Mi querido guardián *Finalizada

Matando su fé

El lobo aúlla a la luna, otra noche que llora en la oscuridad, su amada se ha ido, no la encuentra, no hay conexión, no hay palabras y mucho menos su aroma, ¿Dónde está? Se ha preguntado cada maldito día de estos dos meses, el lobo blanco sufre en silencio sin poderla encontrar, está viva, de eso no tiene dudas, porque en caso contrario el mismo estaría muerto, ¿Cómo está? No lo sabe, pero jura a la luna que si esos malditos le han tocado un solo cabello morirán.

POV NARAKU

Doy un golpe a mi escritorio, es inaudito que vengan mis sirvientes y de nuevo me digan que no saben su paradero, ¿Cómo pudo desaparecer? Mirar a mi hermano sufrir día a día, ser el único que puede escuchar sus lamentos, las llamadas constantes que le hace, su nombre es pronunciado más de mil veces al día, él sufre y yo también, Rin ¿Dónde estás?
-señor los Gélidos siguen como si nada, Bankotsu va y viene de su empresa, no hay nada sospecho, incluso sus fieles sirvientes son los mismos, los únicos y a los cuales conocemos bien-da su informe Hakudoshi.
-carajo Hakudoshi, no pudo desaparecer como si nada-exclamo molesto.
-tampoco se encuentra en el castillo de Bankotsu en Inglaterra, hemos revisado cada uno de sus propiedades y las de sus fieles sirvientes, no está en ninguno.
Me dejo caer en la silla y le miro sin saber que más hacer, han pasado dos meses sin saber de ella, no puedo soportar estar más tiempo así.
-tal vez no estamos siguiendo a los correctos-Kikyo es quien habla y todos la miramos.
-no tenemos más enemigos que los Gélidos-exclamo bufando- ¿Quién se metería con el clan Taisho?
-tal vez estén probándote a ti-dice y me hierve la sangre, el silencio se prolonga antes de que estalle.
- puedes irte Hakudoshi cualquier cosa mantenme al corriente.
-con permiso señor-sale sin mirar a Kikyo.
-no es descabellado mi idea-exclama la mujer altiva.
-disfrutas sabiendo que ella no está-digo parándome y rodeando la mesa-te gusta ser quien abrace cada noche a mi hermano-digo amenazador parándome frente a ella-tal vez seas tú quien la tiene.
-por favor Naraku-dice rodando los ojos-no soy idiota, acaso crees que le haría algo a esa niña, tomando en cuenta que tu padre de verdad la apreciaba.
-tal vez eso te molesto, celos Kikyo-dije mirándola y con las manos en sus hombros.
-no, para nada-dijo evitando mi mirada y empujándome para soltarla.
-antes eras la única reina, la única chica que veíamos Sesshomaru y yo, y ahora en la única que pensamos es en Rin-comento.
-por favor Naraku, no te hagas ideas tontas-se levanta acomodando su falda-Sesshomaru es mi amigo y tú, tu solo eres el alfa de mi clan.
-no soy idiota-la detengo del brazo-puedo sentir tu aroma, como te pones en mi presencia-la siento temblar-acaso te has enamorado de mi-no puedo creer que haya dicho aquello.
-no me hagas reír-dice soltándome-estaría loca para sentir algo por alguien tan arrogante como tú-exclama y avanza a la salida.
-no te creo-hablo y ella se detiene.
Se gira para mirarme altiva, su labio se frunce levemente y sus manos se posan en su cadera, pasa la lengua por sus rojos labios, y avanza de nuevo a mí, su cabello negro y largo se mueve en cada paso, me quedo como idiota mirándola, se planta a unos pasos de mí y sin más me besa, joder, me besa de una forma única, ninguna amiguita me ha besado de tal forma, algo dentro de mi hierve, de repente siento una electricidad correr por mi cuerpo, ella se separa con los ojos abiertos, tal parece no he sido el único al sentir aquello.
-no me gustas-declara antes de casi correr fuera de mi oficina.
-diablos Kikyo, tal vez no te guste, pero sí te hago calentar-murmuro sonriendo.

