Éxito [Chaelisa]

❛Final❜

[1 Año Después]

—¿Te ayudo con eso, linda? —Sonrió una joven quitándole una carpeta de encima a la menor.

—Podía sola. —Hizo un leve puchero que la mayor no pasó por desapercibido.

—Claro, toma y cáete por las escaleras.

—Eres una mal novia.

—Si lo fuera ya me hubieras dejado. —Triunfante, Lisa abrió la puerta de la oficina de Rosé dejando que ambas entrasen. Apoyaron las carpetas arriba del escritorio y la rubia, nuevamente, se dedicó a usar su teléfono celular.

—Si fuera tú, iría a mi oficina a trabajar. Jimin ya te va diciendo dos veces en esta semana que vayas a tu oficina y que no andes como una mosca aquí dentro. —Explicaba acomodando papeles.

—Pero te extrañaría mucho~

—Tu oficina está al lado, Lisa.

—¡Bien! Es que estoy muy feliz de que la compañía haya vuelto a abrir. Tardó un tiempo pero finalmente mi vida es realmente perfecta. —Se levantó tomando las manos de la menor.

—Créeme que también lo estoy pero si quieres conservar tu trabajo esta vez, ve a trabajar. Prometo llamarte cada media hora ¿si? —Le sonrió en un intento de convencerla.

—Ayer prometiste lo mismo ¡no nos vimos hasta el receso!

—Lalisa, de verdad suenas muy desesperada, —rió, —nos vemos todos los días, ¡vivimos juntas en un solo departamento! Por favor, no exageres.

—Eres mi bella novia, yo no exagero. —La tomó de la cintura, en aquel momento se abrió la puerta.

—Como lo supuse, —rodó los ojos, —¡Lalisa vete a tu oficina! —Bufó.

—¡Vamos, Jiminnie! Te estás volviendo muy amargado, YoonGi seguro te está contagiando.

—¿Disculpa? —Habló Min apareciendo detrás de la puerta.

—Que los quiero mucho mis jefecitos. —Sonrió.

—En parte tiene razón, Jimin, estás estresándote mucho. —Murmuró el pelirrojo.

—¡Pero..!

—Es la única realidad. Y tú Manoban, regresa a tu oficina que no por nada tratamos de ponerlas a ambas juntas.

—Bien. —La rubia aún así no se encontraba en un estado de acuerdo. —Nos vemos en unas horas, Rossi. —Le dejó un corto beso en los labios.

—Nos vemos Lissi, ya no te metas en problemas. —La saludó.

—Claro que no. —Los tres salieron de la oficina y acompañaron a Lalisa.

—Por favor Lisa, trabaja o tu novia llegará a un puesto más alto y se quedará con nosotros en el piso treinta.