Por tu culpa caí... de nuevo.

16

Capitulo 16

-Yo no veo nada, no veo ojeras-Le respondí viendo su suave y tersa piel, y vaya si sabía que era suave. Entonces mis manos empezaron a picarme pidiendo tocarla de nuevo.

-¿Seguro?-Pregunto con la mirada brillante de duda pero más calmada y sonriendo

-Claro, ahora, vamonos-Y sin más me concentre en el camino, como si llegar al centro comercial fuera la prueba de fuego de un combate, pero, ¿combate con quien? Tal vez con la creciente temperatura de mi cuerpo.

-______, ¿con quien iras a la fiesta?, normalmente las chicas van acompañadas-Empezó a hacerle la platica Ahra.

-¿De verdad? Oh Dios santo, no lo sabía, pues no lo sé, tal vez le diga a Yesung oppa-Su voz era algo resignada

-¿No trabaja ese día?-Ahra tenía razón, por lo que sabía, el trabajo de el hermano de ______ en esa época era aún mayor, mala suerte para ella

-Rayos, es verdad, demonios ¿que haré?-Estaba realmente preocupada por eso, vi a mi hermana por el retrovisor y tenía un brillo especial en los ojos, entonces supe que pensaba lo mismo que yo, aun que claro, yo no pensaba admitirlo, pero tampoco negarlo, solo mantenerme neutral como últimamente lo he hecho.

-Podrías ir con Kyu, el probablemente estará solo, y de paso te presenta a todos los que irán, para que no te sientas rara con tantos desconocidos alrededor-Esa niña, era tan pequeña y su mente trabajaba siniestramente, me preguntaba de quien habíamos heredado eso.

-Oh, sería estupendo, pero no quiero ser una molestia para Kyu-Se ruborizo volteando a verme como pidiendo permiso.

-Vamos ______, tu sabes que eso es lo de menos-esta vez hable yo, era ilógico, dormimos juntos y ahora se preocupaba por eso. Por dios Kyuhyun, ¿es que acaso no podías pensar en _____ sin relacionarlo con sexo?

-Oh, entonces, creo que tendré que abusar de ti-Rayos, ella me dio la pauta para mal pensar eso, solo pude sonreír conteniendo la risa. Adivinó mi pensamiento al verme y roja totalmente se volteo de nuevo a ver a Ahra.

-Y... ¿Has pensado en algo específico para tu vestido?-Definitivamente quería cambiar de tema.

-Pues, de preferencia que sea azul, en realidad no pensé en algo especifico.

-Oh, ya veo

-¿Tu pensaste algo?

-Eh, no sé, no soy mucho de vestidos o tacones, pero por ser tu haré el sacrificio-Soltó una risita encantadora, el tema no era algo que me interesara así que solo me concentre en el camino y la música hasta que llegamos.

Henos aquí, este iba a ser un largo día, por más hermana menor y ángel endemoniadamente hermoso, seguía dándome dolor de cabeza el pensar que debía recorrer todas y una cada una de las tiendas de 10 plantas.

Narra _____

Cuando llegamos al centro comercial, fue como llegar a otro mundo, la pequeña Ahra me mostró varios vestidos cortos, creo que yo había imaginado mal la fiesta, pues pensé en vestidos de noche, pero no, ahí estábamos viendo algo más juvenil.

Kyuhyun no entraba a las tiendas, se limitaba a quedarse afuera esperando, y eso me tenía un tanto preocupada, pues quería su opinión acerca de lo que me gustaba, no quería pasar una vergüenza frente a tanta gente.

Recorrimos varias tiendas y subíamos de piso, no sabía cuanto tiempo había pasado, y de hecho Kyuhyun nos preguntó varias veces si no teníamos hambre, pero nosotras no podíamos comer nada aún, si no, cuando encontráramos un vestido perfecto, terminaríamos pidiendo una talla incorrecta, teníamos que probárnoslos antes de ingerir algo además de agua.

En un buen momento, la pequeña Cho salió del probador de una tienda, vistiendo un hermoso vestido azul, bueno, tanto como vestido no, era algo como un vestido combinado con un blusón color azul rey, era holgado hasta las piernas, y ahí había una pequeña parte que se ceñía a las piernas, en cuanto a las mangas había una un tanto larga y del otro lado un grueso tirante cubierto por pedrería de fantasía.

-¿Qué te parece este?-Salió y se miro en el espejo, sin duda era hermoso, parecía como mandado a hacer.

-Wow, Alegría, sin duda ese es para ti, ni una modelo podría lucirlo mejor.

-¿De verdad? De hecho me gusta mucho, ¿debo llevarlo?

-Si yo fuera tú, estaría ya en la caja pagando.

-Pues ni hablar, voy a cambiarme- Y así desapareció de nuevo dentro del probador para ponerse su ropa.

