Matrimonio arreglado (SiChul)

La unión hace la fuerza

Kangin no entendía porque las cosas se habían tornado de esa manera, el día había comenzado lleno de felicidad y alegría, seguía sin poder creer lo que estaba pasando caminaba de un lado otro en el estacionamiento tratando de asimilar lo que había pasado, en cuanto Kibum se recuperó por completo Minho le hizo saber que se habían llevado a Heechul, sintiéndose culpable por no haber sido capaz de proteger a su jefe, se retiró del lugar y fue con los de seguridad en compañía de los demás para revisar las cámaras de video solo para darse cuenta que el sistema había sido hackeado, no tenían idea de cómo dar con los responsables no sabían en que vehículo habían huido o quien los mando a cometer el secuestro, con el ánimo y las esperanzas destrozadas regresaron a casa para dar la mala noticia a los demás que no tenían idea de lo que había pasado, cuando recibieron la llamada de Heechul se encontraban dentro de la casa y los demás fuera en el jardín preparando todo para la cena por lo que no hubo tiempo de ponerlos sobre aviso.

Los chicos iban en el auto de Kangin mientras que el chofer se había ido solo, todos se encontraban llenos de incertidumbre no sabían por dónde empezar para obtener pistas de su paradero, contar con la ayuda de la policía no era opción no querían poner en riesgo la vida de Heechul.

Para cuando llegaron a casa era pasada de la media noche los chicos los esperaban en el jardín para cenar, el ambiente se miraba muy animado no querían arruinar el ánimo de todos pero tenían que darles la noticia, los cuatro salieron al jardín Hangeng quito la música y todos voltearon a verlos, de inmediato Teuk se acercó a Kangin con una sonrisa en su rostro.

—¿En qué momento llegaron? – Empezó a sospechar que algo andaba mal al observar con detenimiento el rostro de su amado – ¿Qué ha pasado porque estas así? – Sungmin y Kyuhyun se acercaron a ellos.

—¿En dónde está Heechul? –  Min llevaba en brazos a una desesperada Heemi – no puedo tranquilizarla y Junwon está igual, ambos están muy irritados – no recibía respuesta alguna.

—Yo... no sé cómo decir esto – Kangin estaba nervioso, comenzó a morderse los labios.

— Habla de una maldita vez  ¿Qué está pasando? – no le agradaba la actitud de su hermano.

— ¿Por qué Heechul no está con ustedes? –  miro a un chico desconocido con ellos - ¿y quién es él? – Jonghyun lo señalaba.

— Hace unos momentos nosotros salimos de casa – apretó los puños – Hangeng recibió una llamada de Heechul para informar que había terminado con el trabajo – su corazón comenzaba a acelerarse – durante la llamada él junto a su secretario Kibum – lo señalo con la mano – fueron sorprendidos por unos hombres en el estacionamiento, en cuanto escuchamos eso nosotros tres salimos de inmediato al hotel, pero para cuando llegamos ya era demasiado tarde, se lo habían llevado – trago saliva, sus ojos comenzaron a verse vidriosos – secuestraron a nuestra princesa – llevó su mano a la boca para tratar de ahogar los sollozos.

Los demás no querían creer lo que les decían negaban con sus cabezas, Leeteuk seguía incrédulo ante la noticia se habían llevado a su mejor amigo, comenzó a llorar de solo pensar que lo podría perder para siempre.

—Dime que es mentira – Teuk tomaba de las muñecas a Kangin y lo miraba fijamente – di que solo es una de tus estúpidas bromas – no podía contener las lágrimas.

— Yo también quisiera que fuera una broma – trataba de retener las lágrimas – pero no lo es, llegue demasiado tarde, no pude hacer nada para protegerlo – Kangin comenzaba a llorar.

Yesung no quería sufrir otra perdida más, no lo soportaría otra vez, fue demasiado duro perder a sus padres y eso casi lo mato, perder a su princesa el motivo de sus alegrías y de seguir adelante era como recibir una puñalada en el corazón, camino hasta Kibum y se abalanzó sobre de él tomándolo de la camisa: ¡porque no lo protegiste! – Estaba enojado – ¡si lo hubieras protegido él estaría en estos momentos con nosotros! – Hangeng lo separo de él y lo abrazo para que no se volviera a abalanzar sobre de él - ¡es tu culpa por no protegerlo! Yo no puedo perder a otra persona – comenzaba a llorar – no lo soportaría una vez más – perdió las fuerzas de sus piernas cayendo de rodillas al suelo – ya no podría – Ryeowook se acercó a abrazarlo y este le correspondía – Wookie por favor dime que él va a estar bien por favor – Wookie con los ojos inundados en lágrimas consolaba a su amado, ya habían pasado y superado la muerte de sus padres pero esta vez era más difícil el golpe era por partida doble su mejor amigo y hermano de su amado estaba en peligro.