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Cold Coffe: No te preocupes, así pasa algunas veces

Escribo esto después de leer el mensaje de poché, sonriendo a medias. Es cierto que no quiero que le pase lo mismo que a mi, he estado tan absorta en mi propio dolor, que no puedo concentrarme en otra cosa, y se siente de la mierda. No puedo dormir. No puedo comer. Estoy en una completa vacuidad emocional, ni siquiera a la persona que más odiara le desearía este sentimiento, de adolescente con el corazón roto. (No, Bueno tal vez si lo haría)

Ella está conectada, ve mi mensaje, y no tarda mucho en responder.

Poché: Seh u.u bueno, espero no se ponga incómodo por mis pensamientos absurdos

Cold Coffe: No te preocupes, ¿Quieres hablar? Esta vez me atreveré a gastar el poco saldo que me queda contigo

Poché: AYYYY ^-^

Poché: Está bien

[...]

-¿Hola?- Digo parándome de la cama y llegando hacia mi ordenador, sacando una libreta y un lápiz de mi mochila, dibujando cosas aleatorias.

-Hola- Contesta despacio, parece avergonzada, y creo saber por que, después de todo hace poco se me declaro, y ahora dijo que está confundida. Era algo extraño pero creo que podría tolerarlo, después de todo se convirtió en mi amiga.

-¿Que hiciste hoy, pochas? Cuéntame tus locas aventuras- trato de sacar tema de conversaciones para que el ambiente telefónico no fuera tan incomodo y tenso. Ella ríe, eso es buena señal, yo sonrío, al parecer todo volvió a la normalidad.

-No hice mucho en realidad, solo estuve con mis.....amigas- termina la frase, algo insegura.

-Vaya, aunque se nota que eres de las chicas que tiene muchas amigas- Digo algo contenta de que la pasó bien, aveces me gustaría tener algún amigo o amiga de verdad con los que puedas desahogarte de todo lo que te pasa, como un balde para vomitar humano que te puede dar consejos y hacerte sentir mejor.

-Eh.....Si, tengo muchas amigas. Hacemos todo tipo de cosas juntas, siempre compramos el desayuno en una tienda cerca de la escuela antes de entrar- explica tartamudeando un poco pero con un tono divertido- Mariana es muy popular con los chicos ¿Sabes?

-Entonces tú debes serlo también- comentó sonriendo

Hay un silencio aun más incómodo que el anterior, tan tangible que podría cortarse con un cuchillo. Ella suelta un suspiro para después soltar una risa nerviosa.

-Si, supongo. He recibido algunas cartas de admiradores-comenta, y luego suelta una carcajada como niña pequeña presumiendo su nuevo juguete. Yo rio casi a carcajadas-¡No te rías, que es cierto!- contesta, pero ella también se ríe.

-oh, bueno pues...a mi me prestaron un lápiz, pero no cualquier lápiz- Digo, haciendo una dramática apuesta- Un lápiz.... ¡De puntillas!

-Eso debe ser amor puro-Dice, riendo casi a carcajadas.

-Lo se

Sonrío, y el ambiente parece calmado, el silencio no es incómodo como antes, s un silencio solo para iniciar otra conversación.

-¡Quiero verte! deja tu misteriosidad y déjame verte-dice de repente, haciéndome dar un respingo.

-Bueno, esto es un poco complicado de comprender pero bueno....lo qué pasa es que no tengo cara.

-No me vengas con eso ahora, no creo que sea tan complicado vernos por videollamada alguna vez- dice en un tono suplicante, podría jurar que estaba haciendo un puchero.

-Bueno, ya veremos después- Digo resignada dando un suspiro.

[...]

Es viernes último día de clases de la semana, me siento emocionada y a la vez fatigada. El viernes suele ser el día más largo de clases o bueno así lo siento yo, Iusacell por ser el último solo quiero que acabe y ya, tengo tanto sueño, solo quiero dormir, ayer me desvele hablando con poché, y no me arrepiento para nada, me encanta, hablar con ella claro, pero desearía estar en mi cama.

-Bien, el día de hoy el grupo B expondrá en esta clase para su evaluación de artes- dice el maestro al empezar la clase, es la tercera, solo pienso en que termine e ir a comer- Muy bine, chicas adelante- dice con amabilidad.

Normalmente pasaba esto, otros grupo exponían en otro que no fuera el suyo.

Por la puerta entran cinco chicas, cuatro con faldas cortas y blusas muy ceñidas y un poco de cara en su maquillaje. Hay una que me parece familiar, no presto mucha atención quizá solo me la tope por ahí, es bajita con cabello azul, esta agachada así que no presto atención y comienzo a rayar mi libreta.

-Muy bien , mi nombre es Diana, ella es Norma, ella Kenia y Ariana y ella es María José- Al escuchar ese nombre volteo y veo que la chica levantó la cabeza, el corazón me da un vuelco es ella, María José, Poché.

Me sorprendo tanto que me acomodo en el asiento y hago algo de ruido, tanto que hace que volteen a verme.

-¿Todo Bien señorita Calle?- pregunta mi profesor a lo que solo respondo con un leve asentimiento de cabeza- Bien, empiecen.

Poché sonríe, no quiero escuchar su voz quizá si es ella o tal vez no y no quiero confirmarlo en un 100% o me dará un infartó y prefiero que darme con la duda.

Comienza hablando ella y maldita sea, es su voz, estoy confundida tal vez no se la María José que yo conozco, aunque bueno su cabello, no, no puede ser.

Siguen hablando las otras chicas algo nerviosas y leyendo las notas que seguro Poché hizo para ellas, ya que ella es la única que conoce el tema al parecer.

-Y eso es todo, gracias por su atención- dicen todas al mismo tiempo, y justo suena la campana, el receso inicio y salen todos del salón, incluyéndolas.

-Rápido, poché nuestra comida-Dicen todas al unísono.

Quizá por eso estaba tan nerviosa cuando hablan de sus amigas, por qué solo es la sirvienta del grupo, por así decirlo. Quiero golpearla, vaya que quiero golpearla, pero no puedo hacer, no ahora, no aquí. ¿Debería decirle que se quien es, o solo callarme y fingir que no la conozco?

[...]

Cold Coffe--CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora