todo Miguel...
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-Y entonces el chino me dijo:
Miguel, la música es tu sueño y yo se que darías todo por tus sueños, entonces si es lo que deseas, hazlo.
Tú hogar siempre estará con tus seres amados pero lo más importante es que no importa donde estés ellos estarán siempre contigo apoyándote aunque no puedas verlos.

-Sus palabras *hip* me conmovieron *hip* tanto- habló entre hipo el de tez canela.
-Ahora que lo pienso tal vez solo lo estaba molestado y me dijo eso para no tener que soportar me por seis meses- dijo Miguel comenzando a sollozar levemente, el moreno se reincorporó en menos de un par de segundos aunque se sentía muy mareado.

-Oye amigo gracias por escuchar mis tonterías mientras mis amigos llegan. Me sorprende lo bueno que eres para escuchar y que sepas español.- Miguel sonrió al desconocido, le dio un fuerte abrazo y entonces tomó un mechón de su cabello verde y lo apartó acercándose lentamente hasta besarle...

-Etto, Miguel ¿what are you doing?- Preguntó el muchacho de tez clara y un parche en el ojo.

-¡Ah! Kubo, mi amigo que bueno que llegaste ¿donde está Leo?-

Kubo miró preocupado a su borracho y moreno amigo sin entender ninguna palabra que le había dicho y suspiró hoy sería una noche larga para él y para Leo, y pensar que apenas eran las 6:30 de la noche.

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Y bueno éste fue el primer capítulo, se que todo aún puede ser confuso pero es apenas un planteamiento de lo que se desarrollará después, de igual forma no creo que la historia de para muchos capítulos.

Como sea ojalá les gustará cualquier duda sugerencia o error que quieran señalar me no duden en dejarme un comentario.

¡Saluditos!

Lors~*