POV RIN
La oscuridad me envuelve, puedo ver a mi alrededor los árboles elevarse majestuosamente, ¿Por qué corro? No lo sé, pero mis pies no dejan de adentrarse en ese tétrico lugar, en algún rincón los lobos aúllan, la luna es blanca y brillosa, una luna llena sin duda, me permito mirar a mi alrededor, con la luz que me ofrece distingo el terreno de los Taisho, estoy en la mansión, mis pasos son torpes y ante una voz autoritaria caigo en la nieve, he logrado salir a un blanco prado, de entre el bosque le veo salir, es alto, camina con seguridad, me mira con burla, sus ojos azules parecen mirara dentro de mí.
-hueles delicioso para ser una mate inmadura-murmura el hombre con voz profunda.
Retrocedo ante su cercanía, el miedo me hace querer correr, cuando me giro e intento pararme, él se lanza a mí, pero ya no es un humano sino un gran lobo con rojizo, a nada de atraparme le veo salir volando mientras un gruñido resuena en la oscuridad, apenas sufro un rasguño en la cara, que me aturde un momento.
-corre Rin-ordena la voz conocida, miro sobre mis hombros y veo el blanco pelaje.
Es él, mi lobo, pienso corriendo hacia la mansión, ha venido en mi ayuda, no debo tener miedo, él siempre estará para mí, siempre, pienso mientras pierdo el aliento, mi cuerpo termina a unos pasos de la mansión, estoy agotada, no puedo levantarme, es como sí, mi cuerpo se entumeciera, cierra los ojos sin poder evitarlo.
Es un sueño cierto, estoy recostada en mi habitación boca arriba, mi mirada está centrada en la suya que es dorada, elevo mi mano para acariciar su rostro peludo, ladea su cara al sentir mi contacto, le veo cerrar los ojos como si lo disfrutara, es cálido, me agrada esto, sonrió recostada de lado, sin dejar de tocarle la cabeza, de repente un dolor me atraviesa la cara, uno que desciende por todo mi cuerpo, se le ve preocupado, sus hermosos ojos parecen tristes, trato de soportar aquello.
-tranquilo es solo un sueño-menciono.
Intento calmarme, cierro los ojos con fuerza y muerdo mi labio para callar un grito, siento su cálido aliento en mi cara, ¿acaso su aroma debe ser delicioso? Puede un perro tener aliento a chocolate, embriagante pienso sonriendo, cuando su lengua áspera y húmeda tocan mi herida, abro los ojos sintiendo alivio, el ardor desaparece poco a poco, le miro y parece estar muy concentrado, parece humano, pero solo es un sueño, cierro los ojos una vez más para dormir profundamente.
POV SESSHOMARU
-Inaceptable-gruño a los lobos que han llegado esta mañana.
-perdón señor, no pudimos llegar antes-se disculpan apenados.
-deben de dar gracias de que estuviera mejor, no puedo imaginar que hubiera pasado si él-menciono telepáticamente a los dos lobos grises.
-a partir de ahora juramos ayudar a protegerla-dice uno de ellos.
-vayan a verificar que esos malditos Gélidos han dejado nuestra propiedad-ordeno molesto, no puedo controlar mi enojo, pensar que Rin pudo morir… no, eso jamás.
Escucho la puerta trasera abrirse, le miro salir con una gran sonrisa, su hermoso rostro está intacto como si de verdad todo hubiera sido un sueño, por suerte mi saliva es curativa o si no, el maldito veneno que suelen utilizar los Gélidos, hubieran provocado que su corazón se detenga, no puedo imaginar un mundo sin Rin.
-hola precioso-saluda inclinándose y acariciando mi rostro, actuó como un sano y feliz perro moviendo con ánimo mi cola-vaya alguien se siente mejor-murmura sonriendo.
Un convertible se detiene en el camino, una morena se baja sonriendo, Rin se levanta y la espera animada, cuando están cerca se dan un abrazo afectuoso.
-de verdad es precioso-comenta la chica mirándome y saco la lengua animado.
-vaya creo que esta mejor-menciona Rin algo desanimada.
-entonces publicaras y pegaras carteles en todos lados, para encontrar a sus dueños-pregunta la chica.
-es lo correcto, aunque me gustaría quedarme con él-dice Rin desanimada.
-si no aparecen te lo quedas-anima su amiga.
