Puedes confiar en mí

Capitulo 42

Darren

Un golpe suave en la puerta hace que me despierte, un momento después la cabeza de una enfermera se asoma por la puerta y nos sonríe a Beverly y a mí que hemos despertado.

— Buenos días - dice amigablemente y abriendo un poco más la puerta, empuja dentro un carrito con diversos materiales, entre ellos, comida y medicinas.

Miro a la camilla donde el padre de Beverly sigue dormido, en la madrugada le han administrado el medicamento para el dolor, el cuál también hace que le dé sueño.

La enfermera nos indica que debemos salir para ella poder asear al señor Kings y ponerle tratamiento.

—Buenos días pequeña - digo dando a Beverly, un pequeño beso en la comisura de sus labios, ella me mira y sonríe tímida.

—Buen día - murmura levantándose.

— Iremos a desayunar mientras usted hace lo que tiene que hacer aquí - le digo a la enfermera y esta asiente cuando yo tomo la mano de Beverly y la guío fuera de la habitación.

— No he cepillado mis dientes - se queja Beverly cuando subimos en el ascensor vacío al piso de la cafetería, y yo me río.

— Ahorita que subamos, debíamos salir para que atendieran a tu padre - le recuerdo y ella asiente.

El cafetín está poco concurrido, solo hay un par de médicos y enfermeros regados en uno y otro lado desayunando o simplemente tomando un café, rápidamente pedimos y pagamos, y nos sentamos en una mesa en un lateral del área.

— ¿Haz pensado en que harán cuando a tu padre le den de alta? - pregunto a Beverly el tema que lleva desde anoche rondando por mi mente, y ella se encoge de hombros.

— Sinceramente, no me esperé que esto pasara tan rápido, y no tengo nada planeado, creo que debo preguntarle a papá a ver qué quiere él - dice y un nudo se hace en mi estómago ante el pensamiento de alejarme de ella, pero no digo nada.

— Se le ve mucho mejor que ayer - menciono tomando mi chocolate caliente y ella asiente terminando de masticar un sándwich.

— Sé que dirás que no hace falta que lo diga, pero en serio nunca me cansaré de agradecerles a ti y a tu familia por todo lo que han echo por nosotros - dice y yo le sonrío.

— Te Amo - digo sonriendo como idiota en lugar de responderle a lo que acaba de decir y ella me devuelve la sonrisa.

— Yo te Amo a ti - dice en voz baja, cómo si fuese el secreto mejor guardado del mundo, y yo me siento inmensamente feliz; a pesar del sitio donde estamos, y las circunstancias en las que nos encontramos, estoy agradecido de poder vivir esto a su lado.

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— Buenos días - Dice el Doctor Williams cuando atravesamos la puerta de la habitación del padre de Beverly, el cuál está ya despierto y comiendo su desayuno semi sentado en la cama.

—Buenos días doctor Williams - saluda Beverly y yo lo hago casi al mismo tiempo.

—Todo por aquí tiene muy buena pinta, posiblemente para esta tarde, y si me aseguran que van a seguir al pie de la letra las indicaciones, podrán irse a casa - Anuncia el doctor y el padre de Beverly lo mira perplejo

— A casa - repite en voz baja cómo si no pudiese creer lo que acaba de escuchar o lo que está pasando a su alrededor - iremos a casa - repite más alto y mira a su hija y sonríe, a lo que ella asiente.

Nuevos golpes en la puerta, y una cara familiar aparece, es mi madre quien nos mira sonriente entrando en la habitación.

— Buenos días - saluda y se dirige a Beverly y a mí quiénes somos los que estamos más cercanos a la puerta, nos abraza a ambos y nos da un beso en la mejilla antes de acercarse a la camilla donde se encuentra el padre de Bev. - Sr Kings, mi nombre es Jessica Jasson, la madre de Darren, es un gusto conocerle al fin - le sonríe radiante y el padre de Beverly le devuelve la sonrisa.

—Es un gusto conocerla señora Jasson, puede decirme Josep - dice el padre de Beverly.

Luego de las formalidades, y las presentaciones, mi madre prácticamente nos obliga a Beverly y a mí a ir a la casa, a ducharnos, cambiarnos y descansar, porque según ella, no se descansa bien estando en los hospitales; por lo que Beverly y yo subimos en mi auto, y vamos directo a casa.

—¿Te duchas conmigo? - pregunta Beverly mientras se desnuda en mi habitación y yo le sonrío y asiento imitando sus acciones y desnudandome yo también.

Entramos en la ducha y no puedo evitar sentirme feliz por todas las situaciones que nos han llevado hasta acá. Aunque han pasado cosas malas y beverly ha tenido que sufrir cosas horribles y su padre también, es gracias a eso que hoy puedo tenerla en mi vida, que puedo tenerla junto a mi y sentirme en paz y de cierta forma, sentirme completo.

— Oye Bev - la llamo - se que quizá ahora que está tu papá, las cosas van a cambiar - digo algo temeroso finalmente hablando en voz alta los temores y las dudas que he tenido en poco tiempo - pero sabes que estoy aquí, para ustedes, para ti - le recuerdo y ella asiente.

— Gracias - dice sonriendo -  en realidad no se que va a pasar de ahora en adelante, pero no quiero separarme de ti, ni de él - dice y suspira - ya veremos qué es lo que vamos a hacer. Lo resolveremos, tu siempre sabes cómo hacerlo - ella asegura y luego se abalanza sobre mi y su cuerpo mojado choca contra el mío - Te Amo Darren Jason, y aunque muchas veces tengo que preguntarme una y otra vez si todo esto es real por lo increíble que parezca, creeme cuando te digo que no quiero irme de tu lado, nunca - dice antes de besarme y con esa declaración me doy por satisfecho perdiendome en su beso y en ella.