Yo por otro lado, estaba en medio de un dilema, había demasiado hermosos vestidos y me era difícil elegir uno, estaba un vestido rojo vivo ceñido de la parte de arriba con tirantes y una falda amplia abajo, o uno color blanco con escote en la espalda, había varios negros muy hermosos, y por último, un bonito vestido rosa oscuro que me encantaba, justo en ese momento volteé resignada y vi algo que me encanto, corrí a tomarlo y lo observé, era justo lo que buscaba, rosa claro sin mangas ni tirantes, en un costado en la parte de la cintura salían varios pliegues que se expandían horizontalmente por el vestido, cubierto por algunos diamantes de fantasía, era lo suficientemente largo como para no parecer una chica fácil, pero lo suficientemente corto como para no sentirme una señora. Fui de inmediato al vestidor y me lo puse con cuidado.

Era realmente hermoso y era justo de mi talla, no lo dude más, volví a cambiarme y corrí a la caja, vaya, era algo caro, pero no había trabajado como enajenada de en balde. Cuando salí, ahí estaban los hermanos Cho esperándome, miré a Ahra y las dos sonreímos demostrando alivio, creo que hablaba por ambas cuando decía que nos quitamos una gran carga de encima.

-¿Ahora si podemos ir a comer?-pregunto ya fastidiado Kyuhyun.

-Supongo que si-Le di una sonrisa.

-Pues vamos, o me desmayaré aquí de hambre y será culpa de ustedes dos-Iba a empezar a caminar, pero la pequeña Alegría hablo.

-Me temo que tendrán que ir ustedes dos, yo voy a ver a una amiga justo ahora que me está esperando en el Starbucks de la esquina, así que, te veo luego ______-Sacudió su mano y se fue.

-Vaya, ella tiene más vida social que yo-Fue lo único que me salió mientras veía a la nada.

-Ella tiene más vida social que todos, ¿vamos?-Voltee a verlo y me sonrió, le devolví la sonrisa y comencé a caminar tras el.

-Señorita ______, hoy le daré para comer un gran banquete, todo un manjar-Empezó a bromear, mientras retiraba la silla para que me sentará.

-Oh, lo espero con ansias, si la comida es tan buena como el desayuno que hizo para mi, tendré que buscar un registro civil cercano-Le seguí la corriente, cuando se alejó de ahí lo único que pude hacer fue ponerme a jugar en mi celular, pero genial, me quedé sin batería, resignada, mi mente empezó a divagar, me sorprendí imaginando algo con Kyuhyun, bueno, no lo estaba imaginando, más bien, lo estaba recordando. Recordaba su enorme cuerpo sobre el mío, mientras disfrutaba su perfume invadiendo mi mente, su sensual frente cubierta de sudor, y sus ojos, esos ojos que estaban oscurecidos por el deseo. La calentura subió a mis mejillas y se acumuló ahí.

-¿Te encuentras bien?-Eso me regresó de golpe a la realidad

-¿Eh? Ah si, perfectamente-Traté de no tartamudear

-¿En serio? Estas roja, tal vez te quiere dar fiebre-Quiso acercar su mano, pero salté hacia atrás tanto como la silla me permitió.

-No, no, de verdad estoy bien-Solo se encogió de hombros y puso frente a mi una Big Mac, papas a la francesa y un refresco. El cual tome en seguida y le di un sorbo para ver si mi mente se enfriaba un poco.

Al poco tiempo, un incomodo silencio nos invadió, comíamos lenta y silenciosamente, y para ser sincera me estaba desquiciando. Y mis impulsos me decían que lo arrastrara a un lugar privado y repitiera lo de la otra noche.

-¿Terminaste?-Asentí con la cabeza tomando aún lo último de mi refresco para dejar el vaso desechable sobre la charola, la tomo y fue a tirar todo al basurero, regreso y cargo con mi bolsa en el que llevaba mi vestido.

En el auto fue lo mismo, y yo estaba desesperada, así que busque de que hablar.

-¿Puedo poner música?-Solo asintió y prendí la radio.

Encendió el auto y comenzó a conducir, yo solo me recargué en el respaldo y me dedique a ver el ya oscurecido cielo, el cual estaba estrellado, de pronto deje de ver edificios altos y el número de casa fue disminuyendo. No quería ser histérica como la primera vez, pero esto no parecía para nada el lugar por donde habíamos llegado, no es que fuera incomodo perderme en una camioneta con el chico más ardiente de Corea, pero mis impulsos no me ayudaban. Fue cuando algo que definitivamente era sospechoso pasó, Kyuhyun freno el auto, apagó la música y se quedó viendo al frente.

-K...Kyu... ¿Qué pasa? ¿Se acabo la gasolina?-No quería dejarme llevar por la histeria de nuevo

-Ya no puedo con esto ______, llevo días en trance cargando con esto, y me está desesperando-Volteo a verme con sus profundos ojos

-¿De que hablas?-Estaba asustada, pero algo me decía que no era malo

-De esto-

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