Puedes confiar en mí

Capítulo 10: ¿Qué hice?

Me despierto con el primer tono de la alarma y cuando abro los ojos lo primero que veo es a Beverly aún dormida sobre mi pecho y una sonrisa se dibuja en mis labios.

- Bev, arriba – la llamo agitándola suavemente – es hora de levantarse, hay que ir a la escuela – digo y observo como se despierta de a poco.

- ¿Darren? – me mira desorientada.

- Arriba, hay que arreglarnos o llegaremos tarde – le informo y ella asiente aún adormilada.

Observo como se levanta y se dirige directo al baño, yo pospongo la alarma 10 minutos más para darte tiempo a Beverly de alistarse, es mujer y supongo que debe tardar más en arreglarse, me doy media vuelta en la cama y vuelvo a cerrar los ojos.

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- Darren arriba – escucho la voz de Beverly algo lejana – despierta – dice y lentamente recobro la consciencia.

- Buenos días – digo levantándome y entrando directo al baño.

Me despojo de mi ropa y me doy una ducha rápida antes de lavar mis dientes, enrollo una toalla alrededor de mi cintura y salgo del baño, Beverly está sentada en la cama cuando salgo, maquillándose. Entro al armario y cerrando la puerta detrás de mí busco la ropa para hoy, jean azul, franela negra y camisa a cuadros roja, zapatos negros y estoy listo. Paso mi mano por el cabello para peinarme un poco y salgo.

Beverly está ordenando las cosas dentro de los bolsos cuando salgo y me fijo en su atuendo.

Lleva una falda negra algo más arriba de la rodilla con pliegues, lo que imagino que son medias negras que cubren por completo sus piernas y se pierden dentro de la falda, con unas converse blancas tipo botas al tobillo y como cosa rara, un sweater blanco y negro a rayas. Está hermosa. Cuando se voltea con todo ya arreglado y me mira, noto que ha cubierto el moretón de su pómulo de forma casi impecable y este no se nota, si no sabes que está ahí, al parecer es muy buena haciendo eso, y ha dejado su cabello suelto tapando los costados de su cara.

- ¿Lista? – pregunto y ella asiente. – entonces vamos

Mi madre está en la cocina cuando bajamos las escaleras y dándonos los buenos días nos tiende una bolsa de papel a cada uno con lo que sería nuestro desayuno antes de salir y subir a mi camioneta rumbo a la escuela.

Cuando llegamos a esta, bajamos juntos y caminamos al interior del edificio, noto que varias personas nos miran pero los ignoro y acompaño a Beverly a su salón de clases.

- Nos vemos a la hora del almuerzo, en la mesa del fondo de la cafetería – digo antes de que ella atraviese la puerta y sin hablar asiente – hasta entonces – digo regalándole una sonrisa y me vuelvo caminando directo a mi salón.

Cuando llego, está casi lleno y en unas de las primeras filas ya está Benjamín, este me mira y sin necesidad de que me llame me acerco a él y me siento a su lado dejando la mochila en el piso.

- ¿Qué hubo? – pregunta en forma de saludo y yo me encojo de hombros.

- No mucho ¿Y tú? – pregunto y él sonríe.

- A parte de ver en vivo y directo el drama que hizo Anny luego de que le colgaras el teléfono en la madrugada de la fiesta e intentara como loca llamarte ebria mil veces más, no puedo contar mucho – dice divertido y yo río.

- Sabes que con ella ya murió todo, nunca debí meterme con ella en primer lugar – digo y él asiente de acuerdo – es insufrible y se rebaja estando detrás de mí cuando sabe que no quiero nada con ella.