POV KIKYO

Me mojo la cara sofocada e indignada, primero me acusa de ser la responsable de la desaparición de la niña, después de que estoy enamorada de él, estúpido arrogante, nadie en su sano juicio estaria enamorado de él, nadie en su sano juicio, pero cuando uno encuentra a su mate, pierde por completo ello, no, no puede ser, me sostengo del lavabo, no puedo ser la mate de Naraku, no puedo desear tirarme sobre él, disfrutar de su cuerpo sin restricción, no puedo desearle de esta forma enfermiza, aprieto los labios, estoy seguro que Inu no estaría feliz de esto, hay señor Taisho, se fue dejando muchas inconclusas con sus hijos, pienso mirando el techo.
-detente-sujeto su brazo y le quito la botella que esta por llevarse a los labios.
Su cuerpo casi cae, su mirada está perdida, desearía poder entenderle, hablar con él, pero se niega a hacer uso de una libreta, Tablet, o lo que sea para que le entienda, está sumido en su dolor, y aquí estoy como su mejor amiga acompañándolo para evitar que termine mal, lo abrazo hasta que duerme, sí le abrazo como dice Naraku, pero no hay nada, ya no hay ese sentimiento de tiempo atrás, ¿Cuándo se esfumo? ¿Cuándo deje de ver a Sesshomaru con ojos de tonta enamorada? ¿en qué momento empecé a ver a Naraku?
Me levanto sobresaltada al ver a una persona en la puerta de la habitación de Sesshomaru, él me mira de forma extraña, el aire entra por la ventana, su cabello se mueve al igual que el mío, y nuestros aromas se mezclan, desatando una tensión sexual jamás vivida, no soy dueña de mis actos, no hay nada que me detenga, mi cuerpo se mueve hacia él, Naraku me espera para rodearme con sus brazos, no hay necesidad de palabras cuando nuestros cuerpos hablan, nuestras lenguas ya unidas bailan salvajemente y lanzo un gran suspiro al sentir su aliento a menta.
Caminamos sin dejar de besarnos hasta su habitación, esta atracción nos sobrepasa, nunca imagine que estar con tu mate fuera así, mis instintos enloquecen, una vez que entramos a su habitación y la oscuridad nos invade, la ropa termina en el suelo, sus manos fuertes han hecho añicos mi blusa y falda, mientras mi yo le he arrancado la suya y desabrocho sus pantalones con desesperación, no es mi primera vez, no soy inexperta, yo también he vivido y he conocido, sé que hacer.
Por ello cuando mi boca se abre gustosa para comer el miembro que me ha dejado muda por su tamaño, muevo mi boca de forma experta, apretando, succionando y moviendo mi lengua a lo largo del hinchado miembro, no puedo evitar disfrutar sus gruñidos varoniles que salen de su garganta, ni en mis sueños más locos me imagine con Naraku, se supone le detestaba, pero que poca del destino, pienso cerrando los ojos y saboreando su piel salada.
Jala de mí, sus ojos rojizos brillan en la oscuridad, están llenos de pasión como los míos, me pone boca abajo en el colchón de su cama y me obliga a abrir las piernas, apenas y me estoy acomodando cuando el salvaje se ha metido en mi vagina, me siento invadida por su miembro hinchado, como puede ser tan grande y caber en mi pequeño orificio.
-cállate Kikyo solo disfruta-me dice y me deja peor al darme cuenta que ha leído mis pensamientos.
Se mueve de forma rápida, entrando y saliendo de mi vagina húmeda, su mano masajea mi seno, apretando el pezón y succionando mi cuello, el dolor es placentero, más aún cuando se sale de forma brusca, me gira alzando mis piernas para colocarlas en su hombro, me mira antes de penetrarme, grito al sentirme de nuevo caer en un profundo pozo de placer, este hombre dios, se mueve como dioses.
-lo sé-le miro su risa arrogante.
-deja de leer mi mente.
-no puedo evitarlo, pero me gusta.
-idiota.
-eres una gata salvaje.
-y tu un perro idiota.
-nunca pensé que disfrutaras del sexo fuerte y masoquista-dice burlón, empujando su miembro hasta lo más profundo de mi cavidad.
-estúpido-murmuro entre jadeos mientras mi cadera se mueve a su ritmo, para profundizar la penetración.
Mi cuerpo se tensa, mi mente queda en blanco, y solo puedo sentirlo a él, olerlo, tocarlo, besarlo, fundirme en uno con él, no hay duda, cierro los ojos al gritar su nombre, soy la mate del idiota de Naraku y pese a deber odiar la idea...
-te fascina-termina él sonriente al venirse en mi interior.
Continuara...