(O&B) Omegaverse Asakar (AU)

XII

-Tendremos que decirle a tu padre de una vez.

-Si, pero eso solo traerá más problemas entre nosotros.

-Gakushuu, habla con él, estoy segura de que comprenderá tu situación.

-Si fuera así de fácil, no hubiéramos escondido los niños de el.

-Si el no te ayuda, yo si, buscaremos un lugar para ti y los pequeños.- Le prometió, este suspirando, esperando a que su padre llegara. Probablemente lo tachara de haber dejado a una alguien embarazado, y luego separarse de esta y buscar refugio y consuelo de sus padres.

Pensándolo bien, lo del refugio solo era un pasatiempo. Cuando la puerta se abrió, los niños corrieron hasta él, aun tenían miedo de lo que les pudiera pasar, y el hecho de ver a un hombre pasar con un rostro serio no les daba buena espina. Cuando este se encontró con su esposa e hijo, supuso que querían decirle algo. Sentándose en uno de los sillones. Mirando que detrás del sillón donde estaban estos se asomaban un niño y una niña.

-¿Y bien? ¿Cual es tu escusa para traer a unos cachorros contigo, y sobretodo, solo?

-Me los encontré solos, su madre los había abandonado y su padre era un extorsionista.

-¿Y decidiste adoptarlos sin saber como criar uno? Patético viniendo de ti.

-Llevo un mes y una semana y media cuidándolos, se perfectamente cuidarlos, más de lo que tu podrías cuidar a un cachorro.- Entre ambos se gruñeron, mostrando el disgusto en sus expresiones.

-Ya, querido, no tienes porque ser así con tu hijo. Y tu tampoco deberías ser así con tu padre.

-Lo que sea que me diga, no pienso ayudarlo.

-¿Sin importar que tu hijo este en peligro de muerte? Acaban de incendiar todo el edificio donde vivía. ¿Y tu te atreves a decir que no lo ayudarás?

-....- Miro a los niños, estos parecían asustados de su presencia. Tirando un poco de la manga de Gakushuu para sentirse protegidos.- Él fue a buscar sus problemas, va a tener que hacerles frente.

-¿Que?

-Dejarlo así, madre. Total, sabía que no iba a contar con sus ayuda.- Respondió, levantándose del sillón.- Vámonos niños, buscaremos un nuevo hogar.- Estos corrieron a alcanzarlo.

-Gakushuu.- Vio como este salia de la sala, mirando a su esposo con reproches.- No puedo creer que seas así de descarado.

-Señor Asano, debería considerar-

-No, Mark, tiene que resolver sus problemas solo.- Observo a su esposa salir de la sala, este levantándose para dirigirse a su oficina. Dejando al mayordomo solo antes de que este acudiera con la señora y joven Asano y los niños que este llevaba. Alcanzando les.

-Gakushuu, no te vayas. Veras como encontraremos un lugar para ti y los pequeños.

-Si, con lo descarado que es mi padre.

-Hay muchos lugares para ofrecerte ayuda.

-¿Si, cuales?

-El centro de ayuda es su mejor elección.

-Mark.

-No pienso volver ahí.

-¿Porque no? Podrías reencontrarte con aquel omega, no son tan diferentes después de todo.

-No.

-Joven Asano, en ese lugar le ofrecen educación y ayuda a los pequeños. Incluso se ha convertido en una guardería y clínica, sus conocimientos sobre medicina les ayudara mucho, además que podría enseñar a los niños inglés.

-... N.-

-Es el mejor lugar para los pequeños. Podrían hacer amigos, y estarías la mayoría del tiempo con ellos, es tu mejor opción. Por favor hijo, quiero seguir viéndolos.

-... Esta bien.

-Mark, prepara el auto, nos vamos.- Menciona, mirando a los niños sonriendo y luego a su hijo.- Desde ahora serán familia. Pide los papeles de adopción allá.

-Bueno, soy lo único que les queda, además que no se separan de mi.- Respondió. No queriendo sonar tan meloso. Haciendo reír a su madre.

Ahora tenia que adaptarse.

Mientras en aquella instalación, se podía apreciar a un niño diciendo un nombre una y otra vez. Diciéndoselo a todos mientras señalaba el suéter que traía, dejando al pelirrojo incomodo.

-Haru, ¿porqué no vas a tus clases?.- Le preguntó intentando hacerlo cambiar de conversación.

-Porque el maestro esta enfermo, y no hay nadie quien los enseñe, además, tu ya le enseñastes esos temas, no tengo motivo para que ir si tu lo sabes.

-Te recuerdo que no termine la secundaria.

-Lo se. Pero aun soy pequeño, y pronto sabré mucho más que tu.

-Callate mocoso.- Le dijo, sintiendo parte de su orgullo decaer. ¿Porque el niño tuvo que tener una actitud como la suya y no una mucho más calmada?.- ¿Y que hay de inglés?.

-No le entiendo al profesor, inicia hablando inglés y no le entendemos nada, según él, ya deberíamos haber aprendido eso en nuestras anteriores clases.

-Lo dice cuando esta informado que ninguno de aquí da clases de inglés.

-Y no me gusta como enseñas esa materia.

-¿Porqué?

-Me pegas si digo algo mal.

-Se llama, disciplina.

-Por eso me das miedo. Iré a ver si ya esta limpia la camisa.

-Debería esconderte esa ropa.

-Pero no lo haces porque me quieres.- Pronunció, abrazando a su madre.- Te veo luego, mamá.

-.... Si, portate bien.

-Si.- Respondió, separándose de este, para salir corriendo, observando a una persona entrar por la puerta principal, llevando a dos pequeños consigo, al parecer nuevos empleados, compañeros o clientes. Dejando de mirarles antes de correr hacia los lavaderos.

Mientras estos eran atendidos por una omega del lugar.

-Oh, ¿viene a trabajar aquí?

-Si, y me preguntaba. Si aun tienen espacio para una personas mas. Mi casa ha sido destruida.

-Lo entiendo, déjeme ver si encontramos un espacio libre para ustedes. Y supongo que estos pequeños también se quedaran.

-Y, quería pedirlos en adopción.

-¿Eh? ¿No son sus hijos?.- Se acerco a esta para susurrarle algo.

-Sus padres les abandonaron, y nos hemos encariñado así que quería pedirlos en adopción.

-Comprendo. Bien, buscaremos un lugar en el que nos puedas servir de ayuda y donde puedas hospedarte.

-Puedo ayudar en enseñando a los niños pequeños, ellos no se quieren separar de mi por nada, y cuando lo hacen lloran, se sentirán mejor si estoy cerca de ellos.

-Esta bien, veré si puedo darle un lugar en la sala de bebés.

-Muchas gracias.

-De nada, venga, le mostraré el lugar, mientras buscamos uno en el que puedas estar cómodo.

-Claro.- Respondió, siguiendo a la omega mientras cargaba a los niños para que no se queden atrás.