-pero Sango, míralo, quien podría olvidar a un animal tan bello como él-habla Rin mirándome con adoración.
Desearía quedarme para siempre así, pero tristemente, cuanto más curado este, mi cuerpo de lobo tomara su forma verdadera, entonces no creo que le agrade tenerme como mascota.
-bueno amiga pues empecemos, no quiero verte triste, lo mejor es que regrese con sus dueños, imagínate puede ser el amigo de un niño o niña que estén llorando por él.
-tienes razón-menciona no muy convencida.
-a ver amigo una foto-menciona la morena y me saca una foto con su móvil.
Pasan las siguientes horas metidas en Facebook posteando mi imagen, me suben en la parte de atrás del auto, mientras vamos al pueblo cercano, no puedo evitar sentir el viento en mi cara, diablos, termino con la lengua por fuera disfrutando del paseo, a veces olvido que transformarme en lobo puede darme ciertos placeres, estamos tan sumidos en nuestras peleas, en cuidarnos las espaldas que olvidamos mirar la naturaleza que nos rodea a través de los ojos de un lobo.
POV RIN
Hemos dejado tapizado el pueblo completo, en caso de que su dueño viva por los alrededores y ya que no le quedara de otra que bajar al pueblo por provisiones, terminara por ver su imagen, pienso mientras regresamos, le miro por retrovisor, está durmiendo plácidamente en la parte de atrás, mi vista se clava en mi rostro, mientras Sango canta horriblemente, me dedico a observar donde se supone debo tener una marca, mirar mi piel tal cual, me deja tranquila, es un hecho que solo fue un absurdo sueño, ¿Cómo podría un humano volverse lobo? Ni que viviera en Forks, rio.
-bueno amiga nos vemos-se despida Sango con la mano, veo como se aleja el auto.
Cuando desaparece miro al Husky siberiano, le sonrió y hecho a correr a la casa.
-atrápame si puedes-le grito riendo cuando escucho sus ladridos.
No tarda en nada en alcanzarme, corretea a mi alrededor sin dejar de sacar la lengua, en poco tiempo le he tomado cariño, cuando se vaya, me detengo repentinamente y lo veo sentarse frente a mí, mirándome con la cabeza de lado.
-no quiero perderte-murmuro y me lanzo a abrazarlo.
Mi corazón se acelera, mi cuerpo parece arder, de repente una calidez me rodea, como si todo lo malo de mi vida, las lágrimas, tristezas, el dolor fueran curados, y las heridas del corazón sanaran dejando solo una paz en él, y surge una gran necesidad, hay algo que debo encontrar, o más bien a alguien, el sonido de un auto detenerse me hace levantarme, es un auto impresionante, de él baja un hombre, no puedo apartar la mirada, mi garganta se seca por la impresión, es muy atractivo, camina directo a mí con paso seguro, con arrogancia, con superioridad, como si el mundo le perteneciera, se retira los lentes negros y sus ojos rojizos me cautivan, una sonrisa surge de sus labios, la piel se me eriza y el corazón enloquece al escuchar su voz.
-hermosa-dice mirándome de arriba abajo.
-deje de mirarme de esa forma-me quejo al sentirme desnudar con la mirada.
-te aseguro que podría hacerte tocar las estrellas con un simple rose-murmura y le creo.
- ¿Quién es usted? ¿Qué hace aquí? -pregunto al percatarme de lo raro que haya llegado hasta la mansión cuando este siempre está cerrado desde la reja, acaso al salir Sango quedo abierta, esta idea me perturba, porque en ese caso, mi abuelo estará muy enojado.
-Rin-tiemblo al escuchar la voz reprobatoria de mi abuelo, ahora sí que estoy en problemas.
-abuelo, no sé cómo pudo entrar-trato de excusarme.
-simpática nieta Jaken-menciona el tipo guapo ¿conoce a mi abuelo?
-nadie nos avisó que vendría joven Naraku, bienvenido, enseguida dispondré todo para que su estancia sea placentera-se inclina mi abuela con elegante reverencia.
Miro al tipo que me observa de igual forma, su cabello negro se mueve con el viento, entonces él, pienso bajando la mirada, es un Taisho.
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Mi querido guardián *Finalizada
FanfictionUn amor prohibido, una mujer nacida para uno de los hermanos y un protector enamorado sin derecho al amor.